Fiesta con la ADA

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Advertencias: Random, ya hice karaoke con la decadencia, toca fiesta con la ADA.

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~•~

—Dazai-san, ya baje de ahí— pidió el de corte asimétrico.

—No quiero— estaba a punto de saltar por la ventana—. Ya hice mi parte, voy a morir.

—Pensé que lo haríamos juntos— tu voz lo detuvo, y se obligó a si mismo a retroceder.

—¿De verdad?— sus ojos se iluminaron rápidamente.

—No, ayuda con las bebidas— te diste la vuelta para seguir acomodando unas cosas.

—¿Qué se celebra?— pregunto una pequeña de cabellos azulados.

—Es una fiesta sorpresa, por el cumpleaños del presidente— acomodaste el pastel decorado con fresas.

—Que mala eres, ____-chan— el castaño hizo un puchero—, Pero te ayudaré, porque el gran Osamu Dazai es bondadoso.

Los dos más grandes soltaron un suspiro que lo hizo temblar. Estaba indignado, lo suficiente para no querer ayudar.

—Dazai, maldito holgazán— Kunikida se sumó a la plática—. No ayudas, ni entregas tu reporte.

—Me está gritando, haz algo, ____-chan— sollozo falsamente—. Me gustaría ayudar, pero lo hacen tan bien solos...

—De acuerdo, si quieres ayudarnos, distrae al presidente— sacaste los cañones de confetis para dejarlos sobre la mesa.

—Tiene que ser rápido, ya está cerca— agregó la doctora que comenzó a destapar el vino.

—Bueno, en realidad no creo ser tan hábil para eso— sonrió nervioso, pero extrañamente Kyoka lo arrastró con ella.

—¿Alguien vió los dulces?— todos negaron.

—Seguramente siguen en la taquilla de Kunikida-san— el tigre y tú fueron a buscarlos, al abrir la puerta vieron algo un tanto desagradable.

—Hola— el detective número uno trató de tapar las envolturas detrás de su cuerpo—. ¿Por qué revisan el casillero de Kunikida?.

—¿Te los comiste todos?— preguntaste frunciendo el ceño.

—Me quedaba este— avergonzado estiró un caramelo de anís, que claramente dejó hasta el final porque no era su favorito.

—Eran para el presidente, ahora solo queda el pastel— exclamó Atsushi mientras tú cerrabas la puerta de metal.

—Saldré a ayudar hasta que llegue el presidente— Ranpo se carcajeo desde el pequeño cubículo.

—No creo que le importe mucho— regresaron encontrando un desastre, Yosano trataba de cortar a Tanizaki, Kenji había devorado el pastel, y casi toda la comida.

—¿Doctora Yosano?— Atsushi notó como sacaba su machete.

—Te astillaste el dedo, te urge mi tratamiento— sonrió sádicamente, el joven de cabellos naranjas casi colapsa del miedo.

—Kenji, hay una vaca cerca— trataste de despertarlo.

—Todo es un desastre— Kunikida volvía con algunos adornos—. ¡Oigan, este era un día especial!.

Su voz detuvo a todos—. Kunikida-san...

—El presidente ya es un hombre mayor, sus días son preciados, sin él, la organización no será lo mismo, por eso deberíamos hacerle saber lo importante que es para nosotros.

—¡Sorpresa!— gritó Dazai desde la puerta, quitó las manos de los ojos del mayor, mientras Kyoka lo empujaba.

—¿Qué es esto?— estaba un poco perturbado.

—Tratamos de hacerle una fiesta— hablaste en voz baja.

—Que humillante— Ranpo salió de su escondite al escuchar la voz del presidente.

—¡Ya estoy aquí!— la voz de Naomi sonó desde el pasillo—. ¡Que empiece la fiesta!.

Empujó a los estorbos de la puerta, pues Haruno llevaba una caja pesada. Todos mantenían sus miradas sobre ambas—. Hablamos con Dazai-san, y tuvo la idea de hacer un regalo muy especial para usted.

La menor de los Tanizaki sonrió antes de abrirla—. ¡Ta-da!.

Un gato. Salto un gato gris con ojos color ámbar, y se estiró como si estuviera en su casa. La mirada severa del mayor tembló para después sacar una sardina de su traje.

—Gracias— fué lo único que respondió, después ustedes dejaron de existir, pues cargo al felino y avanzó hasta su oficina donde le daría más sardinas, y hablaría con él.

—Que raro fué todo eso— comentó Dazai para abrir una cerveza—. Al menos le gustó.

—Que deprimente— sonreiste para tomar la mano libre del castaño—. Gracias por ayudarnos.

—Es lo menos que podía hacer— subió sus manos entrelazadas para dejar un peso sobre la tuya—. Me gustaría suicidarme contigo.

—Ya vas a empezar— bufaste por su comentario.

—Ya vas a empezar— bufaste por su comentario

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Gracias por leer <3

Dazai, dejemos este cochino mundo juntooooooos

𝐁𝐮𝐧𝐠𝐨𝐮 𝐒𝐭𝐫𝐚𝐲 𝐃𝐨𝐠𝐬 𝐓𝐡𝐞 𝐭𝐲𝐩𝐞 𝐨𝐟Donde viven las historias. Descúbrelo ahora