²Alicia y la Cámara Secreta [LRYEA: ✔︎]

21¬LIKE TOUCH THE CLOUDS

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↻Como tocar las nubes

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━━━━━━━ EL CUARTETO DE ORO SIEMPRE HABÍA SABIDO QUE Hagrid sentía una desgraciada afición por las criaturas grandes y monstruosas. Durante el curso anterior en Hogwarts había intentado criar un dragón en su pequeña cabaña de madera, y pasaría mucho tiempo antes de que pudieran olvidar al perro gigante de tres cabezas al que había puesto por nombre Fluffy.

Alicia casi habría preferido no haberse enterado de aquellas sospechas. Conocía a Hagrid desde pequeña y nunca dudaría de su lealtad, le quería muchísimo.

—A lo mejor Ryddle se equivocó de culpable —decía Hermione—. A lo mejor el que atacaba a la gente era otro monstruo...

—¿Cuántos monstruos crees que puede albergar este castillo? —preguntó Ron, aburrido.

—No tengo dedos suficientes para contarlos —murmuró Alicia, sintiendo que sus párpados pesaban.

—Ya sabíamos que a Hagrid lo habían expulsado —dijo Harry, apenado—. Y supongo que entonces los ataques cesaron. Si no hubiera sido así, a Ryddle no le habrían dado ningún premio.

Ron intentó verlo de otro modo.—Ryddle me recuerda a Percy. Pero ¿por qué tuvo que delatar a Hagrid?

—El monstruo había matado a una persona, Ron —contestó Hermione.

—Y Ryddle habría tenido que volver al orfanato muggle si hubieran cerrado Hogwarts —dijo Harry—. No lo culpo por querer quedarse aquí.

Ron se mordió un labio y luego vaciló al decir: —Tú te encontraste a Hagrid en el callejón Knockturn, ¿verdad, Harry?

—Dijo que había ido a comprar un repelente contra las babosas carnívoras —dijo Harry con presteza.

Se quedaron en silencio. Tras una pausa prolongada, Hermione tuvo una idea elemental. —¿Por qué no vamos y le preguntamos a Hagrid?

—Sería una visita muy cortés —dijo Ron—. Hola, Hagrid, dinos, ¿has estado últimamente dejando en libertad por el castillo a una cosa furiosa y peluda? —Alicia quiso reír para darle la razón, pero no tenia fuerzas ni para ello. Bostezó y abrió lentamente los ojos (los cuales no se había dado cuenta de que había cerrado) al sentir que la empujaban suavemente por los hombros hasta tumbarla.

Levantó la mirada y se encontró con la cara de Harry inclinada hacia ella— Descansa... —se limitó a decir, acariciando el pelo rubio de Alicia. Ahí fue cuando ella se dio cuenta de que Harry le había colocado la cabeza sobre sus piernas.

Su respiración se fue relajando hasta llevar un ritmo constante, indicando que se había quedado dormida. Para cuando los otros tres se quisieron ir a la cama, se encontraron con un dilema: Harry y Ron no podían subir a los cuartos de las chicas para ayudar a Hermione a llevar a Alicia, y ella sola no podía. Y Harry se había negado a despertarla, diciendo que estaba muy cansada y que si la despertaban, no volvería a dormirse.

Harry tenía una idea, la tuvo desde un principio, pero le daba vergüenza soltarla. Al ver que no había otra opción, sugirió que Ali se quedara a dormir con ellos en la habitación de Harry y Ron y que la despertarían temprano para que pudiese ir a cambiarse a su cuarto.