Erase una vez... - Os Tododeku

Fundashi

[Narrador: Omnisciente]

Tiró su mochila en un rincón de la habitación totalmente apurado, encendió el ordenador y para no perder la paciencia mientras el pobre aparato se encendia, de manera lenta gracias a sus cuantos años de uso, el chico peliverde salió de su cuarto en busca de algo que comer y después de estar cinco minutos en la cocina, volvió subiendo las escaleras de dos en dos con un bote lleno de cookies y un plato de takoyakis.

Sus dedos se movieron rápidos en el teclado buscando la web que tendría que haber marcado en su barra de favoritos, pero que siempre se olvidaba de hacerlo.

Por fin habían sacado el nuevo episodio de su yaoi favorito y no podía contener su emoción por verlo. Parecía un pequeño niño feliz por recibir una chuche.

- Venga, venga - habló a la nada esperando que el episodio se cargara, sus ojos se desviaron a la barra de comentarios y leyó como la gente parecía estar tan entusiasmada como él.

Al fin el episodio se cargó y empezó a emitirse robando toda su atención, cada dos minutos se metía un cookie en la boca o un takoyaki. A veces se olvidaba de que los dos juntos se supone no deberían de saber bien.

La historia le parecía sumamente interesante y un poco extraña, o sea no siempre veías a un romance entre dos personitas del tamaño de un pulgar y mucho menos si una de ellas era mitad hormiga, pero tenía que admitir que la historia le había pillado.

Unos 25 minutos después tenía una mueca de desconcierto en la cara, como si no se creyera que le harían esperar una semana más para saber qué es lo que pasaba en el próximo episodio.

Para no deprimirse mucho por ello, empezó a leer los miles de comentarios que habían y él mismo hizo algunos. Mientras leía, uno le llamó especial atención.

"Parece muy interesante, pero ns donde puedo encontrar la primera temporada" leyó y sintió pena por la pobre persona que había escrito eso.

Se acordó de las noche que se la pasó buscando una manera de ver los episodios de la primera temporada con una imagen decente y en japonés, porque por increíble que pareciera habían en todos los idiomas menos el original. Estaba seguro de que había aprendido al menos unas cuantas palabras en italiano o en portugués.

Como buen chico que era decidió ayudar a la pobre persona que no tenía ni idea de qué hacer. Envió una solicitud de amistad con el mensaje: "Puedo ayudarte a encontrar los episodios de la primera temporada si quieres" y no pasaron ni dos minutos cuando su solicitud fue aceptada.

- "Gracias por ayudarme" - escribió la persona haciendo que el peliverde sonriera complacido de poder ayudar - "Por donde empiezo?"

- "Es un poco difícil encontrarlos, pero los puedo buscar para tí"

- "No quieres ayuda?"

- "No hace falta, seguro no tardo mucho" - respondió el pecoso pensando en cómo hacer lo que decía - "Tengo episodios guardados"

- "Ah, ok"

El pequeño peliverde entonces fue a su carpeta de Animes (>///<), donde tenía los episodios de muchos animes que le gustaban y buscó el primer episodio de la serie. Después de cinco minutos al fin lo encontró y se encargó de enviarlo a la persona desconocida.

- "Aqui tienes, es el episodio 1"

- "Gracias" - recibió él sintiéndose contento por esa persona, entonces vió que estaba escribiendo algo más - "Puedes esperar a q lo vea?"

- "Claro" - contestó rápido el oji esmeralda - "Despues comentamos, te parece bien?"

- "Bien"

Otros 25 minutos pasaron, en los cuales el pequeño pecoso se fue a dejar el bote de cookies y a lavar el plato que tenía los takoyakis. Aprovechó también para darse una ducha rápida y cuando volvió a sentarse en la silla delante del ordenador vió que tenía un mensaje nuevo.