Parte 1 - Jugando

¿quien es Jinx ?

El camino de regreso había estado lleno de un silencio incómodo. Habían recogido la ametralladora de Jinx sin intercambiar una sola palabra. Ahora estaban de regreso en el escondite de Jinx y las palabras del cantinero aún persistían en la mente de Lux. Ahora que se sentía más segura de nuevo, finalmente se levantó para hablar. "¿Gafe? Sobre esa mujer... Sevika, ¿verdad?

"¿Que hay de ella?" Jinx sonaba descontento.

"Si ella... te está buscando... ¿no deberíamos preocuparnos?"

"¡Decir ah!" Jinx restó importancia a las preocupaciones. "¡Ese troll de las cavernas ni siquiera podría encontrar un elefante si agitara su trompa mientras sostenía un reflector!"

Lux se rió. Había algo tranquilizador en la confianza de Jinx. ¿De qué estaba siquiera preocupada? ¡Con su magia y la potencia de fuego de Jinx podrían manejar cualquier amenaza!

Jinx enfundó su ametralladora y comenzó a girar los cañones. "¡Vamos, Linterna!" Ella habló dramáticamente con una voz más profunda: "¡Eleva tus defensas!"

“Está bien, ¡pero dame unos segundos para que pueda hacerlo más fuerte!” Lux invocó una barrera y la reforzó con la mayor cantidad de energía mágica posible. "¡AHORA!"

Jinx se mordió el labio inferior con entusiasmo y comenzó a disparar. Todo el cuerpo de Lux se estaba tensando. Esto fue difícil. Con cada bala se hacía más y más difícil evitar que la barrera se derrumbara. Se sentía como si su cuerpo se volviera más pesado cada segundo mientras que también se hacía más difícil respirar. Pero ella no se dio por vencida. No quería decepcionar a Jinx con una mala actuación.

Jinx dejó escapar una risa confiada como si estuviera segura de su victoria. Debió notar que la barrera estaba perdiendo su forma. Después de unos segundos más, finalmente se rompió, dejando solo unas pocas chispas brillantes. Jinx vitoreó. Luego procedió a patear todas las balas usadas, que estaban esparcidas por el suelo, hacia el abismo debajo de ellos. “¡Eso es un montón de balas! ¡Tendré que recargarte!” Con orgullo abofeteó su ametralladora. “¡Resististe bastante tiempo, Linterna! ¿Linterna?" Lux estaba arrodillada en el suelo, respirando con dificultad. Jinx corrió rápidamente a su lado. "¿Estás... estás bien?"

“S-sí, estoy bien. Solo… necesito un poco de aire…” Lux comenzó a toser. Todo el día ya había sido agotador y ahora había gastado toda la energía que le quedaba. Ella solo quería acostarse. "Ah, mierda... nos divertimos mucho, lo olvidé... ¿dónde se supone que debo dormir...?"

"¡Solo duerme aquí!" Jinx parecía demasiado interesado en que Lux se quedara.

"En el sofá...?" Un pensamiento desagradable. No había mantas. El hecho de que no hubiera techo en lo más alto no lo hacía mejor. Claro, el espacio entre las paredes irregulares era bastante estrecho hacia la parte superior, apenas se podía ver el cielo y no parecía que la lluvia hubiera caído nunca en el lugar, pero aún así iba a hacer frío y corrientes de aire.

Pero Jinx tenía una idea diferente. "¡Nah, en la cama, a mi lado!"

"Qué...?" Ahora eso era demasiado íntimo. "Sin ofender, Jinx, pero... prefiero no compartir la cama contigo..."

Jinx estaba confundido. "Qué es lo que tú...? ¡Ay, jeje! Palabras, ¿verdad? Lo que quise decir fue: Puedes usar la cama en la habitación que está al lado de mi habitación.

"¿Tienes dos camas?" Eso cambió todo.

"Sí, tuve que mudarme recientemente y... tengo dos camas ahora, supongo..." Jinx parecía estar incómodo por algo.

"En ese caso, seguro..." Lux trató de levantarse pero comenzó a toser de nuevo. Jinx la ayudó a levantarse y la condujo a dos pasajes al costado de la cueva. Lux recordó que Jinx había sacado su capa nueva de la primera. Ahora entraron en el segundo. Conducía a una habitación con una cama en la que Jinx sentó a Lux. "Gracias..." Lux mostró una débil sonrisa.