Narra Gulf
Despierto muy lentamente... tanto que puedo sentir como mi respiración empieza a normalizarse y y trato de aclarar mis pensamientos, apartar de mi mente aquel sueño que tuve anoche con Kao... porque sé que en cuanto abra los ojos él no estará a mi lado y me quedaré solo de nuevo...
365 días...
La casa está tan quieta, noto que no hay nadie más y entonces me doy cuenta de que es sábado.
Probablemente mis padres ya han empezado su rutina de fin de semana... caminata hasta la cafetería, pasando alrededor del mercado de granjeros al regreso y después pasar un día sin teléfonos o correo electrónico, impuesto por mi madre, cosinando en el patio, leyendo juntos.
Es parte de la campaña para cambiar su estilo de vida, después de que ella encontrará a mi padre en la cocina, un domingo por la mañana y que el hablara de forma confusa e incoherente.
Tras horas de pruebas los doctores determinaron que no había tenido un infarto cerebral sino algo llamado ataque isquémico transitorio.
Nos dijeron que había sido un breve bloqueo del flujo de sangre al cerebro y aunque no había daño permanente es un aviso importante, ya que es un precursor del derrame cerebral.
Desde una silla en el rincón de la habitación del hospital en que se encontraba mi padre, mire como mi madre permanecía de pie junto a la cama sosteniéndole la mano mientras el doctor mencionaba todos los factores de riesgo: presión arterial, colesterol, malos hábitos alimenticios, tensión nerviosa, entre otros.
No era nada que mi madre no hubiera tratado de decirle, pero supongo que era diferente viniendo de un doctor y después de un ataque...
Cambiar todo eso ya no era cuestión de simples recomendaciones, sino un asunto de vida o muerte.
Cuando regresamos a casa mi padre aún temblaba pero mi madre tenía un propósito y un plan.
Junto con los medicamentos que le recetaron a mi padre, ella iba a cambiar todos los factores de riesgo que pudiera.
Mamá trato de que no me afectará directamente este cambio en el su estilo de vida, pero yo sabía que lo estaba haciendo.
Mis dos abuelos murieron antes de cumplir los 60 años de edad uno debido a una insuficiencia cardíaca y el otro de un derrame cerebral, ella no iba a permitir que la historia se repitiera, no quería ser viuda como su propia madre o su hija.
En primer lugar mi madre contrato un asistente para su oficina de contabilidad y ella misma se encargó de la mayor parte de la carga de trabajo de mi padre.
Luego insistió en que él estuviera en casa de prisa todas las noches para tomar una cena saludable que ella misma cocinaba, en lugar de quedarse en el trabajo hasta tarde y comer chucherías de regreso a casa cómo solía aser.
Yo creí que pondría resistencia y diria que tenía demasiado trabajo para hacer ese cambio, pero no lo hizo y así fue como supe que él también debía de estar asustado.
Todos estábamos mal había pasado tan solo 5 meses desde la muerte de Kao. Y pensaba que mis padres se estaban recuperando de la impresión de darse cuenta de que la vida podía irse en un instante, sin previo aviso, en un suspiro.
Por fortuna mi padre había tenido un aviso, fuerte y claro, no había estado en la mesa para la cena durante toda mi infancia, pero de pronto estaba allí todas las noches cenando con nosotros la comida que mi madre le daba, luego se extendió a los fines de semana, que en los últimos años se la había pasado por lo general delante de su ordenador respondiendo correos electrónicos, revisando informes y hojas de cálculo, porque según él nadie más podía hacer el trabajo de forma adecuada.

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𝕌𝕟 𝕃𝕒𝕥𝕚𝕕𝕠 𝔻𝕖𝕝 ℂ𝕠𝕣𝕒𝕫𝕠𝕟 .。.:*♡
RandomGulf kanawut no ha podido superar la pérdida de su primer amor. un año después de su muerte y como parte de su duelo él escribe cartas a todas las personas que ha salvado novio donando sus órganos.... El consigue contactar a casi todos excepto a aqu...