Sedúceme: 12

365 15 1
                                    

Tn se aferró al cuerpo de Jean

—no quiero…. Le susurró mirándolo. Y solo así el pudo sentir cuanto lo necesitaba. Tn le abrazo la remarcado cintura. —por favor… solo… solo sácame de aquí… y no me dejes…

Jean le levanto el rostro y sigilosamente la beso los labios en medio de la oscuridad. Con todo lo que había pasado entre los dos en esos minutos, se habian olvida de todo lo de su alrededor. El tiempo había corrido y las cosas habían pasado. Pero ellos dos seguían ahí. Y había una boda, la más esperada, y miles de invitados, miles de invitados que esperaban a la protagonistade la noche, pero… ¿dodne estaba ella?

—¡Tn!. La llamo el coordinador detrás de la puerta de nuevo.

—necesito que confíes en mi…. Jean encerró el rostro de Tn en sus manos. —todo saldrá bien mientras tu estés conmigo. Ella volvió a asentir. Esta vez con el corazón en la boca. Solo había una sola persona que la hacía vivir este tipo de cosas… y ese era Jean. Este respiro hondo. —ve por tu ropa…. Le indicó él. Ella siguió sus órdenes, corrió por su maletas vieja y la abrió de inmediato. Abrió los cajoses. Sacó un par de cosas. Más y más. Las metió como pudo. Cuando volteó, Jean acababa de abrir la puerta de su habitación.

—por fin has sali…. Él hombre calvo se quedó callado, observando estupefacto a Jean. Entreabrió los labios y abrió los ojos como platos. —¿qui… quié… quién es us… usted?. Preguntó temblando.

Jean se volteo para observar que Tn se encontraba ocupada con sus cosas. Entonces así él tendría tiempo para decirle un par de cositas sin importancia a tal hombrecillo.

—escúchame bien imbecil. Le ordenó. El calvo asintió con rapidez. —si dices una… sola una pequeñísima palabra de todo esto…. Lo cargo por los bordes de su camisa, haciendo que sus pies dejaran de tocar el suelo. —te prometo que te recordarás de mi el resto de tu miserable vida.

Tn cargo su maleta, saliendo rápidamente de su habitación, aún en ropa interior  descalza y con la cazadora de Jean puesta

—¿me has oído?. Le pregunto Jean.

Él calvo asintió que falta de huevos…

—bájalo…. Le susurro Tn, acariciando sus brazos.

—vale, vale. Lo soltó. Él hombre callo al suelo. Sus lentes de quebraron, haciendo que pierda la visión y incluso la noción de todo lo que pasaba a su alrededor. Y cuando pudo retomar la vista y el sentido, de lo único que pudo ser testigo era del sonido del motor y a su vez del acelerador de un auto.

Comprendió que había sido demasiado tarde. Él se la ha ai llevado de nuevo.

Capitulo 12 arriba, espero que les guste mucho con demasiado bye bye ❤️❤️

Sedúceme (JeanCarlo León y tú) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora