complicidad de madres

Guerra

¿Quién diría que la relativa paz que había se rompería a causa de los wen?

No mucho después de un mes los wen atacaron  los receso de las nubes quemandolo exigían el comienzo de la guerra.

El matrimonio wei, los líderes lan acordaron aliarse y acabar con los wen.

Al poco tiempo muelle de loto también fue asediado,apenas y lograron salir los líderes y sus hijos.

Jiang cheng contaba con dos meses de embarazo y no se notaba aún al igual que su hermana, enviaron a Yanli con su prometido a lanling madam yu y fenmian aún no sabían el estado de su hijo, también se unieron a los lan y wei, no mucho tiempo después Qingge nie también se unió a ellos dando comienzo a la inminente guerra.

Lan-zhan, soy capaz de defenderme y lo sabes estoy embarazado no inválido.

Mmn, Mantente a mi lado no te alejes.

Sin embargo no contaban con que los wen exigieran un adoctrinamiento.

Wangji, Wuxian, Jiang chen, Huaisan y zixuan debían asistir como los jóvenes maestros.

Sin embargo tres de ellos estaban en un estado no propicio para la guerra, ellos lo sabían más no podían hacer nada, no debían dejar que descubrieran su estado o las consecuencias serían devastadoras.

El adoctrinamiento no fue tan pesado como imaginaron que sería, los primeros días, al cabo de un mes el agotamiento y falta de sueño les cobraba factura.

En las caserias no tenían permitido usar armas, muchas veces se salvaron de ser heridos o asesinados por algún cadáver.

Logrando escapar de las garras wen wuxian contaba con 5 meses de gestación.

De noche en la seguridad de su tienda el wangxian disfrutaba de un momento a solas

Lan-zhan, dame un minuto tu hijo no deja de patear mis entrañas,

con una mueca de dolor presente wuxian acariciaba su vientre ya abultado.

wangji se dirigió hacia la cama, posando una mano en el vientre de este proporcionándole calor y paz arrulla do a su bebé mientras tarareaba WangXian.

Afuera del campamento en otra tienda se encontraba Jiang Cheng recostado en su cama agobiado y furioso por la repentina desaparición de su prometido.

Como se atreve, desaparecer sin ninguna explicación sabiendo que va a ser padre, te juro Lan Xichen que cuando te vea Te romperé las piernas, lágrimas comenzaron a caer de sus mejillas acariciando su vientre de cuatro meses que aún podía ocultar,

Tienes que regresar, tu hijo te necesita, yo te necesito

Sin darse cuenta alguien entró sin avisar, tomándolo con la guardia baja y tocando su hombro.

Un golpe hacia el atacante fue suficiente para ponerse de pie y prender las velas, listo para atacar.

Sus ojos se posaron en el hombre que yacía en el suelo, túnicas blancas y cinta en la frente una encantadora sonrisa y aquellos ojos  castaños que tanto extrañó.

Hasta que te dignas a aparecer, jump, frunció su seño y mostró un leve reproche.

A-cheng, he vuelto.

Levantándose del suelo el jiang se abalanzó a los brazos de su amado.

No vuelvas a desaparecer o te romperé las piernas. Soltó en un hilo de voz

No lo haré a-cheng, no volveré a separarme de mi familia.

Tomando al menor en brazos luego de quedarse dormido en su regazo lo recostó en la cama y lo envolvió en sus brazos dándole suaves toques a su apenas abultado vientre.

Cada batalla era una masacre ningún bando daba su brazo a torcer los nie tomaron varios puntos antes reclamados wen y los aniquilaron por completo.

Para en tonces ninguno se había detenido a pensar por qué dos embarazados se habían unido a la guerra, aún teniendo a sus prometidos cuidándolo día noche era muy peligroso.

Cangse Sanren ya había dado a luz a una muy hermosa niña tan tranquila y dulce, aún habiendo nacido en época de guerra se mantenía Serena la viva imagen de su padre, resguardadas en los recesos de la nube las amigas seguían muy preocupadas por sus retoños.

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Espero les guste este capítulo

Nos leemos pronto bye

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