lemmon cortos y largos.
woosanxsanwoo.
🚫los lemmon son totalmente de mi propiedad. Dudo mucho que alguien quiera hacer una adaptación, pero en caso de ser lo contrario, favor de pedir el debido permiso al autor original.🚫
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-son 10 dólares joven.-le dijo el cajero a san.
San comenzó a buscar en sus bolsillos hasta que dio con el dinero, pero al darse cuenta que era 5 dólares miro al cajero, este lo miraba con una ceja alzada y cara seria, sabía que el cajero no le iba a bajar el precio.
-lo siento, tomaré lo demás, dejaré el helado de menta.-San estaba un poco triste por esto.
San vivía en un barrio pobre de Corea, no estudiaba y tampoco trabajaba. Su madre fue amable y buena hasta que se caso con otro hombre, su padre no había andado en buenos pasos y terminaron matándolo. Su vida diaria era estar en su casa o con su anciana vecina.
-jovencito san sabías que alguien se mudara al barrio?.-comento la anciana mientras cocía a mano.
-no abuela jenna, no sabía eso.
-no se que le dio con mudarse a un barrio tan pobre.-decía esta sin interés.
La anciana era como una abuela para san ya que esta siempre se preocupaba por el y le daba de comer muchas veces que san no podía. El poco dinero que ganaba recogiendo latas no le daba para mucho, diría que comer cuatro vasos de ramen era demasiado con lo tan poco que ganaba.
-tal vez sea igual que nosotros abuela jenna.
-mmm, tienes razón pequeño, bueno mi niño iré a descansar si?.-San asintió y la ayudo a llegar a su habitación.
San recogió, limpio todo y se fue a su casa, prácticamente era al lado de la abuela jenna.
Una semana paso cuando ya el nuevo vecino de la casa de alfrente se había mudado, san lo había visto pocas veces ya que siempre estaba encerrado. Había pensado si ir hasta ahí y saludar pero no se atrevía hacerlo.
Se encontraba frente a la puerta de su nuevo vecino, pensando si tocar o no pero dejo todo a un lado y toco dos veces la puerta la cual no recibió repuesta, la tercera tocada y sintio alguien acercarse hasta esta.
La puerta se abrió y pudo observar a un chico alto, buen cuerpo, su cabello era color gris obscuro, era tan guapo para los ojos de san, no sev veía como una persona pobre incluso podria decir que parecia de mucho dinero pero porque estaba ahí?, no formuló palabra.
-mmm...hola?
San salió de su burbuja.
-h-hola yo... solo quería pasar a saludar ya veo que eres nuevo así que quería darte la bienvenida.
-oh ya veo, gracias por eso.
Ambos seguían mirándose sin formular palabra hasta que san habló.
-me llamo san.- extendió su mano al contrario.
-wooyoung, un placer san.- respondió el saludo.
-Bueno..mm creo que ya me voy wooyoung un placer conocerte.
