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POV Narrador

Esto nos está llevando más de lo que pensaba. - miró la hora y ya iban a ser la 1:30 AM.

No, sí... ¡Wow! - Shouta murmuró y Hizashi se giró hacia él.

"Ten cuidado."

"¡Hey! Mira la puerta."

"Pide ayuda."

El menor miró a su alrededor. Alucinaciones se comenzaron a formar.

Merda. - susurró no dejando de ver a Stain al otro lado del salón. - Ven conmigo. - lo tomó de los hombros. - Nos van a disculpar un momento. - se lo llevó por uno de los pasillos. Shouta se tapaba las orejas y miraba el suelo.

Aquí. - se metieron a un cuarto y cerró la puerta. - Debí contar las horas. - sacó del bolsillo ajeno las pastillas.

Hay ojos en las paredes. - miró detras del rubio y se sentó en la cama.

Ey, ey. - chasqueó sus dedos para llamar su atención. - Mira. - volvió a chasquear, pero esta vez hacia abajo donde tenía las pastillas. Lo siguió intentando ignorar su alrededor. - Toma dos. - se las puso en la mano.

Bichos. - las miró.

No, Shou, no son bichos. - habló con voz suave y tranquila para no alterarlo más. - Ponlas aquí. - señaló su lengua. - Y todo se irá.

¿Se van a ir..? - levantó su vista y luego a esas "caras flotantes" detrás de él. Asintió y observó los medicamentos antes de tomarlos. - Adiós~ - se echó en la cama. Hizashi solo esperó a que se le pasara. - Estoy bien. - susurró y se volvió a sentar.

Perdón, debí percatarme de la hora. - se acercó a él y lo observó. Estaba algo mareado, se le notaba en la mirada.

No te preocupes. Yo tampoco me percaté. - le sonrió para que no se preocupara tanto.

Así que aquí estaban. - la puerta se abrió dejando ver la figura de un hombre. Al girarse vieron a Stain. - Pensaba que se habían ido. - la cerró con seguro.

Mitsuki nos mataría. - murmuró el rubio.

Es cierto, esa mujer es irascible. - dio un par de pasos hacia ellos. - ¿Tu chico está bien? - miró a Shouta.

Eso a ti no te incumbe. - dijo serio.

Ahora el irascible eres tú, Yamada. - rió. - Aunque lo entiendo, ustedes odian a los traidores. Por eso vinieron. - se fue a un pequeño bar que había al lado de la puerta y se sirvió un trago. - Espero que le permitas a éste viejo un último trago. - le dio un sorbo y los otros dos se quedaron callados. - Por un momento pensé que me iban a interrogar, pero parece que no les interesa lo que tengo que decir. - le prestaron atención.

De todas formas iremos tras Toga, Shigaraki y Chisaki. Si hablas o no, no nos interesa, porque nos enteraremos luego. - le respondió Hizashi.

Eso también es verdad. - se terminó la bebida. - Hay alguien más controlando todo esto. - dejó el vaso en la mesa. - Me ofreció mucho poder y yo acepté. Debíamos atacarlos uno por uno, pero con toda la seguridad que les otorgas te has vuelto un obstáculo, Yamada.

Entonces no me equivocaba.

Me había hecho la idea. - rió levemente.

Lycoris Radiata (Erasermic)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora