Survive Together [Bkdk]

五

Izuku se encontraba en el baño de esa casa, debían irse esa misma tarde pero su corazón latía tan rápido que sentía que se le saldría por la boca.

Habían estado mucho tiempo en esa casa, más de lo planeado... Y la preocupación por muchas cosas empezaba a crecer.

Suspiró cansado mirándose al—ahora manchado —espejo que se encontraba en el baño de la segunda planta de la casa.  A penas y podía ver su reflejo pero lo suficiente para describir ciertos aspectos de su ahora y cansada apariencia... Ciertamente podían tomar baños con el agua que aún salia de las tuverias, la electricidad seguía funcionando por lo cual era bastante conveniente y raro... 

Pero su apariencia, le ponía algo triste... Su apariencia lucía algo demacrada, usualmente no se miraba en los espejos por varios motivos... 

Pero usualmente cuando lo hacia era cuando Katsuki decidía cuidar de su cabello.

Cuando Katsuki estaba de muy buen humor, jugaba y cuidaba sus verdosos rulos, lo hacía sentir tan calmado que acariciaran su cabello—aunque esto no a muchos se los permitía— pero esos días Katsuki lo había estado ignorando un poco o teniendo el mínimo contacto con él lo cual lo irritaba un poco...

Salió del baño de la segunda planta, bajándo las escaleras, viendo como el nuevo integrante de su grupo descansaba en sofá de la sala. Mientras que Katsuki parecía escribir algo en un cuaderno de secundaria, probablemente la cantidad de comida que les quedaba y las cosas que iban a necesitar.

Aunque lo cierto era que ya estaban listo para irse, aunque solo quería comer.

— ¿Kacchan?

Katsuki alzo la vista del cuaderno y miró a Izuku. Este vestía unos pantalones enormes, pero que se ajustaban a su cadera pero al final estaba recogidos para que no se cayera en caso de que tuvieran que correr, una sudadera, y su cabello despeinado.

Era lo mejor, que estuviera cubierto a no más poder, para que nada o alguna de esas cosas pudiera rozarlo.

Él en cambio, andaba sus viejos vaqueros negros, con unas tenis y una camiseta manga larga.

— ¿Quieres comer unas galletas con algún refresco?

— La verdad, estoy harto de las galletas. Come tú. Hoy partiremos a la estación de policía más cercana— Izuku le sonrió como era de costumbre y Katsuki le devolvió la sonrisa solo que leve— si no, nos da tiempo pararemos a una casa.

— ¡Entendido, Jefe!

∆∆∆

Estaban listos para irse, solo era cuestión de tener cuidado, iban a ir a buscar en cosas importantes para su propia supervivencia, querían salir de esa zona, habían decidido ir a buscar armas, aunque Izuku insistía en que ninguno de los dos las necesitaba, pero al mismo tiempo Izuku no quería que ninguno de los dos—y Serō— tocara directamente a los zombies, intentarían no enfrentarse a los zombies, y probablemente todo estaría bien.

Pero había un pequeño detalle, y era el miedo a lo desconocido; a lo que podrían llegar a enfrentarse, porque de alguna manera los zombies eran un factor a su nuevo mundo, una cosa más de la lista, pero se podría decir que era la menor de sus preocupaciones.

Aún tenían el recuerdo de ese enorme zombie, con cuchillos en los ojos, pero no entendían como había llegado a ser tan enorme, no eran solo muertos caminando.

No en todos los casos, por lo menos.

Cada vez se acercaban más y más a la zona donde vieron a ese monstruo que una vez fue humano, habían zombies alrededor, pero habían podido lidiar con ellos, algunos eran lentos, otros rápidos, no habían hallado algún zombie similar al que se encontraron la última vez. Aún así, un martillo, varios cuchillos no serian suficientes para la cantidad de zombies que habían.