Though I can't see you || Finn Wolfhard Y Tu ||

CAPITULO 19

Finn se removió en su silla con incomodidad mientras yo bajaba la mirada al suelo. Estaba completamente avergonzada de que Nick nos hubiera visto.

— Hey, relájense. No es como si estuviera molesta o echándoles bronca. Sólo, los vi accidentalmente y quería sabía si había sido de una noche o algo más serio — Aclaro Nick intentando no reir al ver la cara de su hermano y la mía.

Me aclare la garganta intentando encontrar las palabras correctas. Decir que Finn era mi novio se sentiría tan raro; especialmente frente a su hermano.

— __________ es mi novia, Nick — dijo la voz ronca de Finn mientras rodeaba mis hombros con su brazo.

Mi cuerpo se tenso anticipando la reacción de Nick. Si expresión no reveló nada; nos miró por un largo momento antes de que su boca se curvara en una tenue sonrisa.

—¿Desde cuándo? — pregunto con sus labios extendiéndose en una sonrisa cómplice.

— Desde anoche — respondió Finn tensamente. Él no podía ver el rostro de su hermana y parecía aterrado de que no lo aceptará correctamente.

—¡Me parece maravilloso! — chillo Nick con una sonrisa boba en el rostro —¡Ya se habían demorado!, ¡Creía que nunca lo dirían!.

Me congelé al instante mientras articulaba — ¿Q–Qué?.

Ella sonrió y me miró como si yo fuera una completa estúpida — Era obvio que se gustaban. ¡No tienes idea de cuántas veces le pregunté a Finn que sentía por ti!.

Finn se tenso a mi lado mientras fruncía el seño con molestia — Ella no tenía que saber eso — masculló en voz baja.

—¿Que te respondía?— pregunté con curiosidad a Nick.

Ella rodó los ojos con fastidio mientras decía — Lo negaba rotundamente y mira, ahora se está tragando sus palabras.

— Nick... — dijo Finn en todo de advertencia.

— ¡Esto va a ser maravilloso!, ¡Mamá va a enloquecer de gusto cuando se entere! — chillo Nick ignorando a su hermano.

— Mamá no se va a enterar pronto — soltó Finn.

Su comentario hizo que mi corazón se hundiera dentro de mi pecho. No esperaba que su madre se enterará pronto, pero definitivamente su renuencia a contarle sobre nosotros me había dolido.

—¿Por qué no? — Inquirió Nick con el seño fruncido.

Yo mire a Finn en la espera de su respuesta y el nego con la cabeza diciendo en voz baja hacia mi — No quiero abrumarte. Apenas hace unas horas te lo pedí y Nick ya quiere que mi mamá nos coma con preguntas. Lo que menos quiero es hacerte sentir incómoda durante nuestro primer día oficial como novios.

Una sonrisa de alivio se extendió por mis labios mientras lo miraba.

— Creo que puedo soportar un par de preguntas, Finn — mencioné con una sonrisa torpe en mis labios.

— No creo que quiera someterte a un interrogatorio cuando lo único que quiero hacer en este momento es besarte.

—¡Ew!, ¡Consigan una habitación! — exclamó Nick exageradamente. Podía notar el tono de burla en su voz.

Finn rió entre dientes mientras yo miraba a Nick con una sonrisa tierna en los labios. Nick salto de la silla anunciando que iría a ducharse.

Finn y yo nos quedamos solos en la cocina mientras intentaba terminar de comer mi pan tostado. Finn se deslizó fuera de su asiento mientras depositaba sus platos sucios en el lavadero. Se lavó las manos y paso por detrás de mi enredando sus brazos delgados y firmes alrededor de mi cintura, mientras depositaba pequeños besos en el hueco de mi cuello. Se sentía tan bien estar entre sus brazos.

—¿Que haremos hoy por la noche, linda? — dijo contra mi oido.

Su cabello me cosquilleaba en la nuca mientras su aliento me erizaba la piel por completo.

Me gire en la silla para encararlo mientras decía —¿Vamos a bailar?.

Él sonrió con cautela. Su rostro pegado al mío mientras rozaba sus labios contra los míos.

— No lo se, __________. La última vez que salimos las cosas no salieron muy bien — dijo haciendo una leve mueca.

— Será divertido, vamos — envolví mis manos en su cintura.

— ¿Sólo tú y yo? — pregunto esperanzado. Mi pecho se encogió mientras recordaba a Millie queriendo ir a bailar este fin de semana.

— Millie quería ir — murmuré — Pero eso implicaría que Noah fuera...

Sentí a Finn tensarse en mis brazos y espere que me espetara algo furioso, pero no hizo nada.

— Noah solía ser mi amigo, uno de los mejores... — comenzó a decir Finn. Pude ver la tristeza reflejada en sus ojos.

— ¿Que sucedió? — susurré hundiendo mi cara en su pecho.

Finn acaricio mi cabello con cariño mientras murmuraba — Creo que nunca pude perdonarme lo que pasó en el accidente. Yo iba conduciendo, yo iba hasta los huesos de borracho... — suspiro con pesadez — me aleje poco a poco de todos y de todo.

—¿Hace cuando sucedió? — pregunté mientras me apartaba un poco y alzaba la mirada para ver su perfilada mandíbula tensarse. Sus labios lucían más rojos de lo normal y me mordí el labio inferior para reprimir el deseo que tenía de besarlo.

— Casi un año... un largo y difícil año.

Rocé sus labios con los míos y él sonrió antes de besarme profundamente. Su lengua trazo mi labio inferior mientras yo le daba entrada a mi boca. Jamás podría acostumbrarme a la sensación de vacío en el estómago que causaban sus besos.

—¿No crees que es tiempo de perdonarte? — murmuré contra sus labios.

Sus brazos se tensaron alrededor de mi cuerpo, claramente nervioso.

— No lo se... — murmuró contra mis labios antes de besarme una vez más. Pareció pensarlo unos segundos antes de preguntar —¿Deseas ir?.

— Solo quiero estar donde tú estés. Si no quieres ir a bailar, o si no quieres estar cerca del novio de Millie, yo lo acepto. Podemos quedarnos en casa y cenar algo — sugerí intentando cambiar su tenso estado de ánimo.

Él suspiro con pesadez antes de decir — Vamos a bailar.

—¿Estás seguro? — pregunté incapaz de contener la sonrisa en mi rostro.

— Quiero estar donde tú estés. Esta noche, iremos a bailar — dijo. Una sonrisa dibujo sus labios mientras presionaba mis labios con los suyos — Aunque no sea muy bueno bailando — añadió mascullando en voz baja.

La puerta se abrió y Finn me soltó deslizándose a mi lado con una sonrisa socarrona en los labios.

— ¡________!, ¡Buenos días!, ¿Cómo dormiste? — pregunto Mary mientras entraba a la cocina cargada de bolsas del supermercado.

— Buenos días Mary — saludé nerviosa — Dormí poco por la tormenta. Pero, muy bien.

La sonrisa de Finn se ensanchó y Mary lo miró con el seño fruncido —¿Por qué tan feliz, cariño? — pregunto con una pequeña sonrisa.

Finn se encogió de hombros mientras decía — _________ y yo iremos a bailar.

Yo abrí los ojos asombrada pero no podía dejar de sonreír al ver la mirada de esperanza que los ojos de Mary reflejaban. Yo tambien esperaba que Finn decidiera hacer su vida normal; ir a la universidad, salir con sus amigos, tener actividades extracurriculares... Sonreí para mí misma ante la idea. Quería que Finn fuera feliz, y no iba a descansar hasta conseguirlo...

Aaaa, los amo <33