✰✯18✯✰

5.1K 264 52
                                    

✯✰✯✰✯✰✯✰✯✰✯✰✯✰✯✰✯✰✯✰

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

✯✰✯✰✯✰✯✰✯✰✯✰✯✰✯✰✯✰✯✰

— dale Ami, entremos. –me agarra la mano.

— ¡para! Bancame. –lo mire. Es Marcelo Gallardo ¿entendes?.

Al final Matías me convenció para que venga a cenar con ellos.

— si Ami, es mi papá. –se ríe. Se quién es.

— ¿vos entendes que yo lo miraba desde chiquita?.

— ¿vos entendes que te estás
comiendo a su hijo?. –me da un beso. Dale vamos.

Nos dimos vuelta para entrar y vimos que estaba Gallardo mirándonos. Matenme.

— ya veo que no son amigos. –se ríe mirando a su hijo. Pasen chicos, ya está la comida.

— pa. –habla Mati. No digas nada enfrente de mamá.

— una tumba.

Sonríe, pasamos medio separados no de la mano cómo estábamos anteriormente, salude a los hermanos y a Geraldine, la mamá de Matías.

|✩|

Terminamos de cenar pero estaban tomando un vino, nosotros con Matías estábamos en el patio tomando una cerveza que nos robamos.

— mira esa estrella. –señala el cielo. Bueno, te la regalo.

— buena. –sonreí. Gracias.

— un beso a cambio.

— están todos adentro. –lo mire.

— en la suya.

Me acerqué y le di un beso, nos quedamos un ratito más ahí sentados, hasta que tuve que irme a casa.

— pa, voy a llevar a Amira. –anuncia Matías.

— bueno hijo. –se acerca. Un gusto conocer, tu hermano vivía hablando de vos. –sonríe.

— ya esta tomado el viejo. –se ríe Santino.

— gracias. –le sonreí.

Me estoy muriendo por dentro.

— traela más seguido.

Salude a todos, salimos, mientras Matías manejaba lo miraba, estaba.. es lindo en realidad, no puedo creer cómo caí, cómo caí tan rápido, cómo una pelotuda.

|✩|

Me desperté a las siete de la mañana para poder ir al colegio, me bañe y preparé, Julián me había preparado la chocolatada una vez que fui a la cocina.

— te dejó plata y volves en uber. –me mira. Entrenó, Agustín no puede buscarte.

— bueno. –lo mire. ¿Ahora me voy caminando?.

— no tonta, te voy a dejar yo ahora, vamos.

Terminé de desayunar, me dejó en el colegio y se fue, entré al curso, me senté en el fondo.

A los pocos minutos Santino se paso a sentar conmigo, me reí saludandolo.

— tenemos una hora libre, falto la profesora.

— que paja. –me me apoyé en su hombro. Encima tengo sueño.

— y dormí, prometo no sacarte fotos.

Me reí, no voy a dormir, no puedo con todo el quilombo que están haciendo en el curso. Pedí permiso para ir al baño, en eso sentí que me estaban llamando, número privado.

— ¿hola?. –atendí.

— escúchame pendeja de mierda ¿quién te pensas que sos para bloquearme? Te pensas que no iba a enterarme que te estabas cogiendo al hijo de Gallardo.

— yo no me estoy cogiendo a nadie Luca. –hablé seria. Te dejé clara las cosas boludo, ya está, déjame en paz.

— me cagaste flaca. –me grita. Sos una mierda.

Corté, corte llorando, no puedo creer lo que acababa de escuchar, traté de calmar mi llanto para poder volver, pero no puedo.

Volví al curso, me senté apoyándome en la mesa.

— ¿qué Pasó?. –me mira Santino.

— nada. –le sonreí. ¿Por qué?.

— no se, volviste triste del baño.

No dije nada, me quedé callada nomas.

— no te lo iba a dar porque me peleé con Matías. –vuelve a hablar. Pero te mando estás gomitas, cambia esa carita.

𝚊𝚖𝚘𝚛 𝚊𝚍𝚘𝚕𝚎𝚜𝚌𝚎𝚗𝚝𝚎; 𝙼𝚊𝚝𝚒́𝚊𝚜 𝙶𝚊𝚕𝚕𝚊𝚛𝚍𝚘Donde viven las historias. Descúbrelo ahora