Soy solo tuya

Capítulo 16

Mi vida real es real, pero parece una película. Esto es una pesadilla, o mejor dicho un mal sueño, porque las pesadillas también son sueños... Cuando somos pequeños nos dicen que los sueños pueden hacerse realidad, pero da miedo darse cuenta que las pesadillas también son sueños.

QUIERO MORIR

A veces nos hacemos ilusiones con que vamos a tener a alguien para siempre, pero eso nunca sucede.

Ya es domingo. Estos días la he echado de menos. Extraño su piel.

Esta noche he soñado con ella. El sueño ha sido lindo y a la vez triste ya que no somos pareja y en el sueño se ha notado.

Ana es tan hermosa me encantan sus ojos, me encanta como me provoca y como me hace sentir cuando estoy con ella, cuando la veo siento paz y satisfacción. Es perfecta hasta en mis sueños. No existe nadie perfecto pero ella es la excepción. Tal vez no sea perfecta 100% pero sí 99%.

¿Queréis saber el sueño que tuve con ella? Lo sé, sé que lo deseáis con todo vuestro corazón.

Ana vino en busca mía en su moto como antes hacía. Antes de subirme a su moto le dí un beso en la mejilla y otro en la comisura de sus labios... Fuimos al mismo río donde le pedí que fuera mi novia. Estuvimos hablando sobre lo que habíamos hecho estos días, también le conté lo de mis padres, le sentó como un tiro en el estomago, se quedó blanca cuando le conté... Y también me dijo que podía haber sido alguna señora que hubiera querido hacerme una broma o que se haya confundido con otra chica... Al principio, pensé que podía tener razón, pero luego recordé la marca que le vi en el brazo derecho, encima de las marcas ensangrentadas en la muñeca con lo que le hubieran mantenido retenida. Esa marca que mi madre tenía era inconfundible, se la hizo mi padre cuando ella se metió en medio porque él quería abusar de mí... Con el mismo cuchillo que cortó mis pantalones, le cortó el brazo a mi madre poniéndole CALLA, mientras yo estaba tirada en el suelo sin poder levantarme...

Después ella me estuvo dando consejos y me dijo que aunque ya no eramos novias ella estaba ahí para lo que me hiciera falta, cuando se enteró de lo de la cicatriz de mi madre y de lo que me intentó hacer mi padre, con gran impotencia me abrazó fuerte y lloramos juntas... Nunca pudimos decir nada a las autoridades, nos amenazó con cortarnos el cuello. Y aunque yo siempre intenté buscar ayuda contándoselo a mi psiquiatra y dándole ánimos, no fue fácil ni posible cuando ella tenía más miedo que yo a que me cortara el cuello por "chivata", ya me había destrozado la vida lo mejor que podía hacer era matarme.

Luego nos tumbamos juntas en unas toallas mientras mirábamos el anochecer... Nuestras bocas estaban demasiado cerca y yo me moría por volver a besar sus labios, me acerqué más y no pudimos aguantarnos las ganas de besarnos, estuvimos un buen rato besándonos y abrazándonos. Le presté mi camiseta porque estaba tiritando de frío y yo me quedé en sujetador,( no tenía frío estaba demasiado caliente después de sus besos,)ella no paraba de mirarme el pecho, entonces cogí su mano y la metí debajo de mi sujetador y estuvo tocando un poco pero luego se puso nerviosa y paramos...

Me había tocado el pecho al aire libre... WOW

Después del río fuimos a su casa a ver una película, estuvimos toda la película abrazadas y riéndonos, luego me dijo que me quedara allí en su casa ya que era de noche y mi piso estaba lejos. Esa noche dormimos juntas, bueno hicimos otras cosas más deliciosas... Aquí viene la parte que más nos gusta... 

Nos parábamos de mirarnos, su cama era mediana, pero nosotras estábamos pegadas una a la otra, necesitábamos calor, yo necesitaba el suyo y ella el mio ... 

Yo dí media vuelta para ver si ella hacia algo o pasaba. Rápidamente, pegó su vagina a mi trasero, mientras me daba besos por el cuello. Se  me erizó la piel y mi vagina empezó a palpitar, mientras mis dedos entraban y salían dentro de mí sin control cada vez que ella se pegaba más o me acariciaba suavemente. Sus manos bajaban por mi cuerpo hasta llegar a mi vagina que estaba siendo perforada por mi mano derecha. Cuando ella quitó mi mano para introducir la suya, gemí tan fuerte que seguro lo escucharon hasta los vecinos. Empece a sudar y entonces me di la vuelta y nos quedamos una frente de la otra .