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—Como siempre espléndida.—escuché a mis espaldas al director Jung, me giré para sonreírle y darle una reverencia.

—Muchas gracias señor, que me lo diga usted me hace sentir segura de mi trabajo.—dije totalmente sincera.

—Nunca dudes, tienes mucha capacidad para hacer y llegar a grandes cosas. Te lo digo porque lo siento y lo veo.—me dió una mirada rápida y aún sonreía con esa sonrisa brillante contagiandome también. Arreglé con mis dedos mi mechón de pelo detrás la oreja, él siguió mi acción interesado. Lo ví remojar sus labios antes de hablar de nuevo.— Me gustaría que me pases tus diapositivas, por mensaje. Ya tienes mi número.

La verdad era que ya lo tenía hasta agendado en mi teléfono desde que le mandé el mensaje, desde ahí él también conversó conmigo aún siguiendo el ámbito laboral no es como si hablamos de otras cosas que no vienen al caso.

—Seguro, yo se lo enviaré esta tarde.—asentí con una sonrisa. Detrás alcancé a ver a Taehyung saliendo de este lugar no sin antes mirar a mi dirección y es que le había aceptado el almuerzo, quizás esperaría por mí.— O en la hora que quiera, solamente hágamelo saber.

—No te preocupes, contestaré de todos modos.

—Bien, si me disculpa debo irme. Es mi horario de descanso...—dije con un poco de pena, asintió y levantó su mano para estrecharla con la mía. Su mano delicada cubrió la mía de manera amable y él nunca dejó de mirarme a la cara mientras, me ponía nerviosa que sus ojos marrones estén siempre estudiando cada parte de los míos.

—Entiendo señorita Jung.—movió su mano de arriba abajo.— Nos estamos viendo en la próxima...—aún no soltaba mi mano y su mirada no se iba de mí.

—S-sí.

Soltó mi mano de manera lento y reverencio un poco, también lo hice. Lo ví alejarse para salir mientras yo también iba atrás suyo a una corta distancia, no miró a nadie más y salió por la puerta, cuando salí yo escuché a Kim hablarme. Este estaba apoyado en la pared lado la puerta, frené mi caminar y me hice a un lado para que los demás salieran también, miró al frente y luego se centró en mí.

—Pensé que iban a retenerte ahí y no poder invitarte a almorzar ahora.—dijo con una pequeña sonrisa.

—No, no, solamente me felicitaron por mi reunión. Estoy lista para que almorcemos ¿vamos?—pregunté animada robándole sonrisas a Taehyung. Sonrisas preciosas que solo él tenía.

Cuando bajamos por el ascensor no pudimos hablar mucho ya que dentro iban más empleados bajando también por lo que con Taehyung solamente nos tirábamos miraditas con leves sonrisas silenciosas por el momento de pura tensión dentro del ascensor, parecía un velorio masomenos.

Dejamos que salieran todos para después seguir nosotros, cuando estuvieron lejos nos reímos de ellos.

—Me sentí en un velorio.—reí.

—Sus caras ayudaban mucho.

Pasar el rato con Taehyung era realmente agradable, era gracioso y eso me daba la confianza en serlo con él también, hablaba mucho, me escuchaba y si podía me aconsejaba y dejaba que lo hiciera también, valoro mucho eso de una persona y Kim.. se está volviendo alguien especial desde que comenzamos a tener más confianza entre nosotros.

Habíamos ordenado bibimbap porque lo ameritaba. Con los palillos en mano, ambos estábamos disfrutando de este arroz con todos sus condimentos encima.

Llevé una cantidad a mi boca y me fue inevitable no dejar salir un gemido de satisfacción por lo rico que se encontraba, Taehyung hizo lo mismo y rió divertido.— Es un gran lugar, desde que entramos con el servicio que nos dieron más esto.—señalé el bowl.— Es un win importante.

Secretario Kim ✓ KTH.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora