XV

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Last chapter (va a ser el más largo agarren vaselina)

Dos meses después en casa de Kagami.

-Entonces... ¿Es en serio Furihata?
-Y-ya déjenme, yo no lo sabía... ¡Kuroko no me avisó de eso!
-Esperen esperen, necesito resumen que me perdí en cuanto Akashi se preparaba para la cena.
-Aomine-kun, lo que pasó es que Furihata-kun se plantó en la cena de Akashi-kun con la "futura prometida" con la que quería el padre que se casara... -miró a Akashi- ¿Y les interrumpió cuando la ibas a rechazar?
-Sí, resulta que Kouki pensó que aceptaba estar con ella y salió de detrás de una planta de adorno.
-JAJAJAJAJJAJAAJAJAJAJJAJAA FURIHATA ERES MONÍSIMO
-Y yo qué sabía, el muy i-idiota sabía que estaba detrás de esa mierda de plástico toda la cena -hubo una pausa- ¡Me hizo estar una hora de cuclillas!
-Intentar espiar a Akashichi es difícil cielo JAJAJAJJAJAJJA
-Esperen... ¿Entonces estáis juntos? -Preguntó Aomine, todavía comprendiendo qué estaba pasando.
-Sí, mientras la iba a rechazar la estaba diciendo que había alguien que me interesaba... Y justo esa personita salió de su escondite.
-Fue vergonzoso, no podía parar de temblar cuando vi los guardaespaldas de ambos... 
-La vida de ricos se nos escapa de la manos.
-¿Por qué no vi eso? -decía entre carcajadas Takao.

La casa eran constantes risas, resultó que Kuroko le contó a Furihata sobre lo ocurrido con Akashi. El jugador del seirin se puso en la peor situación y se coló en la cena y bueno... El resto ya os lo podéis imaginar.

Kuroko observaba a sus amigos en silencio, sonriendo levemente viendo cómo estaban con la persona que amaban. Kise y Takao reían todavía de lo de Furihata, este intentaba, con la ayuda de Himuro, que los otros dos se calmaran, en vano.
Midorima y Akashi hablaban de alguna cosa que solo sabrán ellos, Aomine y Murasakibara se terminaban juntos una bolsa de patatas fritas.

De repente Kagami salió de su cuarto con una maleta, había estado fuera de escena todo este tiempo.

-Chicos, creo que va siendo hora de pillar el autobus... -y las risas  en un segundo se pararon, se habían olvidado la razón por la que estaban en casa de Kagami. 

Y es que ya habían acabado las vacaciones y en unas semanas empezaba el curso teniendo que separarse. 

Kagami había decidido irse a Estados Unidos a seguir con el baloncesto y Himuro, por mucho que le hizo intentar cambiar de opinión, no lo consiguió. Este chico del lunar miró a Kuroko, el cual su cara era inexpresiva pero oh esos ojos azules... Esos ojos azules expresaban tristeza. 

-Voy llamando al ascensor -dijo Kuroko saliendo rápidamente del piso. Hubo silencio, y es que todos sabían lo mal que lo estaba pasando Kuroko por la marcha de Kagami. 

Lo peor de todo era la sensación de frustración que tenían todos. Algunos querían decirle a Kagami que se quedara, que no se fuera al extranjero, pero sabían que el pelirojo tenía un brillante futuro ahí, era todo lo que él soñaba. Era el sueño de Kagami. 
Por otro lado Kuroko no iba a dejar que alguien parara a Kagami, ya le comentó a Himuro que dejara de insistirle, que él se merecía estar donde iba a estar. 

Himuro sufría por ambos, porque aunque todos sabían del sufrimiento de Kuroko, ninguno sospechaba del de Kagami. Y es que este último llevaba desde principio de vacaciones queriendo declarársele a su compañero pero no era capaz, y acorde pasaba el tiempo, menos ganas de hacerlo tenía. Total, acabarían rompiendo por la distancia.

El viaje en autobus hasta el aeropuerto fue horrible, el tiempo ahí pasó dolorosa pero rápidamente y sin darse cuenta ya estaban en el aeropuerto. 

¿Por qué tenías que ser tú?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora