the smoothie guy: i still love you! ⁕ hamlem

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—Eso es todo lo que puedo hacer por ti por ahora.

Serim revisaba detenidamente unas fotos en su celular y asintió, estaba satisfecho.

—¿De dónde sacaste todo esto?

—Nunca borro nada.

—¿Y más o menos el contexto? Hay unas capturas que no son tuyas.

—Esas son de unos amigos y otras de Hyeop. Como puedes ver, uno de sos bardos estuvo potente porque Minhee fue de dm en dm puteandose a todos.

—Ya veo, no es perita en dulce.

—Cuando se trata de xone no lo es, realmente los ama mucho. Pienso que deberías tener cuidado, ese niño es peligroso, sabe como destruirte la vida en menos de un segundo con una sola palabra.

Serim rió, no tenía porqué tenerle miedo a alguien como Minhee cuando se consideraba a si mismo mucho peor.

a Serim le faltaba conocer mucho a Minhee y pronto descubriría su otra cara, lo protector que es cuando se trata de la gente que quiere.

—Gracias por ayudarme y aconsejarme, pero seguiré haciendo lo que yo quiera. —Le extendió la mano, entregándole un dinero. —Ahí está lo que te prometí.

—Gracias, si necesitas otra cosa me dices, tengo mucho material para joder a xone.

—Lo tendré en cuenta, me convienen mejor estando separados.

—Sabes... Espero tengas suerte encontrando ese fanfic y si te sirve de algo, Minhee escribe únicamente de The Boyz y TXT.

—¿No recuerdas su nombre de usuario?

—No, Seungyoun nunca me lo pasó porque Minhee no lo dejó, vaya a saber porqué. Pero lo que si recuerdo es que dijo una vez que tenía que ver con un miembro de TXT.

—Gracias entonces, nos vemos.

Se despidieron y Serim cerró la puerta, entrando a su casa mientras seguía leyendo las screenshots que le habían pasado, no tenían ningún desperdicio.

—¿Qué haces, bebé?

Su madre lo atrapó en sus brazos y le dio un beso fugaz en la mejilla.

—Nada, lo que te conté.

Su madre arqueó una ceja, disgustada.

—¿Vas a seguir con eso Serim?, valórate. ¿Cómo puedes seguir atrás de Seongmin cuando ya no te quiere? Con todos los millones del mundo que tienes encima puedes tener a quien quieras, pero estás empeñado.

—Tampoco es así como tú lo dices, no estoy enamorado.

—¿Entonces?

—Yo no puedo permitir que Seongmin prefiera a alguien como Taeyoung por encima de mí.

—Ya, entiendo.

—¿Te puedo pedir una cosa?

—¿Qué va ser, Serim?

—Ví que Seongmin quiere denunciar a sus papás y tú eres la mejor abogada de este país... Quiero que lo ayudes.

—Ay, no, Serim. —Se negó. —Eso es buscarse problemas.

—Mamá, es que yo quiero que Taeyoung se dé cuenta de una vez por todas que Seongmin me pertenece y con quien se va a terminar casando va a ser conmigo, que yo le gané y que un corriente como él no me llega ni a los talones.

—Serim... ¿Tú estás pensando así? Tienes 21 años y piensas como un niño de 16.

—Claro que estoy pensando así. —Serim abrazó a su madre por la espalda. —Dime, ¿De quién soy hijo? de ti, la madre más maravillosa del mundo y toda la vida te he visto haciendo que todos te respeten y te tengan miedo. ¿Cómo no quieres que piense así si somos iguales tú y yo?