Un Novio Para San Valentín - MewGulf

ꕥCapítulo 14ꕥ

Mew casi no pudo dormir esa noche, emocionado con la idea de poder escuchar la dulce voz de Gulf. En sus sueños rememoró esos dulces labios que tuvo la dicha de probar y ser el primero en robarle ese importante momento en su vida.

Para mediodía, Tul llegó puntual, solo él, pues Max trabajaba por las mañanas en algunos restaurantes.

-¿Estás listo?.-preguntó el moreno fingiendo emoción, pues por dentro moría de nervios pensando en lo que pudiera pasar.

-Eso creo.- respondió Mew inseguro, con sus manos temblando al marcar el número en el celular de su amigo.

-Hazlo, Mew, pase lo que pase yo estaré contigo.- apoyó Tul apretando el hombro de su amigo.

Sintiendo su cuerpo tembloroso, Mew finalmente apretó el botón de "llamar". El tono de llamada sonó varias veces, finalmente lo mandó a buzón.

-Se fue al buzón.- murmuró el pálido viendo la pantalla del celular del moreno.

-Llama de nuevo, tal vez esté ocupado.- dijo Tul no queriendo perder la esperanza aun.

-Gracias, Tul.-

Con motivación Mew volvió a marcar el número, esta vez sonó varias veces y finalmente la llamada fue atendida, aunque no se escuchaba nada más que unos murmullos.

-Demonios.- masculló la tierna voz de Gulf. El pálido podía reconocer esa dulce voz en cualquier parte. -¿Bueno?, ¿Quién habla?.- preguntó.

-Gulf.- suspiró Mew sintiendo su corazón latir como loco en su pecho.

-¿Mew?.- preguntó el moreno confundido.

-Si, soy yo, Gulf.- afirmó el pálido completamente nervioso.

-¿Porque sigues llamando?, debiste entender que no quiero saber de ti, se feliz con Kit.- Gulf se notaba exaltado y eso entristeció a Mew.

-Kit no es mi novio, fue una farsa.- confesó el castaño.

-Lo esperaba, pero no me importa si te pagó o no.-

-Déjame explicarte.- pidió el pálido con un hilo de voz.

-No, Mew, tú haz tu vida, yo...- de pronto Gulf se quedó callado.

-¿Qué, Gulf?, dame una sola razón para dejar de intentarlo.- pidió Mew soltando las lágrimas que estaba conteniendo. Después de tantos años, sentir que perdía al hombre que amaba, dolía.

-Tengo novio, Mew.- dijo Gulf finalmente. -El me hace feliz, así que por favor, déjame intentarlo.-

-Espero que él sepa valorar la hermosa persona que eres.- murmuró el pálido con dolor y una vez que la llamada fue terminada, su llanto incrementó.

-Oh Mew.- Tul ni siquiera tuvo que preguntar, había escuchado todo al estar sentado junto a su mejor amigo. -Lo siento tanto.- dijo abrazándolo, dejándolo llorar en su pecho.

-No es tu culpa.- sollozó Mew. -El es feliz, merece eso y esta bien.-

-Pero tú también mereces ser feliz.- afirmó el moreno acariciando la espalda del pálido.

-Pero no con él.- Mew lo sabía, dolía como el infierno, pero siempre supo que Gulf y él no estarían juntos, porque Gulf era todo un sueño y él no merecía tanta perfección en su vida.

-Se que pronto llegará alguien que te sepa valorar, solo sé paciente.- el sufrimiento de su amigo también le dolía a Tul. -Mereces a alguien que te ame y amar con locura.-

-¿Por qué, Tul?.- preguntó y su amigo lo vio extrañado. -Nunca debí aceptar ese trabajo, tantos años y me fui a enamorar de alguien que no puedo tener.-