Jueves 11 julio 2019
Un sonido me despertó a las 7 am en mi penúltimo día libre, los jueves teníamos clase en la facultad, por lo tanto, incitábamos hasta la próxima semana, ya que no era necesaria la capacitación como las que recibimos estos días en el Diario.Me levanté medio dormida para descubrir que el sonido era una llamada en mi celular.
-Hola-contesté de mala gana sin ver quien me llamaba.
-AMIGAAAAAA arriba te estoy esperando en el aeropuerto- contestó una eufórica Kate dejándome confundida.
-¿Qué? ¿Cuál aeropuerto es broma?-
-El de Barajas, Madrid tonta. Aquí te espero cerca de la entrada principal.-
-¿Es de verdad? No me estás mintiendo? - dije mientras me levantaba sin poder creerlo, a lo que ella respondió terminando la llamada para cambiarla a video.
-Hola amiga mira, mira mi alrededor es real, aquí estoy, ahora ven por mí mientras yo entretengo mi vista-
-Juro que no lo creo, me baño y salgo corriendo- literal eso hice, me bañé y salí corriendo a buscar el metro, transporte que ya me había animado a usar un par de veces la semana anterior.
Unos 30 minutos después llegué al aeropuerto para comprobar que cerca de la entrada principal estaba Kate con dos maletas y una sonrisa de oreja a oreja. Corrí como una niña a darle un fuerte abrazo.
-Amigaaaaa estás aquí, no era mentira- dije abrazándola emocionada con lágrimas en mis ojos. Era hermoso sentir la sensación de tener a alguien de casa cerca después de estas dos semanas sola, porque a pesar de que eran pocos días, fueron los más difíciles, porque a penas intentaba acostumbrarme y adaptarme a todo, aparte de eso Kate es casi como mi hermana de corazón y siempre soñamos con estar juntas en España.
-Sí amiga, aquí estoy, había estado ajustando mis vacaciones para este viaje desde que te aprobaron la beca. No te iba a dejar sola en tus primeros días y aparte de eso sabes las ganas que tenía de venir aquí- Kate trabaja en el mejor periódico de nuestro país cubriendo deportes, ella tiene mucha más experiencia que yo, ya que empezó a trabajar antes de iniciar la carrera y además de periodista es fotógrafa, una de las mejores.
-Estoy tan feliz, gracias amiga, te amo mucho- dije siendo intensa.
-Jaja sí amiga yo también, pero ya no llores, tienes que contarme todos los detalles de estos días y llevarme a ver españoles guapos- dijo agarrando sus maletas.
Luego de un corto viaje en Uber del aeropuerto a mi edificio, llegamos a mi piso.
-Amiga es hermoso, me encanta-dijo Kate mirando mi pequeño, pero acogedor piso.-Verdad que sí, tenía miedo que fuera extra pequeño, pero es muy cómodo y tiene buena vista- le comenté.
-¿Tienes hambre, sueño?- consulté.
-Hambre sí, sueño no, dormí mucho todo el vuelo, lo que sí quiero es bañarme.
-Claro, mientras te bañas busco un lugar para desayunar tenemos que aprovechar el tiempo- Kate estaría conmigo hasta el lunes, por lo que teníamos tiempo para hacer algo de turismo juntas, al fin y al cabo yo tampoco conocía mucho, esperaba que Amaia se uniera un par de días como nuestra guía.****
Fuimos a desayunar a un sitio lindo y tranquilo cerca del centro de Madrid donde hicimos algunas fotos y nos fuimos poniendo al día.-¿Qué tal tus compañeros, alguno guapo?- me preguntó pícara.
-Jaja o sea es España, aquí el 90% de la gente es linda, malditos genes-
-Si, pero me refiero en específico-
-En realidad casi todos, pero hay uno que se llama Sergio y es muy lindo, igual ya sabes típica pinta de: "Estoy muy bueno y soy completamente consciente de ello". Pero en general todos, Santiago está muy bien e igual Thiago y André, que aunque no son de aquí, son hermosos y es con los que más he compartido- le expliqué a detalle.
-¿Y alguno que te haya llamado la atención más de lo normal?, ya sabes a lo que me refiero--No, no estoy interesada ni lista para eso, tampoco es que es por lo que estoy aquí, mi sensor está apagado y creo que volverá a funcionar hasta dentro de mucho tiempo- le dije con un toque de dolor al acordarme de él.
-Amiga, no puedes quedarte ahí, yo entiendo que fue algo muy intenso, pero él no te merece, te hizo mierda y ya pasaron meses, tienes que seguir adelante y no poner escudos a tu alrededor- me retó seria.
-Ya sé y tienes razón, pero no estoy lista tú mejor que nadie sabes que no es cuestión de querer, no es algo que se pueda controlar, no es mi culpa. Espero que la distancia y el tiempo me ayuden, lo espero y deseo con todas mis fuerzas-
-Está bien, no te voy a presionar, es verdad no se controla; sin embargo, insisto en que tienes que aprovechar la oportunidad y no frenarte a nada por ese ser- dijo más calmada.
-Eso está claro, por lo mismo mañana vamos a ir a bailar con mis compañeros, bueno algunos, Amaia lo planea todo, creo que está algo loca, pero es simpática y estoy segura de que se van a llevar bien-
-Me encanta la idea, a bailar españoles se ha dicho-
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Lo Que Trajo Madrid
Ficțiune adolescențiSamantha es una joven periodista amante del deporte, tiene la oportunidad soñada de viajar a Madrid, aunque en parte también la impulsa su deseo de olvidar y sanar su dañado corazón, lo que más la motiva y pondrá en primer lugar es su carrera. Lo qu...