𝕌𝕟 𝕃𝕒𝕥𝕚𝕕𝕠 𝔻𝕖𝕝 ℂ𝕠𝕣𝕒𝕫𝕠𝕟 .｡.:*♡

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Narra Gulf

Despierto lentamente, de modo que de lo único que soy consciente al principio es de un sonido grave y continuo, y el rítmico movimiento del lugar donde tengo apoyada la cabeza.

Estoy envuelto en algo cálido, pero más allá hay una corriente de aire cargado de lluvia que me hace pegarme más a Mew, al calor de su piel y al ritmo de su corazón.

Por un instante la idea me sorprende.

Durante mucho tiempo pensé en él como la persona que tenía el corazón de Kao.

No puedo decir cuándo sucedió o cómo cambió en mi mente, pero ahora siento esa idea distante, incluso falsa.

Este sonido que puedo escuchar y sentir es el corazón de Mew.

Abro los ojos y, cuando veo la curva de su barbilla, su musculoso brazo a mi alrededor, regresa una corriente cálida, el recuerdo de sus suaves labios presionandose contra los míos mientras la lluvia caía insistentemente.

Era su corazón y el mío juntos; esos momentos fueron solo nuestros.

Una luz pálida se filtra por las ventanas empañadas, y todavía oigo el sonido suave de la llovizna, punteado por el ruido de las gotas más grandes que se desprenden del ciprés debajo del cual estamos, y que golpean el techo de metal del auto.

Llevo la mano al centro de su pecho, paso un dedo por su cuello, y Mew se agita ante mi tacto. Respira hondo y me cubre la mano con la suya como lo ha hecho antes.
La lleva a su pecho y sonríe sin abrir los ojos.

- Hola - Digo, sintiendo de pronto un poco de vergüenza, con nuestros cuerpos aún apegados bajo una colcha.

Mew abre un ojo y luego el otro, e inclina la barbilla hacia abajo para verme.

-Así que no fue un sueño... -Una sonrisa se extiende por su cara- Bueno, esta vez no.

Me río y lo empujo jugando, pero los recuerdos de nosotros, con la lluvia alrededor, y la idea de él pensando en mí de esa manera envía una nueva oleada de calor en mi interior.

Me estiro para alcanzar sus labios, y él me abraza, y, como si todo estuviera a punto de desaparecer de nuevo, oigo el zumbido de mi celular.

Empiezo a estirarme para ver quién es, pero Mew me atrae hacia él y murmura en mis labios mientras me besa

-No te preocupes por eso ahora.

Le devuelvo el beso mientras el teléfono sigue vibrando, antes de quedar en silencio. Luego se oye el corto sonido de un mensaje de voz. Una pequeña preocupación se instala en un rincón de mi mente.

Le dije a Becky que iba a ver a Mew. Tal vez sólo me esté llamando para confirmar que estoy bien.

Por lo general, no pensaría mucho en ello, pero la tormenta, que no estoy donde dije que estaría y que se está haciendo tarde, hacen que me sienta lo bastante ansioso como para apartarme de Mew, cubrirme con la colcha y alcanzar el teléfono.

Cuando veo la pantalla, mi estómago se hunde.

Doce llamadas perdidas.

Mi madre, Becky, la abuela.

Una y otra vez.

-Dios mío.

Mew se incorpora, asustado. - ¿Qué? ¿Qué pasa?