Solo una mordida

Forjando lazos

Haru  

Me aferré al brazo de Makoto mientras me guiaba por las calles de la ciudad; me mostraba algunos sitios que podrían ser de mi interés. Mi amigo Nagisa iba bastante entretenido en compañía del amigo pelirrosado de Makoto.

Me quedé pensando un poco en mis pasos, mi mente me devolvió a un pasado no tan lejano, en donde iba aferrado del brazo de alguien

La nieve cubría las calles tranquilas de Osaka. Una mano buscaba entrelazarse con la mía y yo le dí ese pequeño lujo que le sacaba una sonrisa

-Gracias por hacerme compañía-le comenté a un alto pelinegro de ojos turquesas. Su brazo ceñía con calidez en mi cintura mientras sus labios besaban mi sien

-No tienes que agradecerme nada Haru...-responde el alto pelinegro con una sonrisita pequeña extendiendose por sus labios-¿Algún día viviremos juntos, cuando entremos a estudiar?-me pregunta ese alto chico con el que llevaba saliendo casi 2 años; lo conocí cuando cumplí 17 años y era un chico de primer año de universidad que me hacía tutorías en Matemáticas e Inglés. Se ofreció ayudarme si lo ayudaba en Artes y nos volvímos amigos.

-No sé...aún no tengo decidido que hacer con mi vida...sé que me queda tiempo, pero no quiero cometer ningún error...

-La vida está para cometer errores, uno tras otro...de los errores se aprende...-me responde el hombre cuyo brazo se aferra más a mi cintura y me roba un beso en la mejilla-Pero hay cosas de las que podemos estar seguros...como de lo mucho que te quiero...-sus manos se acercan a mi rostro y lo toma entre estas, cuyo calor se transmitía a mi cara, a la par de que sus labios hacía suave contacto con los míos

 

...SOUSUKE...  

-...Haru...-siento la mano del pelicastaño toquetear mi hombro, devolviendomé a la realidad-...¿sucede algo?

-Ehm...no, no es nada...-respondí en voz baja, mientras instintivamente me aferraba más a su brazo

Siempe creí que los errores se muestran frente a tus ojos, para sacartelos en cara y recordarte dolores a largo plazo. Yo quería olvidar lo que sufrí por su culpa: Las mentiras, los engaños, sus celos enfermizos y sus retorcidas formas de manipularme, para que él quedara como la víctima...Es frustrante...

-¡Ya llegamos!-escucho exclamar a Kisumi, mostrándonos un edificio pintado de marrón glacé. Se me antojaba bastante cálido, por el fuerte aroma a masa horneada y a especias.

-¡Se ve genial!-comenta Nagisa, con un silbido de asombro

-Lo mejor será cuando entremos-repuso el pelirrosado, quién llevó a Nagisa del brazo para entrar al lugar. Makoto me regaló una sonrisa y nos encaminamos a la entrada del lugar

El café estaba con algunas luces bajas y altas; había una barra que estaba llenísima. Algunas personas estaban en unas mesas dispersas por el lugar. Kisumi nos guió a una mesa frente a una ventana amplia y nos sentamos. Yo quedo a un lado de Makoto, mientras que mi amigo rubio queda al lado del ojipúrpura. Al rato, se aparece un chico de cabellos azules levemente desarreglados, camisa blanca y pantalón de vestir negro. Sus ojos eran purpúreos y usaba unas gafas de marco rojo

-Hola y bienvenidos al café "Shinto". Mi nombre es Rei y yo los atenderé...¿Ya están listos para empezar a pedir?

Mi amigo Nagisa quedó completamente embelesado viendo a ese alto chico de cabello azulado y sonreí ante su tierna maravilla

-Para mí y para Mako-chan traenos un café negro...¿Y que van a pedir ustedes?-pregunta Kisumi mientras apoya sus codos en la mesa

-Té verde-respondí rápidamente; nunca he sido muy adepto a la cafeína, pero no podía vivir sin mi taza diaria de té-y un pastel de limón...

-¡Yo quiero leche de fresas!-exclama mi ojirrosado compañero de casa-...y un pastel de fresa, por favor...-agrega mi rubio amigo con una sonrisa coqueta, gesto que no pasa desapercibido para el mesero

-E-en seguida tr-traigo sus órde-denes...-el chico se vió azorado ante la actitud de Nagisa y se retiró trastabillando un poco hacia la cocina

-¿Fuí muy directo?-murmura mi amigo mientras movía sus pies bajo la mesa

-Nagisa, te faltó decir "¿Cómo te pago, con una cita o una mamada?"-resopla el pelirrosado en ademán socarrón. Makoto casi se atraganta con el pedazo de pan que se metió a la boca y empieza a toser dramáticamente . Yo me sonrojé hasta las orejas, mientras el rubio se sonrojaba y el pelirrosado carcajeaba a risotadas

-¡NO DIGAS ESAS COSAS!-el pobre Makoto estaba exasperado y no pude evitar que una sonrisa se formara en mis labios, para disimular el fuerte sonrojo que me azoraba. En verdad que Makoto era lindo a su manera; gentíl y alegre, aunque también torpe

...Me gustaba...Y mucho...

-¿Haru?-el pelicastaño desliza una mano por mi mejilla y me hace mirarlo-¿te sienter bien?-su mano se sentía cálida bajo mi piel y me dió un agradable escalofrío en la eapalda. Sonreí y mis ojos adquirieron un brillo que pensé no volver a experimentar

-Sí...estoy bien...-Makoto asintió con la cabeza, mientras apoyaba sus brazos en la mesa y me miraba; me perdí un momento en sus ojos verde bosque que se me hacían tan bonitos y claros, que parecían muy transparentre-...me gustan tus ojos...-suspiré mientras una de mis manos se deslizaba por mi pelo 

-¿Eh?-el ojiverde volteó rápidamente a verme, para percatarse de que escuchó algo inaudible para cualquiera

-Nada-respondí levemente apenado

-Aquí tienen: 2 cafés negros, té verde, leche de fresas y 2 rebanadas de pastel...Ojalá les guste...-dijo el mesero, mientras dejaba las bandejas con los pedidos

-¡Muchas gracias!-exclamó Nagisa, a la par de que le pasaba un papelito al mesero-Es mi número, para que nos pongamos en contacto

Al mesero se le queda la cara hecha un poema, se sonroja hasta la punta de su cabeza y se retira, murmurando un "gracias" quedito. El amigo de Makoto le murmura a Nagisa que fue muy intrépido eso que hizo, puesto que casi nadie tiene el valor para pedir una cita de esa forma

-Si te gusta alguien, solamente tienes que decirlo-respondío el rubio orgulloso, mientras jugaba con la pajita de su vaso de leche

Esa frase hizo click en mi cabeza, removió parte de mis entrañas y me hizo dudar un poco...Tal vez...ponga en práctica su consejo. Le dí un sorbo a mi té, mientras seguía dándole vueltas a esa frase

-Oigan, después podríamos ir a un bar cercano-propuso el pelirrosado cuando terminó de darle un sorbo a su bebida-La noche aún es joven y el mesero va a terminar su turno, así aprovechamos de que Nagi-chan conozca a su futuro novio

-¡DEJA DE MOLESTARME!-chilla el pequeño rubio, mientras Makoto y yo terminamos riendo fuertemente

*Nota de autora*

¡Hola!

Adivinen que...mañana tengo dia libre, así que puedo publicar 2 caps seguidos :D

En cuanto al ex de Haru, finalmente quedó revelado que el HDP de Sousuke será quien cause dolores de cabeza en esta historia...DIOSCOMOLOODIO >:(

Espero les guste este cap y que esperen el próximo porque habrá beso-beso <3

Pingu-chan dice Bye