Perdonenme Soy Omega 2- Jichen

#04

Jisung y Jimin continuaron conversando, e inclusive Jimin le contó algunas cosas sobre la marca que Jisung desconocía.

Jisung también hablaba de algunos que otros temas con Jimin omitiendo la parte en la que él y Chenle habían tenido relaciones sexuales cuando Chenle se encontraba en el celo, por último Jimin se fue.

—Así que...— comienza hablando para si mismo el pequeño alfa.

—Tengo que encontrar a Chenle— propuso para si mismo.

Se quedó en silencio unos segundos mirando a el suelo pensando un momento.

—Pero, ¿Dónde estará?—levanta la vista y la dirige hacía la puerta.

Se levanta de la cama y camina hacia está con el pensamiento de cerrarla nuevamente deteniéndose al estar cerca de la cerradura.

—no, ¿Que demonios me pasa?

Cierra la puerta con seguro y va hacia la ventana, abre las cortinas y luego la ventana, había un hermoso sol.

—el sol sería mucho más hermoso si estuviera Chenle aquí..

Quería llorar nuevamente pero ya debía parar un momento, él lo sabía, pero ahora solo el pensamiento de qué Chenle podía tener a otro alfa en el momento que el solo podía pensar en él invadía su mente.

Entra al baño, se quita la ropa tirandola al suelo, estaba un poco débil y cansado por lo que entró a la bañera afirmandose de la pared, se sentó apoyando su espalda en la fría pared del baño, abrió la llave de la bañera a temperatura tibia, los ojos comenzaban a cerrarse, y quedó profundamente dormido mientras el agua lo golpeaba con gotas.

—¡Jisung!, ¡Jisung!— era la voz de Chenle.

Jisung abrió los ojos estaba en el mismo lugar donde el y Chenle habían tenido relaciones, ¿acaso era un sueño todo lo que sucedió?

—Chenle..— susurra con voz quebrada el alfa mientras las lágrimas comenzaban a brotar de sus ojos preocupando al Omega.

—¿Que sucede?— el Omega se acercó para limpiar las lágrimas de el Alfa.

Jisung lo mira atentamente, tenía ganas de besarlo pero luego miro directamente al cabello de Chenle, se le estaba volviendo de color verde.

—Chenle... Tu cabello— Jisung señaló el cabello de Chenle.

—¿mh? Oh, eso, ya lo sabrás dentro de poco— Chenle se levantó del césped.

—¿Dentro de poco?, ¿Cuándo?

—Cuando nos volvamos a encontrar, te estaré esperando, en un reino vecino— Chenle se dió la vuelta y comienza a caminar.

—No, no te vayas Chenle— Jisung estira la mano hacía él, volviendo a tener los ojos llenos de lágrimas que caían por sus mejillas.

—Nunca olvides que te amo, Jisung— Se escuchaba la voz de Chenle un tanto lejana.

—¡Prometo que te encontraré, y cuando lo haga, no volveré a dejarte ir de mi lado!— gritó Jisung.

Chenle ya no estaba, cerro los ojos con fuerzas y al abrirlos estaba en la ducha.

—¿Chenle?...