Chapter 2: Hey boy

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Maddy se encontraba fuera de la puerta del baño, esperando a que Lendsey terminara de usarlo para entrar.

Habían pasado dos semanas desde que los Washington se habían mudado, y las dos menores no podían evitar sentirse mejores con el vacío en el estómago que tenían.

- Hoy por la noche se celebrará una fiesta por año nuevo, ¿te gustaría venir?

- Nunca he ido a una fiesta.

La voz de la menor llegó a los oídos de la peli negra de forma amortiguada por la intervención de la puerta.

- Si vas te dejaré utilizar el vestido que te pusiste ayer.

- ¿Los tacones y el maquillaje también?

Maddy pensó en lo que había preguntado, y rió, para asentir, aún sabiendo que Lendsey no podía verla.

- Los tacones y el maquillaje también. -afirmó, repitiendo lo dicho por la morena.

- ¿Irá el famoso Nate Jacobs?

- Sí.

La puerta se abrió de golpe, dejando ver a una sonriente Lendsey.

- Entonces iré.

[...]

Lendsey se había pasado las siguientes dos horas hablando con Maddy sobre la fiesta.

A la última nombrada poco le importaba, pues disfrutaba poder hablar de forma amistosa con alguien en su casa y no sentirse fuera de lugar.

Lendsey por el otro lado disfrutaba hablar con la mayor porque por primera vez en mucho tiempo sentía que alguien le daba importancia y escuchaba lo que decía.

Nunca sus padres le habían prestado atención por la peleas constantes y tan solo le ignoraban si les decía algo.

La morena había incluso dejado de comer durante una semana para captar la atención de alguno de los dos, pero lo único que provocó eso fue llantos al anochecer y promesas rotas que nunca llegaron a salir de su mente.

- Si no habrá nadie de mi edad, ¿que voy a hacer?

- No te separarás de mi y yo te presentaré a algunas amigas.

Lendsey dejó de dar vueltas por la habitación de su hermanastra para observar por el espejo a la mayor.- ¿Y si no les caigo bien?

- Les vas a caer bien. -aseguró la peli negra.

- ¿Como estás tan segura?

- A mi no me has caído mal, así que has logrado ser respetada por la persona más difícil que conocerás.

                                                                   [...]

- ¡Lendsey!

Una alta morena corría escaleras abajo por la casa, dirigiéndose hacia Maddy, quien la esperaba en la puerta de la entrada.

La peli negra se despidió de los dos adultos al ver como la más joven acababa de bajar las escaleras.- ¡Adiós mamá, Josh!

Ambas chicas salieron de casa, y el coche de la más mayor se dejó ver.

- Iremos a por Kat y Jules.

                                                                 [...]

Las dos chicas subieron a los asientos traseros del coche, mientras que saludaban a Maddy y se presentaban a Lendsey.

- Hola, tú debes de ser Lendsey. Me llamo Jules.

TEEN IDLE | EuphoriaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora