── Creo que sería mejor que la trasladaran a San Mungo, no puedo determinar qué es lo que tiene y su rostro está pálido como la nieve, se ve que está hinchada ¿Habrá comido algo que le sentara mal?
Deamon se maldecía internamente por no haberle prestado atención a su madre esos últimos meses, no sabía qué era lo que estaba pasando y Devon se veía igual de estresado y preocupado que él. Christopher intentaba mantener la calma y ser optimista, pero solo Acacia pudo traerles paz a los tres.
A eso se refería Deamon cuando afirmaba que ella era su rayo de luz en la oscuridad, no podía sin Acacia.
── Ya verán que la tía Alina se pondrá bien, ella es fuerte y lo saben. Es normal que uno colapse a causa del estrés, también es ser humano ¿Sí? Deben pensar en eso.
── Acacia tiene razón, de seguro solo es un colapso, un poco de estrés a veces puede ser perjudicial. Las clases, el que este torneo sea algo morboso que al público le guste no es algo que a Alina le agrade, además de que el hecho de que Harry participe, en caso de que eso ocurra, no hará que ella se sienta mejor, al contrario ── dijo Christopher ──. Y creo que la señorita Pomfrey tiene razón, debemos llevarla a San Mungo.
── No tenemos el suficiente dinero para eso ── murmuró Devon, tembloroso ──. Es imposible llevarla.
── ¿Es en serio? ¿Tienes el maldito dinero para drogarte, pero no para llevar a tu esposa a un hospital? Debe ser una broma ── reprochó Deamon, al borde de perder los nervios ──. Quizás mamá colapsó por tu culpa, porque lo único que haces es perder el conocimiento metiéndote metanfetaminas cada vez que puedes.
── No eres tan diferente a él ── increpó Chris ──, así que no creo que tengas el derecho de decir eso.
── ¿Y qué? ¿Lo puedes decir tú? Eres un cobarde, no eres capaz de hablar la verdad, te refugias en tus libritos y no ves que nos estamos desmoronando.
── Deamon ── reprendió Acacia ── ¿Puedes dejar esto? Estás convirtiendo la situación en una guerra de quién se mete más mierda en el cuerpo, pero no te das cuenta de que debemos de estar unidos, por tu mamá al menos.
Deamon la miró con los labios apretados, queriendo gritarle hasta por insinuar que ella también estaba metida en eso. Podía ser su mejor amiga, incluso podía ser la novia de su hermano, pero nada de eso se trataba de ella. Él tenía razón, ella no era su hermana.
── Sí, Acacia tiene razón ── declaró Devon ──. De alguna forma me las ingeniare para llevarla a San Mungo.
── ¡Yopuedo llevarla! ── exclamó Albus Dumbledore,apareciendo casi de la nada.
Algo que hiciera por una vez en su vida.
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Alina había despertado, pero todavía no podían ir a verla debido a que no se encontraba bien, los sanadores habían decidido hacerle unos análisis para poder determinar qué era lo que tenía realmente, si se debía a una enfermedad, el estrés o algo que estuviera afectando su salud últimamente. Eso solo lograba que los Hills se sintieran inquietos, les atemorizaba la idea de perder a Alina, era quien manejaba el control de la familia, la persona en la que los tres podían refugiarse porque sabían que los iba a consolar.
── Voy a salir un momento, necesito tomar aire ── informó Deamon dando una excusa, mientras se apresuraba por estar fuera de la recepción.
La situación lo ponía nervioso, decir que estaba preocupado era poco. El miedo lo invadía como si fuese un niño pequeño al que sus padres tenían que arropar y cantarle una canción de cuna antes de dormir porque el monstruo debajo de la cama le impedía hacerlo.
Sacó un cigarro de un bolsillo que había hecho él mismo en su uniforme para esconder cosas como la cocaína, el cannabis que era lo que más consumía, un poco de éxtasis y tabaco. El humo caló sus pulmones en cuanto lo inhaló, dejándose llevar por la sensación de este.
── ¿A esto te referías con tomar aire? ── Christopher lo miraba desde la salida. Deamon no tiró el cigarro, simplemente lo sacó de entre sus labios y lo mantuvo en sus dedos ──. A veces me odio por descuidarte y no haberte puesto la atención que necesitabas, supongo que soy un pésimo hermano.
── ¿Qué? ¿De qué estás hablando? Tú eres un gran hermano, aquí soy yo el que falló, no solo a nuestros padres, a ti también. No debí decirle esas cosas a papá, estaba enojado y mamá me preocupaba, pero es que...
── Lo entiendo, no necesitas explicarme nada hermano, puede que no me creas en lo absoluto, pero te comprendo. Sé lo que se siente estar con mucha gente alrededor y sentirse vacío.
¿Su hermano también comprendía el sentimiento de angustia y soledad cuando todo parecía ir bien, cuando él no lo sentía así? De verdad que Deamon era el peor ser humano que había pisado el mundo, se había encerrado en su propia desgracia, creyendo en su egoísmo que era el único que lo tenía difícil, pero ahora podía ver que su hermano también pasaba por lo mismo. Lo afrontaban de maneras distintas, pero al final la causa y el resultado eran iguales.
── Te quiero Chris.
── Entonces, si realmente lo haces, suelta el cigarro Deamon, por favor ── suplicó el menor.
El chico miró un instante lo que tenía en su mano, pensando en qué era lo que debía hacer.
Lanzó el cigarro lejos y siguió a su hermano hasta la recepción, en donde Devon hablaba con uno de los sanadores que atendía a Alina.
── Chicos, les tengo una noticia ── comunicó Devon en cuando el sanador se marchó ──. Su madre está bien, no tiene ninguna enfermedad, al contrario. Está bastante sana.
── ¿Entonces?
── Bueno, ella... está embarazada.
── ¿Ella está qué?
── Y puede que sean gemelos.
Ahora se arrepentía dehaber desechado el cigarro, porque podía sentir cómo sus pies flaqueaban y lainminente sensación de desmayo.
