Cadenas Diamante

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La noche hizo acto de presencia, iluminando el área boscosa con la luz de la luna, decorando el cielo con hermosas constelaciones; pero ninguno de los 4 presentes les prestaba atención a la hermosa noche de fin de mes.

Kushina invocó su poder, creando cadenas doradas, las cadenas hechas de oro puro se abalanzaron al lobo gris. Pero el ataque fué desviado por el legendario zorro de 9 colas.

- ve, Akihiko.- Yuu ordenó.

El lobo acató la orden y se dispuso a ir hacia la pelirroja.

A pesar de estar enfrentando a la legendaria "Habanero Sangriento", esta poseía una debilidad; era una humana, por lo que su cuerpo es su debilidad.

- Ahora recibes ordenes de tus lacayos, que bajo a caído Alteza.- habló con ironía y burla la pelirroja, mientras atacaba a ambos canes.

- Yuu no es mi lacayo, y tampoco recibo ordenes, él solo me ayuda a detener una psicópata.- mientras hablaba, Kushina molesta lanzó una daga dorada, la cual pasó rozando en la mejía de Akihiko.

- Concentrate Akihiko, ella solo quiere distraerte.- aconsejó el zorro.

Los canes evitaban las gruesas cadenas con dagas, saltaban de un lado a otro, Akihiko se acercaba por el lado de atras; Yuu usaba sus colas para enviar ráfagas de poder como pequeñas cuchillas, las cuales eran desviadas por la defensa de oro puro que poseía la Uzumaki.

- ¿Por qué hace esto Uzumaki-San?, ¿hicimos algo?, ya le explicamos que todo fue un mal entendido.- Akihiko trataba de voltear la situación, utilizando el mismo truco que Kushina, distraerla.

Pero lejos de distraerse, la mujer enfureció más.

- Quiero impartir justicia, a todos por igual.- con voz impregnada de deseo e inocencia, Kushina exclamó.- Quiero ayudar a todas las personas a hacer justicia, a los pobres que tienen que mendigar a los ricos, ¡quiero eleminar eso!, ¡todos somos iguales, y como personas debemos convivir en paz, sin guerra, sin muerte, un equilibrio!

La pequeña Karin se contagió de emoción, el sueño de su hermana mayor sonaba hermoso.

- ¡Y yo te ayudaré!- prometió la menor.

Su hermana, su pequeña hermana siempre la siguió.

- no te preocupes, si Minato te falla, yo misma me encargaré de golpearlo.- prometió la pelirrojo de lentes, alzando su puño en señal de batalla.

- Naruto crecerá con nosotras, Minato no falló, lo cual, eso hace que lo admire.- la menor apoyaba a la mayor, que irónico.

Todo se derrumbó cuando vió el cuerpo inerte de su hermana, con huesos saliendo de su aplastada piel, sus ojos desorbitados, piel pálida debido a la pérdida de sangre.

- un mal entendido, un mal entendido dices.- un aura roja envolvió el cuerpo de la mujer, su cabello largo se alzó al cielo, mientras sus ojos inyectados en sangre veía ahora al lobo tras de ella.

- Retirada.- fué lo único que atinó a decir el zorro.

- yo siempre te cuidaré hermana.

Un grito enfurecido se escuchó en todo el lugar, congelando la sangre de Hiroki, sorprendiendo a Akihiko y enojando a Yuu.

El aura roja envolvió el cuerpo de la mujer y pasando a sus cadenas, las cuales poco a poco pasaron a ser transparentes y brillosas.

Los 3 hombres abrieron sus ojos debido a la sorpresa e incredulidad.

Las cadenas antes hechas de oro puro, ahora de diamante, ¡eran las legendarias cadenas de diamantes!

Ambos canes bajaron sus orejas, des-motivados, si no habían podido acercarse con cadenas de plata ni de oro, mucho menos con diamantes.

Kushina atacaba, la ira corría por sus venas como lava caliente, mientras golpeaba a Yuu o Akihiko, ambos cuadrúpedos estaba lastimados, adoloridos, cansados.

Parecía todo perdido.

Cuando una luz proveniente del pecho del lobo, brillando más que el sol, dejando entre ver, a 8 figuras.

- ¡ataquen!- fué la orden de Masamune, mientras él junto a todo el equipo hatsukoi se dispersan.

¡los chicos estaban tratando de distraer a la mujer!

Yuu no perdió tiempo y aportó con sus colas, más distracción, Akihiko se hacercó, (como el depredador que era), sigilosamente a la mujer, se avalanzó y la mordió, mordidas en el cuello, en los brazos, en donde podía.

La mujer gritaba e intentaba golpearlo con puños y cadenas, pero esta estan ocupadas por los otros chicos.

- tu eres fuerte hermana, podrás contra todos.- animaba Karin cuando le tocó que pelear por primera vez en la guardia real.

Recordar esas palabras enfurecía a la mujer, en un arrebato, lanzó una oleada de poder, lanzando a todos, la pelea se había extendido más de lo planeado, la Alborada se acercaba.

- voy a matarnos a todos, todos morirán aunque yo caiga.- prometió la pelirroja mientras una concentración de poder ardiente en el lugar, ¡pensaba explotar el lugar!

- lo siento chicos, esta vez no saldremos de esta.- Yokozawa lamentaba en voz alta, todos estaban frustrados.

- hay una forma.

Yuu se ganó la atención de todos en el lugar.

>> Denme su poder elemental, y yo me encargaré.

- pe-pero, si usas el poder elemental de nosotros, ¡corres riego de morir!

Chiaki se negaba a que su amigo sacrificara su vida.

Si uno decía no por la vida del otro, todos apoyarían.

Un gran dilema.

MI SALVACIÓNDonde viven las historias. Descúbrelo ahora