El Símbolo de la Esperanza ( Boku no hero ) Itsuka Kendo X Male Reader

¿Y AHORA QUÉ?

Bajaste tu brazo aún sonriendo de manera radiante, la felicidad y orgullo que inundaba tu cuerpo eran desbordantes.

Fuyumi saltaba de la emoción al igual que su hermano, el estadio te aplaudía y gritaba tu nombre, Itsuka te veía feliz mientras aplaudía y la Clase A te veían con lágrimas de orgullo, agradecimiento, admiración y, por supuesto, alivio.

Volteaste a ver a Bakugo, quien parecía recobrar la conciencia; sin embargo, dos robots enfermeros aparecieron en la arena por la puerta, tomaron al rubio, lo subieron a una camilla y lo llevaron a la enfermería a toda velocidad.

Otro par de robots enfermeros se acercó a ti con una camilla en sus manos robóticas, sin embargo, tu los detuviste y sonreiste.

- Gracias, pero estoy bien.

- El reglamento dicta que tenemos que llevar a los combatientes a la enfermería después de cada combate.

- Ok, entonces sólo acompañenme, puedo caminar sólo.

Los robots te escoltaron hacia la enfermería.

- ¡BIEN! - gritó Fuyumi a través de su micrófono - ¡El torneo ha terminado, el ganador se ha decidido y, dentro de poco, por fin podré dejar descansar a mi garganta! - exclamó, haciendo reír a los asistentes con el último comentario - Sin embargo, aún falta nuestra ceremonia de premiación así que no se vayan aún o cambien de canal, porque en breve comenzará la ceremonia!

Enfermería del Estadio. Tarde-Noche. Presente.

Recovery te veía confundida y furiosa

- Las heridas que irresponsablemente te causaste están curadas perfectamente... No tiene sentido - dijo la ex-heroína - ¿Qué fue lo que hiciste?

- Ni yo mismo lo sé - le respondiste pasando tu mano derecha sobre las cicatrices de tu brazo izquierdo - ¡Pero no hice trampa!

- No insinué nada de eso - dijo la ancianita - Y, aprovechando que estás en buen estado - añadio levantando su bastón que dejó caer en tu cabeza.

- ¡Auch! ¡Ey, eso me dolió!

- ¡Irresponsable, tonto, necio, irritante, molesto, arrogante! - empezó a decir la mujer dandote bastonazos.

Harto, detuviste el bastón y te levantaste de la camilla dónde estabas.

- ¡Ya estuvo con los golpes! - exclamaste - ¡Entiendo que mis actos no fueron los más correctos o los más sensatos, pero todo salió bien, así que ya basta!

Recovery se te quedó viendo algo molesta y preocupada para luego suspirar.

- De acuerdo. Deberías preparte para tú premiación, en el baño ya hay un par de uniformes... Toma la talla más grande

- Gracias - dijiste entrando al baño.

- ¡Mocoso!

- ¿Hm?

- Felicidades.

- ¡Gracias!

Entraste al baño y te cambiaste. Cuando estabas dispuesto a salir, Carla y Burokkorī se aparecieron frente a ti.

- Buen trabajo noveno - Halagó el de cabello verde.

- ¡ERES UN GRANDÍSIMO TARADO! - grito Carla - Esa manera de combinar mi Quirk con tu técnica fue absurdamente increíble.

- Gracias y... ¿Gracias?

- Sin mencionar el nuevo look - dijo una tercera voz, femenina y con toques seductores, detrás de ti.

Carla y Burokkorī, casi instantaneamente, se arrodillaron.

- Primera - dijeron ambos.

Te volteaste y pudiste ver a una nueva portadora que te sonreía amablemente. La mujer, vestida con una camisa blanca zapatos negros y corbata negra, tenía una piel pálida, ojos amarillos que parecían tener una espiral en lugar de iris,un largo pelo rojo peinado con una trenza que le recorría la espalda y parecía estar estirandose.