capitulo 16

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Una amable camarera nos toma nota de los batidos que queremos, yo pido uno de frutos rojos y Liam uno de mango. En seguida nos los traen y ambos disfrutamos del sabor de nuestros batidos.

-Está riquisimo- digo tras el primer sorbo- ¿quieres probarlo?- le ofrezco y el sorbe de mi pajita

-Mmm cierto, muy bueno- asiente- el mio también está delicioso, prueba- me dice pasándome su vaso

-Muy rico- alabo

Nos tomamos los batidos sin ninguna prisa mientras hablamos de unas cosas y otras.

Hace bastante sol y Liam saca sus gafas de sol para protegerse del sol en los ojos

-Me gustan tus gafas, son de super estrella- digo cuando las veo y él se ríe por mi comentario

-¿De super estrella?- pregunta divertido

-Claro, mira, déjamelas- digo y él me las pasa y yo me las pongo- ¿Ves? ahora parezco toda una diva- digo haciendo el tonto y haciendo un gesto como si fuese una pija de película y los dos reímos

-Que diva- se ríe- vamos a hacernos una selfie- dice y saca su móvil y nos hacemos un par de fotos

-Anda toma- digo devolviéndole las gafas.

-¿Qué te parece si hacemos el típico juego de una pregunta cada uno y así nos conocemos un poco más?- me propone

-Me parece bien, tu empiezas

Empezamos el juego haciendo variadas preguntas, algunas muy tontas y otras no tanto, es divertido

-¿Cuál es el sitio más extraño en el que te has despertado tras una noche de fiesta?- pregunto y él se empieza a reír.

-Pues no se como, pero un día me desperté en medio de una rotonda- me dice y yo me empiezo a reír

-¿y no te acuerdas cómo acabaste ahí?-me rió

-Nada, no tengo ni idea como llegue a la rotonda- se ríe él también.

Seguimos charlando y riendo un rato más, pero se empieza a hacer tarde así que decidimos irnos.

Nos traen la cuenta y empezamos una pequeña discusión porque el quiere pagar todo y yo insisto en pagarlo a medias.

-Venga, déjame invitarte por mi cumple- me pide- por tu cumple te dejo que invites tú

-Mmm- digo- Vale, por mi cumple pago yo eh

-Perfecto- sonríe sacando el dinero- ¿Qué día es tu cumple?

-Veinticuatro de diciembre, nochebuena- contesto y él pone cara de sorpresa

-¡Como Tomlinson!- dice y yo asiento con la cabeza- pues te aseguro que no se me olvidará- me dice- que casualidad, con el día tan raro que es, creía que no habría casi nadie que cumpliese ese día, verás cuando se lo diga lo contento que se va a poner porque siempre busca a alguien que los cumpla el mismo día que él- me cuenta y yo sonrío

Damos la cuenta y nos vamos de allí dirigiéndonos al coche

-¿Te apetece venir a casa y te presento a los chicos?- me pregunta cuando subimos al coche- quieren conocerte

-Claro, me encantaría

Al cabo de 10 minutos en coche, llegamos a su casa, un chalet enorme, rodeado de un gran jardín y una valla y alejado del resto. Abre la verja y entra al garaje, donde deja el coche.

Salimos del coche y Liam abre la puerta que sale del garaje para salir de nuevo al jardín

-Las damas primero- dice manteniendo la puerta abierta para que pase

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