Oscilación Ártica

Capitulo 1

En el momento en que escuchó el timbre de la puerta, Korra se levantó de su asiento en el sofá con una ráfaga de viento, su copia de Power Disc Weekly salió volando de la mesa de café. Su taza de café también salió volando, pero se dio cuenta justo a tiempo y la atrapó con su Agua Control, tomándola con una mano mientras abría la puerta con la otra. La vista de la persona que había estado esperando trajo una amplia sonrisa a su rostro de inmediato.  

"¡Asami!"

Su novia se rió, rodeándola con ambos brazos por un momento antes de que Korra se hiciera a un lado y la dejara entrar a la sala de estar. "Es bueno verte también, Korra".

Sí lo es.

"¿Adivina qué?" El Avatar se alejó, aún sonriendo; el hecho de que Asami viniera casi todos los días a este punto no lo hacía menos especial en su mente. “¡De hecho, me acordé de ordenar en Narook's! Llegará en media hora más o menos.

"Dices eso como si fuera un logro".

Korra hizo un puchero con fingida molestia. “¿No puedes seguirme la corriente, 'Sami? Trabajé duro para recordar lo que te gustaba.

Los dos se sentaron en el suave sofá, Korra sonrió de nuevo cuando su novia se inclinó hacia ella. Momentos como estos, donde ninguno de los dos tenía que preocuparse por sus responsabilidades, eran maravillosos, y si ella era un poco más cálida de lo normal, a Asami ciertamente no parecía importarle.

Supongo que mi llama interior reacciona al estar cerca de ella... 

"Lamento haber llegado tarde", murmuró Asami en su oído. "Sucedieron cosas".

“¡No te preocupes por eso, ni siquiera llegaste tarde! Simplemente... no llegaste temprano.

La heredera se rió entre dientes y agitó un dedo hacia Korra. “Temprano es puntual, puntual es tarde-”

“Llegar tarde no es excusa, ¡lo entiendo!” Había oído la frase suficientes veces como para memorizarla, aunque no había hecho ninguna diferencia. "No todos podemos ser tan puntuales como usted, señorita Asami Sato".

"Bueno, eso es parte de administrar un negocio, Korra", la regañó su novia. "Y tú eres el Avatar, debes saber cómo llegar a tiempo".

"Suerte que tengo una novia maravillosa para asegurarse de que no llegue tarde, entonces".

Esta vez, ambos se rieron. Parte del elegante cabello negro de Asami caía sobre su rostro y lo apartó con su típica gracia.

Todos los días podrían ser así… eso sería increíble…

A pesar de haber estado juntos por más de un año, Korra aún no se había mudado con Asami. Su novia se lo había pedido hacía un mes más o menos: había mucho espacio en la mansión de Sato, y ciertamente ambos querían permanecer juntos, pero después de una larga discusión habían decidido que no estaban listos para dar ese paso. 

Definitivamente vendrá pronto, ambos lo sabemos, pero no ahora.

"¿Korra?"

"¿Sí, 'Sami?"

Su novia suspiró resignada. “Voy a tener que ir a Agna Qel'a mañana. Ha surgido un asunto urgente.