capitulo 4

41 1 0
                                    

Me siento observada por alguien y es que cuando volteo ahí está el mirándome desde lo lejos pero simula que está viendo su reloj y termina luciendo avergonzado porque lo descubrí por lo que se retira de la ventana de la sala que deja ver el patio trasero

- le gustas a ese chico- susurra Violet y me da una sonrisa de medio lado coqueta y pongo los ojos en blanco

- estás loca?, Es el jefe, jamás se fijaría en una chica negra, además empleada suya no soy muy buen partido violet- digo a modo de un ligero regaño y ella solo me imita y pone los ojos en blanco cuando terminó de hablar

- no has notado que durante toda esta primer semana de su regreso a casa a la única que no es capaz de ver a los ojos eres tú? Y que solo te mira envelesado es a ti?- pregunta y niego

- no creo que sea eso, tal vez le cause curiosidad algo sobre mi o yo que se, pero lo que si estoy segura es que ya tengo bastante con tener que lidiar con el joven Evan cada que Viene a cenar con su familia y la señora Thompson- lo último me hace sentir molesta y recordar sus insinuaciones o sus toqueteos cada que tiene oportunidad de encontrarme a solas

- no sucederá de nuevo, no te voy a dejar sola con ese imbécil- dice Violet y tomo otra prenda de la canasta para extenderla sobre el tendedero

- es algo que no puedes controlar, el siempre encuentra el momento y lugar oportuno para acosarme- digo y ella baja la mirada

- prometo intentar cuidarte así como tú me has cuidado a mi abi- dice mientras sostiene una toalla que tomo del cesto en sus manos

- está bien- digo y no puedo evitar el no acercarme a darle un abrazo que dure al menos dos segundos

Violet ha Sido mi mejor amiga desde los doce años que entre a segundo grado, durante la escuela no fui muy popular y Violet tampoco pero nos teníamos la una a la otra para socorrernos luego llegó Richard su esposo el cual conoció durante el último año y a diferencia de mi novio de ese tiempo el si quiso un futuro con ella y algo serio, por lo que fueron novios durante varios hasta que él le pidió su mano en matrimonio y henos aquí, yo soltera pero ya habiendo conocido algo sobre el amor y ellos siendo la pareja ideal, aunque ahora estén afrontando la lucha por concibir su primer bebé

Seguimos platicando mientras terminamos de extender ropa y una vez acabamos yo me dirijo a realizar el almuerzo y Violet a realizar algún otro que hacer, nuestra jornada diaria continúa de esa manera durante el resto del día, aunque ya no me siento igual que antes dónde un par de ojos azules no me seguían durante todo momento y he pensado sobre conversar con el sobre eso pero no se como hacerlo

-abi...- dice y volteo hacia el esperando que me diga que necesita, el repaso mi rostro y es cuando decido conversar con el

- señor gabe puedo hablar con usted?- pregunto y el asiente pareciendo salir de un trance o algo parecido, nos encontramos en la cocina por lo que el se sienta en uno de los taburetes junto a la isla que se encuentra en medio del lugar

- claro, qué sucede?- pregunta mirando solo unos segundos mis ojos

- no quisiera sonar grosera, pero puedo saber si hay algo que le incómoda o tiene algo en contra de mi y mi presencia cuando estoy cerca de usted?- pregunto y el sonríe y baja el rostro, no sabía que podría verse aún más guapo cuando hace ese gesto
<<Concéntrate Abigail, es tu jefe>>
- porque crees que hay algo en ti que me incómoda?- pregunta y bajo la mirada y finjo limpiar la isla con la toalla que tengo en las manos

- pues, por cómo mira y actúa cada que me ve- digo con seguridad, que se entere que he notado el cómo actúa, eso parece tomarlo por sorpresa pues no habla durante un par de segundos por lo que levanto la mirada levemente y el sonríe de nuevo tímidamente

- es que me resultas intrigante eso es todo- dice y asiento, aún no muy conforme con su respuesta

- está bien- digo- lamento si lo incomode solo que...necesitaba preguntárselo.

- no hay de que disculparse, antes lamento si te hice sentir incómoda, tiendo a hacer las cosas por instinto y sin razonar la mayoría del tiempo- menciona y sonrió aun manteniendo mis labios unidos

- creo...creo que yo soy lo contrario, casi...casi nunca hago Algo sin haberlo meditado- digo y el asiente

- somos opuestos en ese sentido- dice con ligereza y asiento, seguido pregunta- Abi, que edad tienes?

- cumpliré veinte dos señor- digo

- soy mayor que tu por un año- dice y ambos sonreimos- pero parece que la sabía de los dos eres tú- ladeó mi cabeza como en gesto de asegurarlo y el comienza a reír - te falta modestia.

Niego y sonrió- antes dicen que me sobra- digo y ambos reímos un poco y de esa manera seguimos platicando un rato más.

Abi Y Gabe: El Amor En Tiempos De LuchaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora