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Narra Gulf

365 días...

Repito el número en mi cabeza, dejo que se apodere ese sentimiento de vacío mientras aprieto el volante, no puedo permitir que se vaya como cualquiera otro día.

365 merece algún reconocimiento.

Cómo 200 cuando le lleve flores a su mamá y no a su tumba porque sabía que el habría querido que las tuviera ella cómo era su cumpleaños, eso fue ya hace mes y medio.

Lo pasé solo.

Ese día no quería estar con mis padres. La verdad es que tenía una pequeña esperanza de que sí yo estaba sólo quizás él podría regresar; cumplir 18 años y seguir dónde nos habíamos quedado.

Estudiar nuestro último año e ir juntos al baile, enviar nuestras cartas de solicitud para la universidad, lanzar nuestros birretes y besarnos, con unos de esos besos que detienen el tiempo y aceleran los latidos

Pero el nunca regreso...

Tomo entonces una sudadera que según yo, aún tenía impregnado su aroma. Lo abrase con todas mis fuerzas a mi cuerpo y pedí un deseo.

Deseaba o más bien anhelaba con todo mi corazón no tener que realizar las metas que tanto soñamos sin él.

Pero el nunca regresó...

El último año fue el peor para mí no envié mi solicitud universitaria, tampoco fui por mi traje para el baile de graduación, olvide el como continuar con mi vida solo.

Los días pasaron uno a uno...
se sentían interminables, pero se fueron en un suspiro, así como las hojas caen del árbol en otoño y ya no pueden volver a él... o como un simple latido del corazón.

Kao tenia corazón de atleta era fuerte aunque sus latidos eran lentos a comparación del mío

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Kao tenia corazón de atleta era fuerte aunque sus latidos eran lentos a comparación del mío.

Antes nos acostábamos pecho contra pecho y yo respiraba más lento para seguir su ritmo. Trataba de engañar a mi pulso para que hiciera lo mismo pero nunca funcionó.

3 años después, mi pulso se aceleraba con solo estar cerca de él pero encontrábamos nuestra propia sincronía con su corazón latiendo a un ritmo lento y estable y el mío llenando los espacios.

365 días y demasiados latidos por contar.

365 días demasiados lugares y momentos donde Kao ya no esta y aún sin respuesta de uno de los pocos sitios donde se que si existe.

Un claxon sonando detrás mio me saca abruptamente de mis pensamientos. Por el espejo retrovisor puedo ver al conductor que sigue maldiciendo mientras maniobra para así adelantar su coche, se lo ve furioso y está gritando a través de la ventana

-¡¡¡ qué demonios te pasa¡¡¡Muevete!!!-

Me pregunté lo mismo al entrar al coche, no estoy seguro de lo que estoy haciendo solo sé que tengo que hacerlo porque debo verlo con mis propios ojos por lo que sentí cuando vi a los otros receptores

𝕌𝕟 𝕃𝕒𝕥𝕚𝕕𝕠 𝔻𝕖𝕝 ℂ𝕠𝕣𝕒𝕫𝕠𝕟 .。.:*♡Donde viven las historias. Descúbrelo ahora