Te conocí en mis sueños

Te conozco.

POV AMY

Salí de la casa de los O'Connor, habíamos desayunado todos juntos, pero ahora necesitaba estar sola.

¿Dónde iba a ir? ¿Y si me encontraba Steven? No, el ahora estaría en su trabajo.O allí debería estar.

Fui a la plaza donde me conocí con Robert. No era muy grande pero eso no la hacía pequeña, más bien la hacía hermosa y acogedora, con muchos árboles y plantas, todo casi era verde. Además tenia juegos para niños que venían con toda su familia o abuelos, era todo muy tierno y lo hacía especial.

Fui al lugar más apartado que vi, al fondo, en donde no había nadie y empecé a llorar. Quería desahogarme, pero no tenía alcohol, así que esta era la única forma buena de hacerlo.

Llorar y llorar hasta que unos brazos me tomaron por la cintura y me atrajeron hacia su pecho para que pueda llorar ahí. Y así lo hice. Me sentía segura.

POV NOAH

Estaba en la plaza, que ya les había mencionado, sentado en las hamacas pensando en cómo empujaría a Alex en una de estas si estuviera acá conmigo.

Se me paro el mundo entero cuando la vi, era más bajita de lo que la soñé pero la hacía mucho más hermosa para mí, fue a la parte más alejada de la plaza y se sentó en una mesa que casi no se veía. Estuve en shock un momento más y  fui hasta donde se la podía ver. Y hasta ese momento no me había dado cuenta que estaba llorando, juro que no podía verla así, tenía que hacer algo. Se me partió el alma cuando la vi, se me corto la respiración.

Me acerque a ella, la tome por la cintura y la acerque a mi pecho. Ella se acurruco allí y lloro. En mucho tiempo no sentía esto... me sentía completo.

Cuando termino levanto la cabeza y me miro. Esos ojos celestes, hermoso, me miraban y me perdí en ellos.

-Te conozco- aseguró.

Me conocía. No podía responderle y ¿si ella también soñaba conmigo? Me pellizqué para asegurarme que esto no fuera un sueño, era real, al parecer ella lo noto porque me sonrió y dijo:

-¿Qué estás haciendo? No estas soñando.- Río.

Y ahora si señores y señoras estaba completamente enamorado de esta chica que era diferente a todas las otras, si! Lo dije ESTOY ENAMORADO DE ELLA. Aunque ni la conozco en la vida real pero si en sueños.

-Te conocí en mis sueños-  susurre y baje la cabeza.

Unos brazos rápidamente me envolvieron y escondí mi cabeza en su cuello. Quisiera estar toda la vida ahí. Estaba completo y sentía esos brazos familiares y realmente cómodos, podría dormir así toda una eternidad.

-Yo también- Dijo ella- Tú me protegías en mis pesadillas, siempre estuviste.

Saque mi cabeza del hueco de su cuello lentamente porque no quería salir de allí pero quería preguntarle cómo es que ella también soñaba conmigo. Esto era todo muy raro.

-¿Como que te protegía? ¿De quién?- pregunte alarmado.

-Larga historia.- fue  lo único que dijo.

- Okey, pero sabes que puedes hablar conmigo- dije acomodándome otra vez entre sus brazos pero preocupado por lo que la atormentaba en sus pesadillas. – siento como si te conociera de toda la vida.

-Yo también- dijo acariciando mi cabello.

-¿Cómo te llamas, princesa?

Río, como amo ese sonido.