31º capitulo

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— ¿Dibujas? —le pregunte cuando estábamos camino al instituto en su auto.
Sonrió antes de responder.
—Los viste —fue mas una afirmación que una pregunta. —Sí, dibujo. Bueno, no hago más que bocetos. Pero me encanta —sonrió.
—No los vi bien —corregí. —Pero algún día me los mostraras.
—Cuando quieras.


Liam estaciono el auto al frente del instituto.
Yo solo tenía un objetivo, y era aprovechar al máximo a Liam para sacarle celos a Zayn. Ahora se las iba a ver conmigo, y yo no jugaba limpio.
Apenas salí del auto vi a Zayn llegar en su auto con Sam.
—Mira es Zayn —alcanzo a decirme Liam, antes de que le plantara un apasionado beso en la boca, me respondió algo sorprendido.
—Comienza el juego —le guiñé un ojo, y me fui caminando hasta donde estaba Sam con Zayn.

—Hola —salude a Sam y Zayn. 
—Hola —me saludo Sam, mientras me miraba de arriba abajo. Zayn se puso tenso.
— ¿Zayn no me vas a saludar? —lo mire.
Sonó un celular.
—Es mío —dijo Zayn. Salvado por la campana.
—Sam —la llame. —Necesito que me hagas un favor.
— ¿Qué? —dijo algo cortante, pero no le di importancia.
Consciente de que Zayn aun me escuchaba, dije:
—Necesito que seas mi coartada.
— ¿Por qué? ¿Qué tengo que hacer?
—Si mi padre pregunta, por algún motivo, anoche dormí en tu casa —Zayn me miro de reojo curioso, mientras murmuraba: ‘Si’, ‘Aja’.
— ¿Y donde estuviste, en verdad?
—En casa de Liam —sonreí cuando los ojos de Zayn se abrieron sorprendidos.
Sam me tomo del brazo y me llevo a unos pasos más lejos de Zayn.
— ¿Qué hiciste…con…con él? —tartamudeo mirándome fijamente.
—Cosas —respondí lo suficientemente fuerte, como para que Zayn escuchara, cortara la llamada y se encaminara rápidamente hacia el interior del instituto.


—Chicos siéntense —dijo el entrenador Subbert al entrar al gimnasio. Luego de que todos se sentaron en las pequeñas gradas destinadas a las clases de Ed. Fisica. —Hoy, vamos a realizar un trabajo intenso, para luego tomar nuestro pulso y saber si tenemos una actividad diaria sedentaria, moderada o intensa.
Todos comenzaron a murmurar sobre los posibles minutos que el entrenador nos haría trotar.
—Silencio —pidió fuerte en el entrador. —Si son unos buenos para nada, y el único esfuerzo físico que hacen es caminar de su salón a otro, su actividad diaria será sedentaria, evidentemente. Si se van caminando a casa y toman transporte colectivo diariamente, posiblemente su pulso este en el rango de actividad moderada. Para los jugadores de fútbol, hockey, los atletas y las animadoras, ya que entran más que una vez a la semana, su actividad será intensa. En los casos de los atletas olímpicos que entrenan más de seis horas al día, su pulso esta en el escaso rango de actividad ex – tre – ma —separo por silabas la palabra. —Quiero que troten quince minutos. Sin excepciones —fulmino con la mirada a un chico que dio un largo y pesado suspiro. — ¡Neilson te estaré observando, no quiero que me hagas menos de quince minutos! O si no ¡De nuevo a la cancha!
Todos nos levantamos, y apenas sonó el silbato comenzamos a correr alrededor de la cancha.
Liam me miraba de vez en cuando y cada vez que pasaba trotando a mi lado besaba mi mejilla dulcemente, yo sonreía. Zayn estaba en esta clase, y mi idea era provocarle los famosos y emocionantes celos.
Cuando yo pasaba trotando al lado de Liam tocaba su hombro derecho, haciendo que girase hacia la derecha para ver quien le llamo. Yo estaba hacia su lado izquierdo, me reía infantilmente. Éramos un par de niños jugando entre ellos.
En un momento yo estaba trotando cuando Zayn se pone a trotar a mi lado izquierdo. Lo miro entre sonriendo y extrañada.
—No me saludaste —dije, el siguió con la mirada al frente. —Ahí, en la entrada —indique hacia donde estaba el estacionamiento.
—Sí, lo siento, tuve que contestar. Una llamada importante —me respondió.
— ¿Tu padre? —aventure.
—Mi novia —respondió. Punto para Zayn.
— ¡Felicidades! —exclame, fingiendo estar feliz. —No sabía que tenias nueva novia —Punto para _____(tn).
—Volví con Bonnie —aclaro apagado.
— ¡Qué bien! —me miro con una mezcla de desconcierto y asombro. —Siempre supe que eran el uno para el otro —Zayn 1, _____(tn) 100000.
—Y yo supe que estas con Liam —soltó. — ¿Desde hace cuanto? 
—Una semana —respondí. —Y unos días, pero parece que lleváramos años, nos entendemos tan bien.
—Me alegro —dijo en tono tosco. —Si no te molesta, quiero seguir trotando…solo —me dijo cortante, troto más rápido hasta estar a unos diez metros de mi, donde siguió trotando a su ritmo normal.
Piii.
Sonó el silbato del entrenador, y todos nos detuvimos exhaustos. Bueno Liam y yo fingíamos estar cansados. Esto no era nada comparado con nuestros entrenamientos habituales.
— ¡Vengan acá! —grito el entrenador.
Todos nos sentamos al borde de la cancha.
—Ahora quiero que tomen su pulso, en el cuello o en la muñeca ¡Vamos rápido! —dijo luego de haber arrastrado una pizarra transportable al frente del curso.
Todos hicimos lo que nos pidió, contando, durante un minuto.
— ¿Lo tienen? —pregunto.
— ¡Sí! —respondimos a coro.
—Muy bien, anótenlo.
Después de que todos hubiéramos anotados nuestros pulsos, grito:
— ¡Green! —el chico levanto la cabeza al oír su apellido. —Tu pulso —pidió.
—192 pulsaciones por minuto —respondió el chico, de aspecto nerd.
—Bien —dijo para sí mismo el entrenador, mientras anotaba el pulso del chico en la pizarra.
Green – 192 p/m
— ¡Payne! —grito el entrenador.
—126 pulsaciones —respondió Liam.
—Bien —le dijo a Liam, y anoto sus datos. — ¡Winston! —grito de nuevo.
—150 pulsaciones —respondí.
—Bien —me dijo y anoto. — ¡Anderson!
Bonnie seguía conversando con su grupo y riendo.
— ¡Anderson! —volvió a gritar mas fuerte el entrenador.
—Ahh… —miro Bonnie al entrenador.
—Tus pulsaciones ¡Rápido!
—204…creo —el grupo de Bonnie rio.
—204…creo —imito el entrenador. Esta vez todo el curso rio, incluido el grupo de Bonnie, que luego de una mirada matadora de parte de ella se cayó. —Chicos —nos miro, luego de haber anotado los datos de Bonnie.
La pizarra estaba algo así:
Green – 192 p/m
Payne – 126 p/m
Winston – 150 p/m
Anderson – 204 p/m

—Aquí hay cuatro diferentes tipos de personas. Los que no hacen nada —apunto los nombres de Green y Bonnie. Todos rieron. Mire a Bonnie y su cara expresaba profundo odio, no sabría si es por mi o por el entrenador. —Y los que entrenan —apunto el nombre de Liam y el mío. —Liam tu juegas futbol americano ¿cierto?
—Así es señor —respondió Liam.
—Y tu _____(tn) eres animadora.
—Exacto —respondí.
— ¡La pareja perfecta! —grito alguien desde atrás. Liam y yo reímos, aunque él me pasó un brazo por la cintura, a modo de respuesta.
—Bueno Liam, porque no sueltas a _____(tn) y pasas al frente —indico una silla. Liam se levanto, se sentó en la silla y el entrenador le coloco un Esfigmomanómetro alrededor de su bíceps derecho.
Liam me miraba sonriente mientras el entrenador tomaba su pulso.
—Chicos, ahora hay que esperar unos segundos —se levanto el entrenador. —Ahí veremos en qué rango esta su actividad —Liam abrió los ojos de golpe. Casi pude sentir la ampolleta roja prenderse en su cabeza, con la señal de: ¡Peligro! ¡Peligro! ¡Peligro!. —Posiblemente esté en intensa. Luego lo haremos con cada uno de los ejemplos para que entiendan la idea —miro él Esfigmomanómetro en el brazo de Liam. —Ya debe estar —se acerco a él y se lo quito mirando la pequeña pantalla. —No puede ser —susurro en voz baja.
Liam me miro preocupado y le devolví la mirada. Todos comenzaron a susurrar.
—Es imposible —miro unos datos en una tabla.
— ¿Qué pasa entrenador? —pregunto Zayn.
—Su actividad es extrema —susurro este.
Liam y yo nos miramos preocupados. ¿Cómo se nos pudo pasar esto?

No es mi vida es solo una misiòn mas Zayn y tuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora