Capítulo 16

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Alexia se hizo la conmovida y se llevó las manos al corazón haciendo puro teatro.

-No sabía que te habías vuelto poeta. He estado a puntito de creerme tu discurso, hasta que volví a recordar cómo me engañaste con una de mis mejores amigas y encima tuviste la poca vergüenza de mentirme a la cara -Martijn iba a responderle, pero antes de que pudiera pronunciar cualquier palabra, Alexia lo volvió a interrumpir-. No intentes excusarte porque fueron varias veces y te pregunté.

-De acuerdo, he captado el mensaje de que ya soy parte del pasado y que fui un mierdas, lo cual acepto y reconozco, déjame hacer esta vez las cosas bien. Como novio fui una basura, pero quiero recompensarte como amigo -Martijn lo decía totalmente en serio y como muestra, estrechó su mano esperando la respuesta de la holandesa.

-¿Estás de coña? ¿Es alguna cámara oculta? ¿Amigos tú y yo?

-No te merecías el trato que te di durante el tiempo que estuvimos juntos, además en el partido me di cuenta de que había otra persona que captaba tu atención, no soy estúpido, por algo he entrado aquí. Sabía que ya no había nada que hacer y quería también comentarte que disimulas bastante mal -esta vez, Alexia se quedó sin palabras y simplemente escuchaba a Martijn mientras se mordía la lengua para intentar no delatarse-. Hagas lo que hagas te apoyaré y esta vez no voy a defraudarte. Te doy mi palabra.

Alexia se pensó su respuesta porque una parte de ella decía que las segundas oportunidades nunca eran buenas, sin embargo, quería perdonarlo y ella estaba segura de que lo había superado.

-Más te vale que cumplas con tu promesa porque si no Holanda se te va a quedar pequeña en cuanto vaya a por ti.

-Como ordene, su majestad -el pelinegro hizo una pequeña reverencia, al incorporarse extendió los brazos para sellar la paz mediante un abrazo-. Entonces... ¿todo bien a partir de ahora? -Alexia asintió y le devolvió el abrazo, por fin podría quitarse esa pequeña astilla que tenía clavada y seguir adelante.

Mientras tanto, a unos 20 metros, estaban Leonor y Lucy que no podían estar más tiempo en cuclillas. Cuando se volvieron a asomar, Martijn y Alexia se estaban dando un abrazo, lo cual hizo que tanto Lucy como Leonor se quedaran boquiabiertas.

-No sabía que estaba viviendo en un episodio de First Dates. Primero tú con Michael y ahora Alexia con el nuevo -comentó Lucy.

-¿Qué dices? Lo de Michael empezó por una broma de Alexia y ya está. Si han vuelto juntos... pues me alegro por ellos -a medida que iba hablando su voz se apagaba.

-La prensa se ha hecho eco de que tienes una ilusión aquí, aunque no han revelado el nombre de Michael.

Leonor dejó de mirar a los neerlandeses para centrarse en su amiga. ¿Era cierto lo que estaba diciendo? ¿Sus padres habían leído tal noticia?

-Estoy hasta las narices de las filtraciones, de verdad -reveló Leonor, cuando volvió a fijar su mirada en la entrada del estadio, Alexia y Martijn ya no estaban-. Mierda, se han ido. Hay que seguirles.

-Nunca me habría imaginado que tú estuvieras diciendo tacos -rió Lucy-. ¿Para qué los quieres seguir? -preguntó Lucy con todas sus intenciones.

Leonor sabía por dónde iban los tiros al oír la pregunta e intentó esquivar las balas como pudo.

-Alexia me ha pegado el ser una mal hablada, perdón. Y con respecto a la segunda pregunta, les quiero seguir para asegurarme que no se van a nuestro dormitorio que está hecho un desastre.

-Ya veo... -las dos se fueron de allí con cuidado de que no fueran vistas por Alexia y Martijn, aunque les sacaba mucho tramo de ventaja.

-En el día de tu cumpleaños se va a hacer una fiesta de Halloween, ¿vas a ir con alguien o tienes pensado ya el disfraz? -preguntó Lucy.

-Eh... pues no... ni siquiera sabía que iba a haber una fiesta...

-Podrías ir con Michael, él ya tiene pensado algunos disfraces.

-¡No! No le digas nada a Michael, no quiero que se nos vincule de una forma que no es, después de esa noticia será mejor que no nos juntemos tanto para no alimentar los rumores -dijo Leonor intentando excusarse.

Lucy asintió no muy convencida y entraron en el internado, siguiendo con su búsqueda. Alexia y Martijn habían desaparecido y la española hizo una mueca de desagrado, se despidió de Lucy al decirle que iba a su cuarto a descansar.

De camino, iba mirando disimuladamente a todos los rincones por si acaso, pasó por el salón central, que tenía una mesa en el centro y alrededor muchas sillas y justo al final una gran chimenea.

Miró, pero sin encontrar nada y cuando estaba por darse por vencida, alguien la llamó, haciendo que se parara en seco.

-¿Buscas a alguien? -Leonor se giró para encontrarse la cabeza de Alexia asomada a un lateral de la silla de la esquina, por lo que entendía que estaba tumbada y no la vio por los respaldos de estas.

-Eh... no, sólo pasaba por aquí -Leonor se acercó lentamente hacia donde se encontraba Alexia y se sentó en la silla más próxima a ella en la fila derecha-. Ya que estás aquí, quería pedirte perdón por haberte mandado a la mierda antes.

-Me han dicho cosas peores, no te preocupes -Alexia rio, aceptando las disculpas de Leonor-. Por cierto, pronto es tu cumpleaños, ¿quieres algún regalo en especial?

-Si te digo lo que quiero, no sería algo sorpresa.

-Es que te regalaría un cigarrillo eléctrico o un móvil que no sea del siglo pasado, pero quiero estar segura de que el regalo te guste, ya para el próximo me lo prepararé más.

Leonor se quedó pensativa, mirando a un punto fijo a la nada. La verdad es que no sabía lo que quería por su cumpleaños, debido a que siempre había recibido regalos caros y grandes, esta vez quería algo que tuviera algún significado para ella, algo que pudiera recordar para siempre.

-Podrías invitarme a la fiesta de Halloween.

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Sé que he actualizado tarde, pero en mi defensa diré que ayer llegué a Alemania de erasmus y he estado un poco sofocada estos días :'). Para este próximo sábado, intentaré por todos los medios tener 2 capítulos nuevos como compensación.

Gracias por la paciencia y nos vemos!!

A Dos Coronas de TiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora