«Eres un buen poli, papá. Te pones esa placa y llevas una pistola porque, si no, lo haría alguien que no debería. Cuando yo me puse esta máscara, sólo lo hice... porque me liberaba de responsabilidad. Pensé que era especial. Pero no lo soy, si lo fu...
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❝Y No soy suficiente...❞-Gwen.
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ES MI CULPA
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Gwen corrió detrás de ese autobús, y se balanceo con mas fuerza, su cuerpo se deslizaba, y sus músculos ardían por le esfuerzo, los gritos de los transeúntes le hacían casi perder la concentración, mientras muchos la señalaban, y gritaban. Pero debía concentrarse.
Callo en el techo del autobús fuera de curso, y suspiro, finalmente le alcanzo. Miro a la calle llena de autos, era el peor lugar para que un autobús lleno de gente se saliera de control, pero debía pararlo.
Corrió a la punta de este, y al ver una intercepción de Y, con distintos semáforos, una idea llego a su cabeza. Salto del autobús y se balanceo a los postes, allí comenzó a arrojar telarañas, y saltar de poste en poste, hasta literalmente tejer una gran muralla, gruesa, y blanca, de sus redes. Salto a la calle jadeando, y corrió hacia el autobús, rápidamente y escuchando los gritos de los civiles dentro y fuera, Gwen se paro firme, o tan firme como podría, nunca había atrapado de hacer esto, pero valí al apena el intento si salvaba vidas. Así que espero, y cerro sus ojos rogando a el cielo, y si existía un dios, que la ayudara.
El impacto resonó por la calle, e hizo que los sentíos y oídos de Gwen quedaran con un pitido sordo. Sintió sus pies arder en llamas, cuando el autobús siguió avanzando, y su hombro crujió en un feo sonido de quebrantamiento. Cuando su cuerpo choco con las redes, el autobús había bajado mas de la mitad de su velocidad, y con el corazón en la garganta, Gwen arrojo con su brazo bueno una red, y se alejo balanceándose de la escena, mientras el autobús terminaba su parada con las redes.
Las personas de fuera gravaron la escena, y miraban incrédulas la hazaña, una chica, que media menos del metro y medio, había detenido un autobús con el hombro, un autobús que iba a mas de 140 km/h. Y estaba cargado de gente; Gwen se refugio en la azotea mas cercana, mientras observaba a las personas bajar del autobús a salvo, y la llegada de las ambulancias y policías, muchos querían acercarse a las red que había hecho la chica, pero la policía no los dejaba, pero todos tenia interés en la seda, que claramente era muy resistente.
Con un aullido de dolor ahogado, Gwen presiono su hombro contra la pared mas próxima, y coloco su hombro en su lugar, gimiendo del dolor causado. Con un suspiro de alivio, y asintiendo a que todos parecían estar bien, Gwen se balanceo a casa. Necesitaba un baño, y descansar luego de lo que había hecho.
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