⌫ | Lisa tiene una buena vida rodeada de lujos debido a los trabajos de sus padres, pero aún así se siente que le hace falta una pizca de emoción a su vida. Jennie en cambio, no tiene una buena vida, pero tiene uno de los mejores escapes: leer libro...
Jennie había llegado tarde a la escuela; se había quedado toda la noche ayudando a su hermano menor a hacer la tarea que ambos se habían quedado dormidos. Su mamá los despertó y les dijo que ya había avisado a sus escuelas que llegarían tarde pero eso no significa que podían tardar mucho más.
La chica de pelo castaño había corrido con toda sus fuerzas tan pronto cuando se puso su uniforme y medio-arreglo su cabello para solamente saber que la maestra de matemáticas no se había podido presentar a clases. Caminó arrastrando sus pies hasta su casillero sacó sus libros, libretas y la carta de Lisa que estaba segura de que estaba ahí, guardándola en la primera libreta que pudo.
Entró a su salón, tomó asiento rápidamente y trato de platicar con sus compañeras de clase para pasar un rato agradable, ellas se habían sorprendido al principio, pero jamás bloquearon su entrada a la conversación. Se la estaba pasando de maravilla y reía a más no parar con ellas contando su aventura de la mañana hasta que sus ojos captaron algo inusual; Lisa se encontraba leyendo Harry Potter y la piedra filosofal.
-Así que ya lo notaste-Dice Nayeon, su compañera favorita de clase mientras todas comienzan a golpear su hombro a manera de juego.
Jennie sacaba su libreta y lee la carta de la rubia, una pequeña sonrisa iluminando su rostro mientras toma un pedazo de hoja de esa misma libreta para escribir una rápida contestación.
-Si necesitas ayuda para cualquier cosa, aquí estamos-Dijo Joy, otra de sus compañeras mientras ella se levanta de su asiento.
su corazón late con fuera y un sentimiento cálido invade su pecho mientras asiente rápidamente con la cabeza y avanza sigilosamente a dónde se encuentra Lisa, quien leía y trataba de poner atención a la conversación que sus amigas llevaban.
Jisoo observa como la chica se acerca a ellas y golpea ligeramente a Lisa para que está despegue los ojos del libro, cumpliendo su cometido.
-Hola Jen-Lisa le dedica una sonrisa a la chica y señala orgulloso su libro.
Jennie le entrega el trozo de papel a medio doblar y, hasta entonces le devuelve la misma sonrisa.
-Más te vale leer los libros y no solo ver la películas, créeme, me daré cuenta.
Y mientras ella camina de regreso a su lugar junto a sus compañeras puede escuchar a las amigas de la chica gritar y hacer alboroto a modo de apoyo
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Lisa:
Trato hecho, no creas que no te tengo confianza, pero esperaré mi libro dentro de un mes.
