Espejito, espejito;
¿Quién es la más linda?
Todos sabemos cómo responde el espejo en el cuento.
Pero, ¿no eres tú tu propio reflejo?
¿No eres tú tu propio espejo?
¿No sabes tú la respuesta?
¿Qué pasaría si tuviéramos que preguntar y sí preguntáramos de otra forma?
Espejito, espejito
¿Yo soy la más hermosa?
Bueno, quizá de esa forma aún sea difícil de cambiar los resultados;
Ya que aun estás buscando por aprobación.
¿Y qué tal si cambiamos nuevamente la pregunta?
Espejito, espejito.
¿Como puedo ser tan hermosa?
Quizá ahí haya una respuesta a tu pregunta de la forma en la que quieres... pero,
¿Y si mejor no preguntamos y afirmamos?
¿Que sucedería?
Espejito, espejito
No hay nadie más linda,
Yo soy hermosa,
Yo soy única.
De esta forma la respuesta cambiará con el tiempo.
Recibirás la respuesta,
La aprobación que querías,
De ti misma.
El espejo es solamente eso,
Es un reflejo de lo que tú quieres ver.
El espejo es el reflejo de lo que quieres oír.
El espejo no cambiará cómo te ves.
Tu cambias la manera que te ves en el espejo.
Tu cambias la manera como el espejo te ve a ti.
