Solo una mordida

Charlas de aliento

*Nota de autora*  

¡¡Hola!!

Muy bien, hoy tengo la mañana libre, así que podré publicar cap de este fic que parece estar gustando. Gracias por darle la oportunidad :), a pesar de que su desarrollo es algo lento

Ahora, este cap viene narrado desde la perspectiva de Makoto, así que espero les guste (Para evitar confusiones con los narradores; en algunos tendré que alterar), haré la separación que hice en mi primer fic)

Ojalá les guste :3  

Llegué al departamento sin muchos rastros de lluvia en mi gabardina, Kisumi se coló a mi casa y se tumbó en el sofá, como si él fuera el dueño de mi casa. Bufé por lo bajo pero no me pude enojar con el pelirrosado.

En realidad estaba demasiado agradecido con mi amigo de pelos rosados, fue él quien me consiguió una cita con el chico del que estaba profundamente enamorado. Me senté a su lado y dejé que mi cabeza se deslizara por el respaldo del mueble y me relajé, inspirando lentamente el aire que rodeaba mi casa, un aroma suave y amargo, muy similar al café

-Mako-chan, me alegra que hallas conseguido esa cita con el chico nuevo-sonrió Kisumi, quien me miró con un gran brillo en sus ojos

-De hecho, te lo debo a tí, pues tu conseguiste la cita para mí-le dí una sonrisa

-Soy increible...siempre lo he sido-Kisumi hizo amago de su soberbia, golpeteandosé el pecho y sonriendo con altanería, mostrando sus dientes brillantes

-Ajá...como tú digas, campeón...-resoplé con ironía, mientras buscaba mi celular y le mandaba un mensaje a Haru

-¿Qué haces?-pregunta el ojipúrpura mientras me veía teclear en la pantalla

-Le mando un mensaje a Haru, por lo de la salida-le respondo sin mirarlo

-Uhm...si sabes que lo hice solo para darte una lección...-resopla el pelirrosado, con sus brazos cruzados contra su pecho y refunfuñando. Sabe que mi interés por Haru es peligroso por ambos lados: Yo podría cometer alguna locura y él podría salir herido.

ESO ES LO QUE APESTA DE SER GHOUL

-Kisumi, uno no puede escoger de quién se enamora...-murmuré con un suspiro algo pesado, para luego darle una mirada

-Mako-chan...yo te quiero mucho, y nunca me vas a dar la oportunidad...-resopla el ojipúrpura con unas lágrimas en sus ojos-...es injusto...-antes de que el pelirrosado empezara a llorar nuevamente, lo abracé contra mi cuerpo

-Oye amigo, sé lo que sientes, pero temo que no te podré corresponder como tú quieres; hemos sido amigos por muchos años, creo que lo que tú quieres no va a ser posible...no te veo de esa forma...

-Ouch, que directo-resopla mi amigo, entre triste y alegre. Se seca una lágrima de su mejilla y me da una risilla-Me cuesta admitirlo, pero me alegra conseguirte esa cita; soy demasiado genial para atarme a alguien...Mejor me busco a otro hombre, ya sabes, por temas de autoestima...-el pelirrosado es todo un misterio en cuanto a su corazón; uno nunca sabe si habla en serio o simplemente esta jugando con uno

-Bueno...solo me alegra que las cosas se hallan aclarado...-lo suelto y me da una sonrisa enorme, misma que correspondo-¿Quieres tomar algo?

-¡Sí, muero de ganas de un café!-chilla el ojipúrpura, a la par de que me levanto del sillón y voy a la cocina

Siento la vibración del teléfono en el bolsillo de mi pantalón, mientras dejo la vacía taza de café en la mesita frente a la televisión

-¡Debe ser tu enamorado!-exclama Kisumi con un suave codazo contra mi abdomen

Bufo por lo bajo y me sonrojo con suavidad, a la par de que saco el teléfono y leo el nuevo mensaje que me ha llegado

"Hola Makoto

Hablé con mi amigo Nagisa y dijo que ya podríamos ir con ustedes, ¿donde nos juntamos?, ¿o nos van a pasar a buscar?

Avísame :)"  

Me sonrojé con mucha fuerza mientras volvía a leer aquel mensaje breve. Kisumi me mira con coquetería mientras lee el mensaje

-¡WOW!...¡Estás definitivamente loco por ese chico!-exclama el pelirrosado mientras me zarandea con fuerza-Sigo diciendo que es mala idea, pero no hace mal tratar cosas nuevas en la vida

-Gracias-asentí contento mientras le enviaba un mensaje de respuesta al chico de cabello negro y ojos azúles que tiene mi corazón en su mano

LLegamos a un departamento céntrico en la ciudad; Haru me mendó un mensaje, diciendo que los esperáramos en la recepción del departamento. Kisumi sonreía mientras miraba mi expresión sonrojada, a la par de que se burlaba de ella

-Mira, ahí viene-señala mi amigo al chico pelinegro, en compañía de un muchacho de aspecto joven, de cabellos rubios

Se acercó frente a mí y me saludó con un "Hola" suave, acto que me hizo sonrojar.

-Hola-saludé de vuelta a Haru, quien me regaló una pequeña sonrisita-¿Ese es tu amigo?-pregunté, señalando al rubio

-¡Hola, mi nombre es Nagisa!-saludó el chico rubio, dándome un abrazo fuerte. Su energía me recordó a la de Kisumi y no pude evitar sonreir

-Soy Makoto, el futuro tutor de Haru

-¡Aaahh, así que tú eres el chico del que me habló Haru-chan!-sonrió el pequeño rubio mientras me examinaba con la mirada-¡Increíble, eres más guapo de lo que describió Haru!

-¡Nagisa!-exclamó el pelinegro con las mejillas rojas y los ojos brillantes por la vergüenza. Kisumi se acerca al chico rubio y lo abraza con efusividad, misma que el pequeño regresa

-Eres bajito...¿Qué edad tienes?-pregunta mi amigo pelirrosado al rubio

-18-responde el rubio

-¿¡NO ME JODES?!-exclama Kisumi bastante asombrado mientras sigue mirando al rubio. Haru y yo nos sobresaltamos por aquel grito 

-Ya sé, soy muy bajito para mi edad-resopla el rubio, con un puchero en sus labios

-Cambiando de tema...¿listos para irnos?...-exclama el pelirrosado con un ademán de su mano

-¿Donde iremos?-pregunta el pelinegro con una mirada a su amigo rubio refunfuñante

-Nada en especial, solo es un un café bastante bueno; escuché que el mesero es bastante atractivo...Por si a alguien le interesa...

Eso parece cambiar el humor del chico llamado Nagisa, quien alza la mirada con un curioso brillo, que he visto en Kisumi en contadas ocasiones

-De acuerdo, ya que no tenemos nada mejor que hacer, será mejor irnos-dice mi amigo de ojos púrpuras, quien sale de la recepción del departamento en compañía de Nagisa.

Haru me mira fijo por un tiempo y me agarra de un brazo, mientras salimos del complejo. Su acción hace que me sonroje desvergonzadamente y solo lo observo con ojos grandes

"Vamos Makoto, tú puedes hacerlo", me repetía mentalmente, para apoyarme y conseguir un avance con ese chico