Mientras más lo pienso más difícil es el hecho de aceptar que me siento de ésta forma, siempre tuve mis momentos de inseguridad, momentos en los que me sentía diminuta, poca cosa, insignificante, insuficiente, momentos en los que me miraba al espejo llorando y me recriminaba a mi misma por ser así, me recordaba cada uno de mis defectos, contaba cada una de mis marcas, repugnaba cada parte de mí, me odiaba, me sentía nada.
Creí que el tiempo, que los años iban a llevarse con ellos esa maldita sensación.
Pero acá estoy una vez más llorando frente a mi espejo, odiando cada parte de mi, sintiéndome poco, sintiéndome nada...🌻SG🌻