𝕌𝕟 𝕃𝕒𝕥𝕚𝕕𝕠 𝔻𝕖𝕝 ℂ𝕠𝕣𝕒𝕫𝕠𝕟 .｡.:*♡

ღ¸.✻'XVIII'✻.¸¸ღ

Narra Gulf

No sé cómo responder a los mensajes de Mew.

Recorro mi habitación, tengo más energía de las que he tenido en mucho tiempo. Luego tono el teléfono, me siento en el suelo y los leo de nuevo.

¿Qué le digo? ¿Era en realidad una invitación a salir? ¿Qué hora es «después»?

Necesito ayuda con esto, así que me vuelvo a levantar y cruzo el pasillo hacia el cuarto de Becky.

Cuando asomo la cabeza, puedo oír el ruido de la ducha, de modo que entro de puntillas.
Miro a mi alrededor, a lo que fue una habitación limpia y ordenada hasta hace unos días.

Ahora sus bolsas están en el rincón, y de ellas se derraman vestidos y maquillaje.
Libros y revistas llenan ambos lados de la cama, y hasta ha sacado todos sus viejos lienzos y los ha apoyado contra la pared, como si fuera una pequeña galería.

En cuanto los veo, sé que en realidad está preparando un porfolio para esa escuela de arte.

Miro el armario, el único lugar limpio, donde ahora descansa contra el espejo el tablero de visión ya completado de Becky, un collage ingenioso, lleno de color, de sus deseos y objetivos. De
sus planes para salir adelante.

Debió de permanecer despierta toda la noche para terminarlo. Ella
tiene ese tipo de concentración maníaca, como si con sólo mantenerse en movimiento, las cosas
que le molestan no pudieran alcanzarla.

Lo opuesto a mí.

Hace que me pregunte si, de no haber
estado lejos de la escuela este último año, las cosas habrían sido diferentes para mí.

Más parecidas a este día.

En letras grandes, y en negrita, cruzando el tablero de Becky, están las palabras «nuevos inicios», y debajo de ellas, hay dispersas varias fotografías de lugares a los que ella quiere ir, incluido Italia.

Sobre todas esas imágenes hay palabras que suenan como cosas que mi hermana diría: «Piérdete gloriosamente, encuéntrate a ti misma, confía, ama, conté la respiración y salta».

Todas las cosas que creo que ella puede hacer de manera natural.

Me acuerdo de la fotografía que encontré, la del corazón en la botella.

Metí la revista debajo de la cama, esperando que ella no la encontrara y la recortara. Cuando me agacho y miro,sonrío, aún está allí.

La ducha se cierra, y paso las hojas con rapidez. Veo la página que doblé, opuesta a la imagen
del corazón en la botella, y, con la revista en la mano, salgo del cuarto de Becky.

No es que a ella le importe. Probablemente me enviaría con la pila de revistas a terminar mi propio tablero. Pero algo de esta imagen en particular hace que la quiera conservar para mí solo.

En mi cuarto me siento sobre la alfombra. Abro la revista en aquella página y recorto la imagen con cuidado, manteniéndola allí un momento. No estoy seguro de lo que representa para mí..., sólo que es algo que necesito.

Voy al espejo de mi armario, donde las fotografías mías con Kao están metidas en los bordes, y la rosa seca del día que nos conocimos cuelga de la esquina superior.

No quito nada de eso, como Becky pretende que lo haga. No estoy listo para hacerlo, todavía no.

En cambio, deslizo la fotografía entre el espejo y su marco. Al frente y al centro. Y luego dejo que mis ojos caigan sobre el girasol que Mew me dio hace apenas dos días. Está arriba de mi armario; todavía tiene los pétalos de color dorado, sólo un poco marchitos en las puntas por no
ponerle agua.