FEROZ

1

He querido borrar los ojos de ese hombre, esa noche cometí el peor error de vida, no debí precipitarme, no debí dejarme llevar por el enojo sabe que me iba arrepentir me jodi y jodi mi relación con mi novio. Aunque a estas alturas no sé si aún lo seamos, para ser sincera tal vez es lo mejor que pudo pasarme en la vida.

Ya me he comido todas la uñas, no dejo de maldecir sé que mi padres van a decepcionarse conmigo, ahora con esta noticia, no tengo corazón para interrumpirlo  si la vida lo quiso así, así lo aceptare.

Paso mis manos por mi cabello suelto estoy desesperada y no dejo de mover las putas piernas de los nervios, pasa una y otra miro el papel con mi nombre y el número, tanto que me burlaba de Bella y sus sustos, eso me pasa por ser mala amiga.

—Se está tardado con la que entro, dios quiero ir a mear.

—Te recuerdo que soy yo la que entrara a consulta.

—Si pero somos casi hermanas, y estamos solas en esto yo te apoyo  lo que tu decidas hacer, tienes un trabajo puedes con ello.

—Eso lo se pensé en los contras y en los pro, solo me urge saber quién fue quien me metió en esto al menos saber su puto nombre.

—Que boquita, te lo dije pero tu insististe en irte con él, no te miras que pusieras mucha resistencia.

—No estaba ebria solo que no le di importancia al nombre.

—Hasta ayer.

—Si hasta ayer.

Jamás he venido a un hospital, la última vez fue hace años y fue porque me caí de un columpio fracturándome el brazo, desde entonces le tengo pavor a estos lugares, las horas pasan y esto cada vez me hace desesperante

—Señorita Watson.

Escuchar mi nombre me da tranquilidad, aunque entrar no se que me deparara después de esto, sé que mi vida cambiara.

Mes atrás:

—Segura que no quieres irte, ya es muy tarde.

—No quiero sacar mi enojo, como pudo robarse mi proyecto éramos los dos en esto.

—Solo deja esto, será mejor que hables con él y te dé explicaciones.

—Sabes que me he dado cuenta, que siempre que avanzo él quiere aplastarme o llevarse el crédito de todo, estoy harta, y sé que se está cogiendo a esa perra.

— ¿Mona? —asiento sin dejar de tomar. —Sera mejor irnos suelta eso.

—No seas amargada mejor ven vamos  a bailar.

Tragos vienen y va la música la siento en todo mi cuerpo, Bella baila con un chico que se nos acerca haciéndome a un lado, ruedo los ojos pero finjo unas sonrisa dejando que mi amiga disfrute al galán, paso entre la multitud quiero un trago bien cargado.

Lo que me hizo Néstor no tiene perdón apropiarse de mi trabajo, mi proyecto que dedique meses y decir que fue suyo, nadie me creerá, ya lo escucho justificarse que por ser mujer no tenía posibilidades de funcionar, y con el poder verlo realizado.

—Un oscuro doble —ordeno al barman.

Noto al hombre que tengo a lado soltar una sonrisa, miro ambas partes ¿Acaso se está riendo de mí?

— ¿Que es tan graciosos? —me dirijo a él tomando mi trago.

—Es solo que es algo fuerte —me responde sin verme.

—Me gusta lo fuerte — ¿Por qué dije eso?                        

—Que tan fuerte — da un sorbo —Debes tener cuidado como lo dices.

—Así, y como debería decirlo entonces. —me inclino a su lado.

Noto su olor masculino, quiero ver su cara, me sigo inclinando tiene un perfil muy atractivo y ahí está cuando voltea su rostro, notando esos ojos, su forma de verme tiene una mirada tan intensa y algo en mi estómago se remueve.

Un trago, una conversacion y una noche.

Actualidad.

—Bien empecemos, sentirá frio y un poco de incomodidad.

Aprieto los ojos cuando esa cosa entra, me muevo un poco Bella sostiene mi mano, mi vagina le incomoda esa cosa, parece que el doctora lo hace con gusto remover y incrustar mas al fondo, la pantalla se prende y ahí está algo que parece una mancha.

—Tomare fotos, —escucho el sonido de impresión—Listo ya puedes vestirte. —lo saca tan fuerte como lo metió.

—Aush —dijo incomoda.

—Disculpa el ultrasonido vaginal siempre es algo incómodo.

Tomo mi ropa vistiéndome rápidamente, lo que quiero es salir de aquí y que todo haya sido un error, un grave error.

—Bien, como ya lo sabe, esto era solo para confirmar, parece que está avanzada su gestación, para el tiempo que me dice, a veces no calculamos bien pero esto nos dice de una manera más efectiva que tiene un embarazo con un poco más de semanas de las que comentó señorita Watson.

—Imposible.

No he tenido relaciones desde hace tiempo, desde que tengo problemas con Néstor.

—Haber cómo le explicó que es imposible.

—Los resultados no se equivocan, ahora le voy a recetar unas vitaminas y la veré en un mes.

¡Esto es una broma!

¡Esto no es real!

¡Cómo es que llegue  esto!

No digo nada, tengo una angustia en mi garganta ¡Estoy embarazada! Y ni puta idea de quién es el padre de este bebe.

Me recargo en la ventana mientras Bella conduce, tengo miles de ideas en mi cabeza, y no sé por dónde empezar, no sé ni que hace con mi vida ahora en adelante.

—Quieres ir por una pizza, siempre que estas así eso...

—Ahora no —interrumpo. —Solo quiero dormir un poco, ya pudo escuchar a mi madre decir que arruine mi vida.

—No lo haz hecho, debemos buscarlo.

— ¿Y cómo según tú? No sé ni donde carajos vive, ni su nombre solo que...

—Silvia....

— ¡Para el auto! ¡Para el auto!

De todos los lugares, de todas las personas veo su foto en ese puesto de revista, no escucho al hombre que aleja si voy a comprarla, solo me enfoco al hombre de ojos claros y rostro de un puto dios.

—Silvia, estas muy rara —me dice pero no dejo de ver la foto.

—Empresario Sebasstian Leah, líder de empresas Feroz.

Bella no entiende, mucho menos yo, pero si algo tengo es que no me hundiré sola en esto, acabo de encontrar al padre de mi hijo.

—Silvia...

—Creo que debemos ir por ropa —la miro —Creo que lo encontré.

—Él es... —Afirmo.

Me pregunto como lo tomara.

Sebasstian Leah es primo de Marcus Cortez de Mia, suya.