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Tomé lo último de mi botella de agua al estar totalmente sedienta desde que llegué, mis labios estaban secos y era lo peor que me podía pasar porque es una sensación molesta. Tuve que bajar y comprarme un agua afuera porque aquí dentro solamente habían despensas y yo quería tener mi propia agua y no traer en vasitos cada tanto.

Demoré unos quince minutos en hacer todo.

Estaba sentada frente al computador viendo algo tratando de distraerme aunque no estaba del todo desocupada aún. El teléfono fijo sonó a mi lado izquierdo de mi escritorio y lleve mi mano hasta él para atender.—¿Si?— dije dejando el teléfono pegado a mi hombro y oreja.— Enseguida voy.— colgué.

Era mi jefe pidiéndome que fuera a la oficina que tenía una pequeña reunión cosa que no sabía.

Me levanté con la carpeta llena de documentos y caminé solo cinco pasos para entrar después de tocar la puerta y escuchar su órden a pasar. Odiaba su puerta porque era algo pesada, en el intento de no parecer una idiota me centré en ello por lo que no miré de entrada hacia el interior de la oficina.

—Aquí estoy.— dije girando para acercarme pero me quedé sorprendida al ver a su acompañante. Era él, el director Jung Hoseok estaba con mi jefe ahora mismo.— Buenos días.— rápidamente me incliné como saludo y respeto.

—Buenos días señorita Jung.— saludó.

Me acerqué más a ellos mientras mi jefe esperaba por las hojas que debía sacar, mientras hablábamos sentía al director a mi costado un poco alejado pero no en demasia. Estaba totalmente apoyado en la silla giratoria mientras tenía su cuerpo a dirección a mí, sentía su mirada claro que sí.

—Bien. Creo que estos tres papeles son suficientes para el papeleo.— habló Park.

—Déjame felicitarte por la secretaria que tienes Park, me dejó impresionado ayer con su manera de responder mis preguntas y saber llevar la situación. Hoy en día hay pocos que se ponen firmes con sus puestos de trabajos.— me halago y le sonreí levemente en respuesta.

—Haelyn.— me señaló educadamente.—Ya tiene algunos años trabajando aquí, y sí, es una excelente emprendedora.— sonrió orgulloso.

—Que triste que hayamos hecho este trato tarde entonces, me hubiera gustado estar en sus principios señorita Jung.— ¿Por qué sentía que me iba a ruborizar? Dios, no.

Pero alto, ¿Estar antes? Eso quiere decir que...— Haelyn, el director Jung aceptó el trato de trabajar liados al menos una temporada.— dijo feliz.— Ahora mismo estamos haciendo el contrato, gracias por los papeles.

—Eso es muy bueno.— animé.— Ya verá señor Jung que esta empresa tiene mucho potencial y que no fallará en nada.— dije con orgullo pues, sabía como éramos. El me sonrió con esa gran sonrisa siendo muy atractiva.

—Me puedo imaginar.— sentía que estábamos teniendo mucho contacto visual, él no tenía intenciones de dejar mis ojos, además que cuando habló mi jefe sus ojos seguían en mí inclusive si yo no lo miraba a él.

En esos momentos lo único que pensé fue sí el día de hoy estaba linda.

¿Que?

—Haelyn.— miré a mi jefe.— ¿Sabes si mi hermano ya mandó las postales a Taehyung para que te las pase y me las envíes a mí?

—Mmm no, no me dijo nada sobre eso aún. Le preguntaré.— confirmé. Asintió ante lo que dije y me dejó irme tranquila antes miré al señor para despedirme con una reverencia por ahora.

—Con permiso.

Hizo un asentimiento de cabeza leve. Reuní todo dentro la carpeta y me di la vuelta para salir sintiendo así, que la mirada del director estuvo en mí hasta que llegué a la puerta. Al salir dejé salir aire junto al suspiro, caminé de nuevo a mi puesto para chequear mi email y ver sí Taehyung había mandado las postales ya.

Secretario Kim ✓ KTH.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora