Capítulo 5: ¡El inicio de la guerra!

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Por fin he podido asistir a clases con mi scooter, ya que, después de que Nicki arrollara la moto de Danger junto a mi scooter, lo que quedó de éste, lo mandé a arreglar y por fin puedo desplazarme sola.

Como siempre, voy muy apurada, la campana de clases ya tocó y estaba que me meaba encima, entonces, corrí hacia los baños y vi algo que me perturbó mucho:

La negrata del negrata, el pedazo enorme de miembro viríl que tiene... terminé meándome ahí mismo.

¡Ups!

Que bueno que me traje la ropa de recambio para Deporte, puedo usarla todo el día en ves de ésta que está toda cochina y miada.

Durante TODAS las clases, mi espacio personal ha sido invadido por los constantes papeles que me lanzan por la cabeza los idiotas de los Touch And Go.

"Te vamoh a violah mientrah duermeh atte: Rallan Mantekilla".

"Tuh escuter la vamoh tirar puro balazoh oie cy atte: Alfreo Flagüers".

"Ésto es la guerra, gorda de mierda. Atte: Danger". 

Esos fueron algunos de los miles de papeles que me arrojaban.

Lo que más rescato fuera de las amenazas, es que el puto profe de Artes, Romeo Santos, el que canta como Julieta y todos creíamos que era tan marica como mis APÉH, se estaba queriendo ligar a mi amiga Nicolasa, osea, ¿qué le pasa? Puto pedófilo, se excusó con que Nicki tenía algo especial, ella se rió de mi molestia en el tema diciendo que al menos a ella la quieren.

Hija de puta.

A la salida, los Touch and Go me han rodeado con sus moticicletas.

- ¿Y tú a dónde te vas, gorda lechona?

Oh, Danger, eres tan amoroso  (͡° ͜ʖ ͡°).

- Voy a mi...

- ¡No te di permiso para hablar! -salté de susto tras ese grito- ¿Cómo se te ocurre robarnos la ropa a NOSOTROS? ¡No te das cuenta que nosotros somos los más popu del insti!

Tenía dos opciones: dejar que me violaran aquí en medio de la calle o defenderme.

- ¡AHHHH! -grité agarrando mi scooter, los golpee a todos con ésta- ¡HIJOS DE PUUUTAAA!

Los tres bajaron de sus bicicletas, desesperada, comencé a revolcarme con el scooter azotando todo a mi alrededor como si tuviera epilepsia.

- ¡Déjenla! -gritó alguien.

Voltee y era...

OH, DIOS MÍO.

NO es otra novela Cliché (JB, LU y Rayita)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora