No rompas mi corazón. #PGP2023

La llamada.

Narra Tina:

Voy por las escaleras camino a mi habitación, hoy a sido un día bastante largo, luego de las clases de Educación Física con el sudor se borró el maquillaje de mi brazo lo que provocó una enorme polémica entre los chicos de la clase y como era de esperar no demoraron en aparecer los rumores respecto a mi quemadura, algunos dicen que fui yo misma y que estoy en depresión porque la relación con Marc está decayendo, otros dicen que simplemente me quemé con el hervidor o la plancha para el cabello y algunos que fue algún familiar lo cual me da terror de que alguien se entere de que es verdad, de que mi padre tiene problemas con el Alcohol y que me pega. De la nada comienzo a entrar en pánico y a maldecirlos a todos en vos baja a lo que solo reacciono yendo a encerrarme al baño de chicas y a llorar en una pequeña esquina de este, mi corazón se hace trizas cada vez que pienso en el monstruo en quien se convierte papá cuando bebé de su amarga cerveza artesanal, sé que él me ama pero cuando toma cerveza es un hombre totalmente distinto.

...

Luego de almorzar con Sky decido ir a casa. El día en la escuela fue muy duro, escuchar todos esos rumores hacían que me derrumbara cada vez más, algunos lo decían con preocupación y otros incluso estaban felices de ver mi dolor salir a la luz, realmente no entiendo como hay personas que pueden ser tan crueles y desearle tanto mal a alguien quien ni siquiera se voltea a mirarlos, en fin mientras pienso en cómo hacer para deshacerme de los rumores suena mi teléfono con una canción de Katy Perry de fondo, era un número desconocido, seguro era alguien de la escuela queriendo extorcionarme y hacer sufrir más de lo que ya estaba sufriendo, por eso detesto demostrarme como una persona vulnerable y me muestro como alguien inalcanzable, detesto sufrir por las palabras de la gente. Vuelve a sonar el teléfono y, al darme cuenta que era el mismo número decido cojer el móvil para decir:

—¿Alo? ¿Con quien habló?

—Hola Tina, soy Jack, el de la escuela, te llamaba para saber cómo estabas por lo de los rumores, puede que nunca hemos cruzado muchas palabras y que cuando lo hacemos sean puras pesadeces entre sí pero quería darte mi apoyo y decirte que aquí tienes un hombro en quien llorar si lo necesitas, sé perfectamente lo que se siente ser el centro de atención por algo que no se destaca por ser bueno, así que estoy contigo en esta.

En ese momento solté en lágrimas, no podía creer lo que escuchaba, el chico al cual peor trate durante toda mi vida ¿me estaba ofreciendo su apoyo? Al darme cuenta de lo que estaba pasando decido contestarle:

—Pensé que te burlarías de mi así como yo me burlé de ti todos estos años, realmente lo siento muchísimo.

—Tranquila Tina, eso ya es parte del pasado, no soy para nada rencoroso, si quieres podemos comenzar de cero y ser amigos.

—¿Amigos, estás seguro de que quieres eso?

—Si, dice muy seguro de si, se que puede ser repentino pero es lo que quiero.

—Esta bien, amigos- Digo con voz quebrada.

—Se puede saber que te paso en el brazo Tina? Prometo no contarle a nadie.

—¿Como se si estás diciendo la verdad?—Digo algo desconcertada.

—De ti depende si quieres confiar en mi o no, pero créeme que todo lo que quiero hacer es ayudarte.

—No me siento lista para hablarlo, quizás en otro momento.

—Esta bien, tu tranquila ¿si?

—Esta bien, emmm... ¿Oye?

No puedo creer que me estoy atreviendo a preguntar esto pero estoy por hacerlo y realmente vienen los nervios directos hacia mi estomago, procedo a mordisquearme el cabello y a decir de forma cortante:

—Qui... ¿Quieres salir uno de estos días?

No lo puedo creer, ¡Lo dije y que!

—Claro que si atina, somos amigos ¿No?

—Sisi, eso somos.