Capítulo 10

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Al día siguiente desperté y no hice nada en específico. Solo esperaba ansiosa porque se llegará el mañana para volver a verlo.

Sabia que eso estaba mal. Que debía encontrar la solución para no sentirme así. Pero mi corazón no podía evitarlo realmente me sentía demasiado atraída por él. Y me siento impotente al no poder controlarlo.

El día siguiente se llegó. Yo estaba bastante emocionada por verlo de nuevo. Mi corazón latía como un loco. Estaba realmente feliz.

Pero cuando llegué los vi. Zoe y Noah se estaban besando. Salí corriendo al baño antes de que se dieran cuenta de mi presencia. Lágrimas comenzaron a rodar por mis mejillas y me recordaron que debía cumplir mi misión. Y ya que era lunes podría fijarme en otro chico.

Después de limpiarme los ojos y maquillarme un poco para disimular volví al salón. Para mi sorpresa él me ignoró ni siquiera me miro, era como si no hubiera existido.

Lo miraba de reojo. Pero él nunca volvió a mirarme. Al final de la clase estaba guardando mis cosas. Cuando ella se acercó con él a su lado.

–Anda dile–Le ordenó Zoe a Noah.

–No quiero que te vuelvas a acercar a mi–Noah me miro con desprecio.

La sangre me hervía del coraje. ¿Cómo era posible que se dejará manejar como un títere?

–Esta bien–Le asegure–, pero antes te diré algo de verdad eres idiota.

Tomé mi mochila y me fui del salón. Comencé a correr y las lágrimas volvieron a salir. Corri cuánto más pude y es por esto que no debo enamorarme.

Al llegar a casa. Me encierro en mi habitación de todas formas no hay nadie en casa. Me tiró en la cama.

Me siento triste. Mi corazón siempre ha estado hecho mil pedacitos desde aquella vez, pero ahora me sentía tan triste quizá mucho más de lo que estaba en aquel momento.

Decido levantarme y ponerme a hacer la tarea. Camino de un lado a otro para pensar todo en menos él. Pero es la única imagen que pasa por mi mente.

Decido salir en busca de otro chico. Un chico nuevo necesito uno nuevo. Salgo desesperada.

Pero mi misión falla. No puedo fijarme en nadie más, él es único que invade mi mente ahora mismo.

En estos momento desearía no haberlo conocido de ninguna manera. ¿por qué tenia que venir y arruinar todos mis planes y estrategias?

Pero yo fui la tonta. Así que después de todo había confirmado lo que sentia estaba enamorada de verdad, era la segunda vez que estaba enamorada de alguien pero no podía hacer nada al respecto.

Mi corazón estaba hecho mil trizas. Me dolía más esto que lo que paso con  Mason.

Solo podía llorar. Esto es lo que precisamente quería evitar sentirme así. El dolor, dicen que es aquello que nos hace sentir vivos. En mi opinión creo que nos hace sentir muertos en vida, especialmente con el dolor emocional.

Después de tanto llanto me quedé dormida. Cuando abrí los ojos, ya estaba totalmente oscuro. Esta vez la luna estaba cubierta por nubes.

Mire el reloj eran las 3 am, volví a pensar en todo lo que estaba sucediendo. Pero de cualquier manera por ahora no podía hacer nada. O quizá no hablar con él e ignorarlo me ayudaría.

Amar a alguien duele demasiado. Especialmente si esa persona no corresponde a tus sentimientos. Ya me había equivocado 2 veces. Amé a quienes nunca me correspondían.

No podía evitar llorar y llorar. De nada servia,pero al menos me hacía sentir un poco mejor. Aunque en realidad, no quería sentirme asi. Lo había evitado durante todos estos años pero todo se fue a la basura.

Ahora estaba enamorada de ese idiota.

Cuando amaneció me levanté. Y me preparé para ir a la universidad. Caminaba hacia allá. Muchos pensamientos pasaban por mi cabeza.

Creo que debo renunciar a lo que siento por él. De nada me sirve. Seguro dentro de unos meses volveré a la normalidad.

Pero no puedes evitar este dolor para siempre.

Me decía una parte de mi misma. Claro que no puedo evitar sentirme así, es parte de la vida.

Al llegar a la escuela. Zoe estaba bastante cariñosa con Noah.

Pero qué hipócrita. Y él es idiota.

Seguí con mi camino hacia mi asiento pero pude sentir a Noah mirarme por unos segundos. Saqué mis cosas y entonces me di cuenta que había olvidado hacer la tarea.

Decidí salir de la clase. Y me senté ahí a esperar a que terminará la clase. Solo miraba a los estudiantes pasar.

De pronto uno se acercó a mi. Miraba hacia abajo así que solo vislumbre sus zapatos.

–¿No hiciste la tarea?

Preguntó él. Alze la mirada y lo vi frente a mi. Al idiota.

–No importa.

Volvi a bajar la mirada.

–No te preocupes. Le dije a la profesora que me habías dado tu tarea y te la califico.

–No seas tan amable ¿quieres?–Lo mire molesta–, seguro que Zoe se molestará demasiado si se entera.

–Lo siento.

Me puse de pie y caminé por el patio de la escuela. Solamente daba vueltas pues no sabía que hacer.

Solo esperaba el milagro de olvidarlo pronto. Pero para qué esperar un milagro? si yo misma podía resignarme a olvidarlo.

Un chico nuevo cada semanaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora