La Madre De Mirabel || Encanto AU

Cap 11: Decisión

~⋇DIANA⋇~

Era espectadora de un pequeño desacuerdo Familiar. Nunca tuve familia aparte de Vero, no soy su hija, ni sobrina, ni nada de ella, más bien soy como una ¿amiga?

Desde que era pequeña ella me acogió y me cuido. Era una bebé de un año y había ocurrido una desgracia, sinceramente no quiero decirla porque me duele el tan solo saberlo.

Verónica tenía solo 36 años cuando me encontró como sobreviviente de un incendio, con mi familia muerta. No sabía el porque me había criado como si fuera de su sangre, ahora lo sé y es porque justo antes de encontrarme había perdido a su hija, Mirabel; yo sabía que ella no era mi familia y aún así le decía "hermana" y Vero actuaba como tal, como mi hermana y de hecho muchas personas que conozco si lo creían.

Cuando la ví reunirse con Mirabel me cayó el veinte de toda mi vida, Verónica solo me cuidaba como su familia porque extrañaba a su hija... nunca fue porque me quisiera.

Eso me dolió, pero una persona debe acostumbrarse al dolor y aprender a vivir con ello. Me guste o no.

Sin embargo aún así debía hacer algo, no debía intervenir pero algo en mi hizo que actuará sin pensar.

-Verónica- hablé- ¿Podemos hablar en privado?- ella asintió y así nos apartamos hacía el segundo piso.

Su actuar mostraba furia, desesperación y tristeza, sabía cómo se sentía pero tenía miedo, ví como reaccionaron ante el suceso de esa vela mágica, todos cayeron muy adoloridos ¿Y si algo más grave les ocurre si esa vela se apaga? No quería ni imaginarmelo.

-Verónica, ¿porqué no quieres que ellos vuelvan? ¿Hay algo que que quieras decirme?

-No...- murmuró- Es que, no quiero perder a mi pequeña Bel otra vez...

Un silencio se formó, quería decirle "¿me acogiste solo porque no podías estar con Mirabel?" "¿Soy parte de ti?" Pero no lo hice, ahogue mis palabras y me hundí con ellas.

-¿Solo me cuidaste porque no podías estar con Mirabel?- se me escapó- Ay... perdón, no quise, yo solamente trataba de- mis propias palabras me avergonzaban, había dicho algo que no debía y lo estaba empeorando. Pero de la nada recibí un abrazo de Vero.

-Si te soy sincera.... si extrañaba a mirabel pero nunca te crié por eso. Eras una bebé, necesitabas a alguien que te cuidara.

¿En verdad? Un muy grande y fuerte nudo se formó en mi garganta, pero no debía llorar, no debía yo tenía que ser fuerte y sin embargo una lágrima se me escapó resbalando por mi cachete, representando todo lo que no podía y no quería expresar ¿porque? porque yo debía ser fuerte y los fuertes nunca deben mostrar su debilidad. Aún si están apunto de explotar.

-Yo... lo lamento- dijimos al mismo tiempo- Tu primero.

-Ok, ok, tu primero Vero- ofrecí la palabra.
No me dijo nada pero acepto.

-Yo lo siento, nunca imaginé que esto te afectaría de esa forma. ¿Sabes? Yo te quiero mucho Diana Velardo, nunca pienses que te cuide porque si, yo te amo porque eres así, eres como mi hermana menor ¡o inclusive mi hija!

Una pequeña risa salió de mi, dejando atrás aquel nudo.

-Eres mi girasol, el brillo que me da vida en mis días. No lo olvides.

Ahora comprendía, si, fui acogida por lamentación pero criada con amor. Verónica me aceptó hace muchísimo tiempo y creo que era momento de que yo también lo hiciera.

Con un abrazo lleno de sentimiento por parte de las dos, supe que algo dentro de mi se había ido, se había desvanecido y jamás volvería, esa duda que me atormentaba se había esfumado.

-Bien- hablo- ahora tu. ¿Qué querías decirme?- cierto, si quería decirle algo pero... ya desapareció, las palabras que estaban apunto de salir ya no están, ya no las encuentro.

-Nada, no te preocupes no es nada- dije al final- Bueno, si hay una cosa- claro, el tema principal por lo que vine- Verónica Madrigal Velázquez- jaja que raro decir su nombre de esa manera- Tienes que dejar que tu hija se valla nuevamente a su hogar.

-¿Tú también?- ya valió, su voz cambio completamente, el ambiente alegre y divertido en un segundo despareció y ahora era uno en dónde ella estaba molesta.

-Escucha, tienes que dejar que tu hija vuelva con Bruno y su familia.

-Lo siento- habló- No quiero que se valla, porque no confío en que valla a buscarla. Una parte de mi la extrañaba y mataba esa parte de mi misma día tras día, solo para que esté a salvó de la abuela. Porque algunas veces debes de matar lo que amas.

-Consecuencias- dije.

-Si, consecuencias.

Di un gran suspiro, la tomé de los brazos y la mire. Sus ojos estaban demostrando lamentación, furia, tristeza, sentimientos encontrados. La abracé y sentí su dolor y ella sentía mi amor por ella.

-Oye... piensa como ella y yo, ¿acaso no crees que siempre me despierto con el deseo de encontrar a mis padres? saber acerca de ellos, es difícil Vero y Mirabel tiene que encontrar esas respuestas, yo si quiero que ella vuelva a su hogar porque se que ella si encontrará lo que busca, lo que yo nunca podré...

-Diana...- separándonos al fin comprendió y acepto con su cabeza.

-Bien, acepto pero no veré como se van.- se alejo de mi hacia una esquina. Me baje nuevamente y ahí encontré a Camilo y Mirabel abrazándose.

-¡Hey chicos!- llame su atención- tengo buenas noticias, convencí a Verónica para que vuelvan a casa.

-¿Enserio?- la felicidad había vuelto.- ¡Bien! Eso es grandioso. Debemos empacar ya, el señor Simon está un poco débil pero supongo que podríamos llevarlo en la carreta y-

-Esperen- se oyó una voz débil- yo me quedaré niños- era el señor Wiesenthal, se levantaba con dificultad del lugar en el que descansaba- no estoy en condiciones de moverme tanto y menos en un bosque o en montañas. Además, ya les enseñe todo lo que deben saber para el camino, yo estaré bien.

-¿está seguro señor?- preguntó Camilo.

-Claro- hubo un último abrazo entre ellos- las cosas están en la carreta, la dejé antes de entrar, ahí encontrarán todo.

Mirabel y Camilo acertaron al mismo tiempo.

-Diana, te gustaría... no sé, tal vez ¿acompañarnos a Mirabel y a mi?

-Wow eso es... am... ¿que puedo decir? estem, yo, no sé, tal vez pero- eso fue algo que me sorprendió tanto que se me helo la sangre.

-Ve- oi atrás mío- Ve Diana, es un lugar hermoso, sería una oportunidad malgastada si no vas.

Lo pensé bien, si Verónica que es mi tutora me dió ya permiso supongo que no hay nada de malo.

-Esta bien. Si voy.

Hola queridos seguidores y lectores, oigan lamento tanto haberme tardado, ustedes saben que se me ha estado yendo la inspiración xd, pero bueno aquí estamos, seguimos vivos jaja.

En fin aquí les traigo otro cap, dónde bueno esta vez que diferente ¿no? más o menos xd

Bueno, me retiro chao