Venus
Decidí salir de la habitación al comprender que su objetivo era que me enfadará o me pusiera celosa de su amistad con Abigail. Cierto es que su acercamiento no me gustaba mucho, pero por el simple motivo de que siempre que hablaban era sobre mi vida privada.
Porque tendría que sentir celos de ellos?
Los celos están relacionados con la inseguridad y falta de confianza en uno mismo provocando temor de perder a alguien, de ser rechazados o incluso remplazados, dando lugar a unos pensamientos irracionales y descabellados controlando así a las personas.
Todas las personas, en algún momento de nuestra vida hemos sentido celos. Algo normal, ya que se trata de un sentimiento inevitable del ser humano. Pero este no era el caso, la amistad entre ellos dos no me causaba ninguna inseguridad ni mucho menos miedo de perder a mi guardaespaldas.
Al entrar a la sala de estar noté como Abigail junto con Luke y Mickael se callaban de inmediato. Fruncí el ceño confusa ante tal acto. Estaba claro que hablaban de alguna cosa que yo no podía escuchar.
Observaba a cada uno de ellos buscando cualquier tipo de pista, hasta que mi mente se iluminó averiguando porque tanto secretismo. De reojo vi como Alec entraba deteniéndose al presenciar el inmenso silencio que se había instalado. Silencio el cual rompí clavando mi mirada en Abigail.
—Sea lo que sea que estas planeando ya puedes anularlo
—A que te refieres?—preguntó Mickael soltando una risa nerviosa. Se le daba fatal mentir.
—Sabéis muy bien a que me refiero—espeté sin apartar la vista de Abigail—No quiero ninguna fiesta ni nada por el estilo
—Porque no? Siempre lo celebramos todos juntos—se justificó Abigail sin intentar ocultar lo que ya era obvio
—No hay nada que celebrar—aclaré seca—Además, deberías replantarte el "todos juntos"—espeté haciendo comillas con mis dedos mientras repetía sus palabras refiriéndome a la ausencia de Eros. Con la mirada de todos puesta en mi, me encaminé lo mas lejos posible de esa sala. Me negaba a pasar la noche entera ahí viendo películas "todos juntos".
Una vez en la cocina me dirigí hacia la ventana que daba a las escaleras de emergencia. Me senté en ella sabiendo que aún así me congelaría por el frío de la noche.
Era una noche oscura y silenciosa, ni siquiera se escuchaba un solo coche o gato abandonado intentando buscar refugio. Las nubes cubrían el cielo impidiendo que tanto la luna como las estrellas brillarán.
Estos últimos meses, la noche ha sido mi fiel amiga durante mis tormentas. Esperando en solitario la llegada de la luz proveniente del sol indicando un nuevo día.
Una ráfaga de viento choca contra todo mi ser despeinándome por completo. En un reflejo de protegerme del frío pongo mis manos en el bolsillo de mi sudadera, notando algo en el.
La foto de la cabina.
No me acordaba de ella, ni siquiera me había parado a prestarle atención en el centro comercial ya que de un impulso inconsciente la agarré rápidamente antes de que Alec llegará a mi lado.
Una enorme confusión crece en mi al observar la foto, sobre todo la última dado que salimos sonriendo y muy ridículos.
Todo mi ser está confundido al punto de no poder descifrar lo que siento. Esa felicidad que tanto sentía hace muchos meses me es ahora desconocida. No puedo evitar pensar que cada sensación verdadera y bondadosa sea más que una ilusión que dejará de existir en cuanto la oscuridad de la noche aparezca. Esta fotografía podría ser una señal de felicidad, siendo así una cura de mis dolores pero la desconfianza y tristeza acaba siempre desbordando de mi alma.
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Adicción
Teen FictionMi vida no volvió a ser la misma desde que intenté procesar todo lo que había pasado. Solo sentía un gran nudo dentro de mi. Me enfoqué en mi dolor, para alimentar a mis propios demonios. Era mi castigo por ser la culpable de todo. Porque así er...