Me desperte bruscamente al escuchar un fuerte ruido provenir de la cocina. Rapidamente abrí mi puerta y baje por las escaleras para llegar a la cocina, una vez ahí me encontre a la mesa volcada y un vaso roto.
Mis padres discutian a voces pero al verme en la entrada pararon, mi madre se acerco a mi lentamente para luego señalarme con su dedo.
-Todo esto es culpa tuya.-su voz sonaba con arrogancia.
-Él no tiene la culpa de que tu seas una madre de mierda.-defendió su padre.
-¡No me vuelvas a llamar así, hipócrita! ¡Tú mismo lo pones a parir cuando se da la vuelta!
-¡Callate la maldita boca, Angelica!
Mierda, debía de salir de ese jodido infierno lo antes posible. Una presión en mi pecho empezó a hacerse presente acompañada de una gran falta de aire.
Volví a subir a mi dormitorio para cambiarme de ropa y salir a correr, cosa que no pude hacer ya que un mensaje llego a mi teléfono.
5 mensajes nuevos de Perla <3
¡Gusnabo! Te voy a mandar toda la información sobre tu cita de hoy.
Calle ******* número 23.
Ve, por favor, si no lo haces por tí, hazlo por mi.
Me lo prometiste ese día.
Te amo mucho muchísimo, cuidate <3
Emboze una sonrisa el leer sus mensajes, sin lugar a duda no se que hubiera hecho si no lo hubiera conocido aquella vez.
Me arregle en menos de 5 minutos, baje nuevamente esta vez con temor del escenario que me encontraria pero todo estaba "normal"
Sin más avance hasta la puerta para salir, puse el gps y camine hasta que mi teléfono me indico que ya había llegado a mi destino.
Me encontraba parado frente a un Hospital de altos recursos económicos, cosas de ricos.
Tan solo suspiré y me adentre, una preciosa recepción con mesa marmoleada estaba a frente a mi, paredes de blanco y sillones aparentemente cómodos con un color gris suave.
Todo dentro era tan bonito, cómodo y olía realmente bien. Cualquiera diría que eso no se trataba de un hospital psiquiátrico.
Una señorita muy amable me saludo desde recepción haciendo llamar mi atención.
-Buenos días, ¿necesita ayuda?.
Una joven de unos 23 años me sonreía con su hermosa sonrisa y dentadura perfecta.
-Eh, si buenos días, tenía cita con el psiquiatra eh...-hice una breve pausa para buscar en mi teléfono el nombre que me había mandado Horacio.
-Jack Conway, con el psiquiatra Jack Conway.-termine por decir.
-¿Gustabo García? Tienes cita con el Doctor Conway, acompáñeme.
-No se preocupe, puedo ir solo.
-No es molestia, vamos.-me sonrió amablemente.
De pronto un hombre mucho más alto que ambos se paro frente a nosotros. Sus ojos azules resaltaban en su piel pálida y su pelo grisáceo.
-Desnis, no se preocupe yo llevaré al joven con Conway, continúe con su labor.
-Entendio, Doctor Volkov, ¡tenga buen día! ¡y tú que tengas una buena terapia!-se despidió finalmente de ambos con una sonrisa volviendo a su sitio.
-Encantado. Viktor Volkov, psiquiatra.-extendió su mano.
Algo desconfiado la acepte, pues había sido amable conmigo.
-Soy el psiquiatra de Horacio, Horacio Pérez. Él me informó sobre que vendrías hoy y me ofrecí a acompañarte durante este proceso.
-¿Usted sera mi psiquiatra?
-No, no. Yo ya llevo bastantes caso, entre ellos el de Horacio, por eso mi compañero te atenderá. Es uno de los mejores que hay, Horacio te habrá hablado de él.
-algo así.-respondí mientras avanzamos.
-Bueno, hemos llegado a la consulta, llamaré a la puerta para avisarle, acompáñame.
Volkov abrió la puerta sin tocarla y se adentró a ella dejándola abierta.
-¿Qué coño haces Viktor? No te enseñaron modelas en tu casa o que mierda, toca la puerta antes imbécil.
Mierda puta, una corriente eléctrica recorrió toda mi espina dorsal al escuchar una firme y autoritaria voz gruesa proveniente del despacho.
-Ejem, Jack. Modera tu lenguaje, te traigo a tu nuevo paciente.
-Mierda...-musitó Jack en voz baja al ver a Gustabo en la puerta.
-Entra y toma asiento, por favor.-dijo relajando su voz al instante y volviéndose esta más suave pero conservando su firmeza y voz gruesa.
Poco después Volkov se retiro y yo tome asiento, Conway se acomodaba el traje algo incómodo hasta que por fin terminó.
-Lamento mucho lo que acaba de suceder, ha sido muy poco profesional de mi parte, te pido una disculpa.
-Oh, no se preocupe, fue un simple malentendido.
-Bien, ya que todo esta solucionado, comencemos. Primero me presentaré y te explicaré todo. Mi nombre es Jack Conway, mis pacientes me llaman Conway, todas nuestras sesiones serán privadas y nada saldrá de estas paredes a menos que tu vida corra peligro.
-Supongo que ya sabrás como va todo esto ¿no?-asentí.-Bien, como te llamas.
-Gustabo, Gustabo García, con B de bombón.
-Un curioso y bonito nombre, cuéntame, por que estas aquí Gustabo...
Tras una larga conversación de aproximadamente 1 hora y media la terapia finalizo.
Sorprendentemente si conte cosas, nunca lo había hecho la primera sesión, digo normalmente todo lo que he contado hoy lo suelo contar en 1 mes de sesiones.
-Me alegro que te hayas abierto tan fácilmente, si seguimos así podremos recuperarnos.
-Supongo.
-Mañana a la misma hora, ¿de acuerdo?
-Esta bien, nos vemos, Conway.
-Nos vemos, buen día Gustabo.
Salí de la consulta, confuso y agobiado, era extraño en mi confiar tan de pleno en una persona y contarle las cosas pero claro...
Como siempre, no conte todo.
O no al menos toda la verdad...
multishipper_fandom
¿Qué creéis que oculta Gustabo o por qué nunca termina contar todo?
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Psychiatrist- Jackstabo
Fiksi PenggemarLa locura y el amor nunca es una buena combinación. Mucho menos cuando no estas en tus cabales. Pero, ¿que podría salir mal?