Our Time Is Here

CAPÍTULO 11

Me adentro en el parque y voy corriendo por un caminito de tierra por una zona en la que no hay nadie, es una parte muy tranquila del parque, voy observando mi alrededor concentrada en mi respiración para evitar que me dé flato. Giro una pequeña curva y sin esperarlo noto que alguien choca de frente conmigo haciendo que caiga al suelo y me doy un pequeño golpe en la cabeza y me raspo un poco la palma de la mano

-Ay- digo sentándome y llevándome la mano a la cabeza mientras miro a mi alrededor para ver quien me ha tirado al suelo y no me puedo creer quien es

-Perdón perdón- se disculpa Liam ayudándome a levantarme- ven, corre- me agarra de la muñeca y me esconde detrás de unos arbustos que hay a un lado del camino, nada más agacharnos pasan un par de paparazzis con cámaras, que no se percatan de nuestra presencia y siguen adelante- uff- dice soltando un suspiro de alivio- perdón una vez más ¿estás bien?- dice mirándome

-Si tranquilo, ha sido solo un pequeño golpe de nada- digo quitándole importancia

-Me suenas- dice con los ojos entrecerrados- ¡Eres la enfermera de hace un par de días!- exclama-Alicia, ¿verdad?

-Así es- digo con una sonrisa- puedes llamarme Ali

-Vaya, este mundo es un pañuelo- me devuelve la sonrisa

-Ya ves- coincido con él

-¿Qué te parece si como disculpa te invito a un café? Y ya de paso te doy un poco de hielo para el golpe de la cabeza y te curo ese rasponazo- me propone

-No te preocupes, no quiero molestar, tendrás otras cosas que hacer- digo cortada

-No no, no tengo nada que hacer en toda la tarde, anda vente, hay una cafetería aquí al lado que conozco a los dueños, a parte me siento mal por haberte tirado así- me dice y se levanta y después me ofrece su mano para levantarme

-Está bien- accedo y me agarro de su mano para levantarme.

Entramos en la cafetería que decía, tenía razón, está aquí al lado.

-Hola Robert- saluda al hombre tras la barra mientras entramos- necesito pedirte un favor, sin querer he tirado a esta chica en el parque ¿Podrías darme un poco de hielo para su cabeza y algo para limpiarle el rasponazo de la mano?

-Hombre Liam, que alegría tu por aquí- le saluda él de vuelta- claro, sin problema, vete al reservado de siempre y ahora te lo llevo

-Gracias tío- le agradece mientras el hombre entra en las cocinas- ven por aquí Ali- dice sonriéndome e indicándome con la mano por donde ir

Nos sentamos en una mesa que hay tras unos biombos, un poco apartada, supongo que para que no le reconozcan.

-¿Cómo es que ibas con tanta prisa por el parque?- le pregunto

-Unos paparazzis iban persiguiéndome, una auténtica pesadilla, uno no puede dar un paseo con un poco de privacidad- dice algo asqueado

-Bueno, mira el lado bueno, ya les has despistado

-Eso sí- se ríe levemente

-Aquí tienes- dice Robert interrumpiendo la conversación y dejando las cosas en la mesa- ¿Y esta preciosa acompañante?- dice dirigiéndose a mi- ¿es a ella a la pobre chica a la que has tirado?

-Robert, te presento a Ali, Ali, este es Robert- hace las presentaciones- y si, ha sido a la que he tirado, ya sabes que soy un torpe- se encoje de hombros

-En realidad lo ha hecho aposta como venganza porque le pinché el otro día- digo haciendo que Liam suelte una carcajada y yo me quedo admirando esas arruguitas que se le forman alrededor de los ojos cuando ríe y que siempre había querido ver en persona

-Vaya hombre, me has pillado- dice siguiéndome el rollo y reímos los dos

-Bueno, yo os dejo- dice Robert yéndose

-A ver, ponte este hielo en la cabeza, no te vaya a salir un chichón- me dice dándome un paño con hielos dentro y yo le hago caso.

Después saca un algodoncito y le echa agua oxigenada

-¿Puedo?- dice tímidamente señalándome la mano

-Claro- le tiendo la mano y él me la coge y pone la palma hacia arriba para limpiar el pequeño raspón-¿Escuece?- me pregunta cuando hago una mueca

-Un poco- digo y él empieza a pasar el algodón un poco más despacio

De pronto mira mi muñeca y saca una sonrisa de medio lado.

-¿Te gustó el concierto?- me pregunta señalando con la cabeza la pulsera que llevo del concierto y puedo notar cómo me sonrojo

-Fue increíble- digo vergonzosa- lo cierto es que me encantó, disteis un concierto maravilloso, enhorabuena

-Gracias- me sonríe- muchas gracias

Termina con el agua oxigenada y coge otro algodón que impregna de vetadine

-¿De dónde eres? He podido notar que no eres de aquí- me pregunta

-Soy de España- le contesto

-Vaya- dice sorprendido- Hola señorita- me dice en un patoso español haciéndome reír- ¿Y que haces aquí en Londres?- se interesa

-He ganado una beca en mi universidad de España para estudiar todo este curso aquí el tercer año de enfermería, así que me he venido a vivir a un piso con mis dos mejores amigas que también tienen una beca en sus carreras para este año- le explico.

Hablamos un rato más y me pregunta algunas más cosas sobre mí, es una conversación de lo más agradable.

-Bueno pues esto ya está- dice pegándome un apósito tapando la parte que me he raspado

-Muchas gracias enfermero, ya estamos en paz- le digo haciéndole reír

Nos levantamos de la mesa y salimos de la cafetería tras despedirnos de Robert, no hay nadie en la calle así que nos quedamos hablando un poco los dos.

-Me ha encantado conocerte y hablar contigo- me dice sonriente

-Lo mismo digo- sonrío

-Quería darte las gracias

-¿A mi?- pregunto extrañada

-Sí, por tratarme como Liam, el patoso que te ha tirado en el parque, no como Liam Payne, de One Direction, se agradece encontrar a alguien así- me dice y yo le sonrío

-Ah, ¿Te apellidas Payne? No me lo habías comentado- digo bromeando y él se ríe

-¿Sabes? Me encantaría volver a quedar contigo algún otro día- me dice- ¿Llevas el móvil? Te doy mi número

-Me lo he dejado en casa

-Yo también, me lo he dejado en el coche, que me ha traído Niall porque él se iba a hacer unas compras- dice- pero bueno, dímelo

-¿Te acordarás de él?- pregunto divertida

-Por supuesto, no creo que pudiese olvidarme- me dice él

Le digo mi número y justo en ese momento llega un coche que le pita y puedo distinguir a Niall en el interior conduciendo

-Bueno, me tengo que ir- se despide

-Gracias por todo una vez más- digo

-No las des- me dice y me da un beso en la mejilla antes de montarse corriendo en el coche.