Te conocí en mis sueños

Ella.

Me llamo Amy Smith, mi vida fue normal hasta 5 años de edad ya que me di cuenta que mi querido padre golpeaba a mi madre. No tardo más de un 1 año para empezar a maltratarme a mí y a mis hermanas también, Savannah y Emily, diciendo que los fuertes no lloran, sino los débiles. Con el fin de proteger a mis hermanas y que Steven,  ''mi padre", no les haga daño siempre trataba de llamar su atención haciendo cosas malas para que se enojara conmigo y no con las demás. Tuve que crecer demasiado rápido, para que mis hermanas no sufrieran, como yo lo hice.

Un 16 de abril Steven se fue de la casa, no sin antes darme un beso de despedida, más cariñoso que de costumbre, susurrándome la frase que todavía resuenan en mi cabeza, la que cada vez que pienso en ella me recorre un escalofrió, con la que cada noche tengo pesadillas: "ya verás nos volveremos a ver, volveré por ti".

Chloe, mi "madre", siempre me culpo porque Steven la abandono. Para ella que nos dejara fue la cosa más horrible que nos pudo haber pasado, se olvidaba que ese hombre maltrato y golpeo tanto a ella como a nosotras. Le gusta creer que era el esposo y padre perfecto que amaba a su familia solía decir: "eran muestras de amor a sus hijas" JA que ella se lo creyera era lo importante, nadie podía sacarme de la cabeza las imágenes mías, siendo golpeada e insultada por aquel hombre que según ella tanto nos amó en su momento. Por otro lado, para mí que nos abandonara, por cualquier emotivo no lo quería saber, fue mi salvación. No estábamos bien económicamente, Chloe siempre trabajaba, de domestica para gente con plata, no la veíamos de día y tampoco de noche, ya que llegaba comía y nos íbamos a dormir. Solo la veíamos los días que su jefe no la necesitaba.

Con mis hermanas nos llevamos bien, éramos muy unidas dentro de todo nunca peleábamos. Savannah era la del medio, sumisa y tímida siempre estaba callada y más cuando mi mama y yo peleábamos; ahora tendría 16 años no se si seguirá igual, era tres años más chica pero era más alta que yo; tenía pelo marrón y ojos verdes chiquitos nada que ver con los míos que son azules y grandes, muy grandes para mi gusto; era delgada y alta tenia piernas de dos metros, siempre le decía eso y ella se ruborizaba. Emily era una copia miniatura de mí, era la más chica de las tres, tenía 11 en ese entonces, ahora tendría 14, con ella siempre me lleve mejor que con Savannah porque era igual a mí solo que ella era más inocente y mucho más buena que yo, pensábamos lo mismo, decíamos lo mismo, teníamos los mismos gestos y hasta me acuerdo que hacíamos la misma mueca con los labios cuando estábamos enojadas. Las extraño tanto. A ambas.

Cuando yo tenía 15, hace 3 años, mi queridísimo padre (noten mi sarcasmo) volvió a la casa y dijo que estaba arrepentido por todo lo sucedido y que quería una segunda oportunidad para hacer las cosas bien, claro que Chloe le dijo que sí porque supuestamente lucia muy arrepentido y sincero a la hora de pedir perdón y todo eso. Yo no le creí nada de sus estúpidas palabras pero como no quería arruinar ese patético momento familiar deje que crean en Steven.

Habían pasado dos meses de que Steven, el hombre que me había arruinado la vida, decidió volver. Mi mama y mis hermanas estaban felices y creían que volveríamos a ser una familia unida como la que supuestamente éramos, hasta que ese hombre se vaya de la casa. Yo solo lo ignoraba olímpicamente y cada vez que me miraba me iba, trataba de no estar con él en ningún momento. Sabía que este momento de plena "felicidad" para mi familia no iba a ser duradera y solo era una pantalla que él había creado, hombres así no cambian, pero también me preguntaba para que volvió, ¿qué quería?

Como era de costumbre llegue a casa del instituto, y ahí estaban Steven dándole una paliza a Emily, la furia se apodero de mí y no sé cómo hice pero cuando me di cuenta ya estaba empujando a mi hermana hacia atrás, lejos de ese hombre que tanto odiaba y despreciaba, que por lo visto no lo vio venir ya qué parecía sorprendido y no reacciono dándome ventaja. Di 2 golpes en su mandíbula con puño cerrado, ese año y medio de defensa personal sirvieron, 4 golpes más en la nariz haciendo que sangrara como una canilla abierta pero no me importo, estaba muy enojada, prometí que nunca más este hombre me haría daño a mi o a mi familia, cuando no me di cuenta alguien me había separado de ese imbécil, claro mi madre que lo defendía ¿Cómo puede? Ese hombre que la golpeo quien sabe cuánto tiempo y a sus hijas.

Me acuerdo ese día como si fuera ayer, Steven tenía toda la cara y la camisa llena de sangre y mi sonrisa de satisfacción debió ser épica porque me miro con cara de sorpresa y asco. JA yo tendría que tener asco de él, esperen, lo tenía.

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Un 22 de Agosto, entre a mi casa y vi que todo estaba demasiado silencioso, revise todas las habitaciones con el fin de ver si encontraba a alguien, pero nada. Entre a la cocina y ahí estaba un papel con mi nombre con la letra de mi madre; tenía un mal presentimiento respecto a la carta, y tenía razón no había nada bueno escrito allí.

Me había abandonado, se había ido con mis hermanas, nunca me quiso pero ¿Qué hice para que me odiara tanto? Siempre había tratado de agradarle haciendo cosas buena para ella, regalos comprados que nunca le gustaron o simplemente los tiraba, siempre me insultaba hasta que me canse y no intente más pero creo que en cierto modo hacia cosas malas para que se fijara en mí, para que me preste atención pero nunca paso como tampoco paso que yo haya dejado de hacer esas cosas. Pero ahora me traicionó, me dejo sola con...

El ruido de la puerta me saco de mis pensamientos y dejo ver a un Steven cansado por su trabajo. Cuando estuvo bastante cerca le pase la nota en silencio y mientras iba leyendo la carta se le dibujaba una sonrisa maliciosa en su estúpida cara. No me di cuenta cuando se abalanzó hacia mí y rasgo mi ropa, diciéndome que me desea y que era suya, con asco intente separarlo de mi pero él era mucho más fuerte , seguía diciendo estupideces hasta que tuve la oportunidad de pegarle en la entre pierna mientras el besaba mi cuello, ¡agh que asco!.

Lo deje retorciéndose en la cocina mientras me dirigía a una plaza que había no muy cerca de mi casa, solo quería pensar en que era un sueño y que pronto aparecería el chico de pelo oscuro para protegerme de ese monstruo que se hace llamar mi padre.

Hola

Soy nueva en esto y espero que me ayuden con sus votos o comentarios ;)

GRACIAS POR LEER <3