A la mañana siguiente, ocurrió algo que nunca pensé que pasaría. Tuve que despertar a JungKook.
—Jeon JungKook, saca tu trasero de la cama en este momento.
—¡Vete!
—¿Quieres repetir eso?—Se movió debajo de las mantas y apretó la almohada sobre su cabeza lo mas que pudo.
—Dije que desaparezcas. No quiero ir a esa
cosa estúpida de desayuno-almuerzo.Su novio era sumamente inteligente y habilidoso en muchas cosas, no por nada era el CEO de una costosa y enorme empresa. Pero admitía que, por momentos, tenía la misma mentalidad que un niño de 5 años.
—Estás siendo inmaduro, amor.
—¿Y?—Oh no, Jeon no me habia acabado de provocar en ese momento. Supongo que tendré que recurrir a medidas drásticas.
—Está bien, quédate aquí. Yo voy a ir a
ducharme y luego olvidaré ponerme ropa
interior cuando me vista. Tal vez conozca
a alguien lindo que me lleve a casa...—Un almohadón voló sobre mi rostro cortando todas mis mentiras.—¡Basta! Me estoy levantando.
Nunca falla.
Sonreí satisfecho y me paré en medio de la habitación con las manos en las caderas cuando lo vi levantarse. El gruñó y se pasó las manos por el pelo mientras despabilaba sus ojos.
—¿Tu familia es tan mala que no puedes soportar estar algunas horas a su alrededor?
—Si, lo son.—Me acerqué a él y envolví mis
brazos alrededor de su cintura, apoyando la cabeza en su hombro.—Si se vuelve demasiado para ti y no lo
puedes manejar, podemos buscar algun lugar para escaparnos. El sonrió y rodeó mi cintura.—¿Y qué es lo que vamos a hacer en nuestra huida?—Levanté la cabeza y corri mi boca hasta detrás de su oreja.
—Lo que quieras hacer conmigo.—Tembló contra mí antes de que me levantara y cargara hacia el baño.
—Realmente te amo, lo sabes ¿verdad?
Mi pecho sintió un calor agradable y sonreí revolviendo su pelo, simplemente porque le quedaba malditamente bien.
—Sí, lo sé. Yo te amo más.
JungKook acurrucó su frente con la mía respirando de una manera calma y dejando un pequeño beso en mis labios.
—¿Te sientes incómodo? Ya sabes... con lo de ese idiota y mi hermana—Sentia como trataba de investigarme mirándome a los ojos. Reí ante lo ultimo.
—Extrañamente, no. Supongo porque, en parte, no ha pasado nada entre nosotros. Y también porque creo que el amor cambia de verdad a las personas.—Jeon arrugó su nariz aún empujándola contra la mía y río bajo.
—Eres muy cursi.—Besó nuevamente mis labios buscando esta vez un beso mas largo.
—Es la verdad, sé que Yoongi es una buena persona. Y además, tu hermana se merece alguien guapo.
—¿Asi que crees que es guapo, uh?—lamente no haber pensado aquello antes. Porque si algo sabia de su novio, era que sabía ser posesivo.
—No, es decir...no es lo que trate de deci...—La mano de JungKook sujeto mi cuello cortándo mi palabra con otro beso.