Me pierdo en su sonrisa,pues esta contándome de su vida de pequeña de las travesuras que junto a su hermana hacían como ocultarse en el horno de la estufa en medio de una persecución por parte de su madre que las buscaba a ambas por haber desenterrado las flores del jardín para llevarlas a su maestra pues su hermana había perdido una asignación y pensaban apelar al buen corazón o al soborno de la maestra pero su madre se entero y a parte de impedirles hacerlo las comenzó a perseguir por todo su hogar para reprenderlas
- Sus malteadas-dice el mesero y volteo a mirarlo a el y luego a abigail recibir su malteada como si se tratara de una niña pequeña a la cual le acaban de dar un dulce no tengo idea de que voy a hacer o a quien me tengo que vender por seguir viendo esos hoyuelos cuando sonríe y esa mirada juguetona y feliz que tiene justo ahora-me retiro
-muchas gracias-digo viendo al mesero y observándola a ella y ella a mi
-gracias-dice ella y sonrió mientras bajo mi mirada
-te envidio-digo y la miro mientras ella frunce el seño
-me envidia?-dice y asiento-envidia que?, no creo que alguien como usted precisamente me envidie
-no tienes idea de cuanto te envidio, creciste con la libertad que yo tuve que buscar en el ejercito-digo con algo de pena en el fondo y ella baja la mirada-espero poder esta noche aprender un poco de como se vive siendo libre-digo y ella asiente
-quiere ser libre?-pregunta y asiento y ella prosigue a intercambiar nuestras malteadas, yo tomo la de vainilla y ella la de saber a fresa
-siempre toma cosas con sabor a frutas, esta vez tome algo diferente y bebalo muy rápido, tenemos que irnos-dice y frunzo el seño-quiere tener su primer clase de libertad o no?-pregunta y asiento
ambos bebemos lo mas rápido que podemos,aunque el cerebro se nos congela en el intento y no podemos evitar no detenernos a sujetar nuestras frentes y reír y seguir bebiendo lo mas rápido, terminamos pagando lo mas rápido que podemos y abigail se lleva un par de sodas, tomo su mano y nos guió al auto
-lo guió-dice y asiento, comienza a guiarme y entre mas acercamos siento que mas cerca de conocer una nueva versión de ella estoy,pues esta noche comenzamos conversando con timidez y poco a poco entrando en calor y confianza al punto que me quedaba a veces perdido,absorto y recreando en mi mente lo que ella me contaba.
Llegamos en menos de lo pensado a las vías abandonadas del tren, ella baja del auto en cuanto estaciona camina unos cuantos metros antes de voltear a verme y con su mano hacerme la señal de que la siga, el cielo se ve pintado con destellos blancos sobre el, el camino de tierra abre paso para las vías del tren y a unos cuantos metros un bagon abandonado, abigail se quita sus zapatos y comienza a caminar descalza hasta estar enfrente del bagon, noto como se detiene creo pensando como subir y en menos de lo que pienso toma impulso y con sus brazos se impulsa y sube una pierna y luego la otra
-no piensa subir?-pregunta y niego
-cuando me trates como gabriel y no como el señor thompson-digo y ella se queda seria, lo piensa unos segundos y asiente
-no piensas subir?-reformula la pregunta quedándose sonrojada mientras lo dice y asiento, subo lo mas rápido que puedo y ella con su cabeza me señala hacia ariba y es como estar dentro de un telescopio pues el techo que solía ser de vidrio esta quebrado y ahora las estrellas se ven aun mas cercanas, mi mirada recae en la chica frente a mi y esta voltea a mirarme con la luna en sus ojos y sus mejillas sonrojadas por la brisa fría de junio, ambos sonreímos y abigail comienza a retroceder frunzo el seño hasta que la veo comenzar a correr, comenzamos a juguetear
...
terminamos sentados con los piel colgando viendo todo alrededor, ninguno habla pero nuestras manos mantienen cerca y nuestros pechos agitados luego de correr uno detrás del otro, el cielo se ha nublado pero no quita lo bello que es este lugar, el pasto es frondozo y a lo lejos se vislumbra la estación de tren antigua, de repente una gota cae sobre mi cabeza, frunzo el seño cuando abigail voltea a verme y antes de lograr decir algo la lluvia comienza a caer sobre nosotros, ambos nos miramos antes de comenzar a reír, bajo yo primero del bagon y ayudo a abigail a bajar tomándola de la cintura,cuando sus pies tocan el suelo ambos nos miramos unos segundos, terminamos por apartarnos y ella pasar las manos por su vestido, me quito mi abrigo y se lo doy y mientras ella sostiene una punta yo la otra y tomándola de la mano comenzamos a correr el auto, abigail con sus zapatos en la mano que sostengo, subo el capo del auto una vez entro a este y la dirección mas cercana a este lugar es mi hogar pues a pesar de que vinimos por una carretera aledaña a mi vecindario y poco concurrida para resguardarnos de la lluvia lo mejor es ir a casa, mama no se encuentra en esta pues esta de viaje de negocios y regresa en la tarde de mañana,por lo que no habría ninguna incomodidad o duda por parte de mama si nos ve llegar juntos,por lo que conduzco con cuidado pensando en lo resbalosa que esta el suelo y tardamos alrededor de veinte minutos en estar frente a mi casa, bajo yo primero del auto corriendo a abrir la puerta por abigail, esta me mira con el seño fruncido unos segundos para pasar a solo negar levemente y bajar del auto , ambos caminamos rápido a la puerta, paso a abrirla rápido y dejarla pasar primero y seguido voy detrás de ella
Una vez dentro me dirijo a encender las luces pero me doy cuenta que no hay electricidad,por lo que tendremos que esperar a que pare la lluvia y repongan la energía
-parece que tendremos que usar velas-digo y ella asiente
-voy a buscarlas-dice y asiento-puede..puedes subir por toallas para secarnos en lo que esperamos que se detenga la lluvia?-pregunta
-claro,ya vuelvo-digo y camino al armario por un par de toallas grandes,por lo que encontrándolas un par de minutos después pues con la oscuridad es mas dificl de ver,regreso a la sala de estar y abigail esta terminando de encender las velas,opto por quitarme los zapatos y camisa y quedar con la camisa de fondo y medias, uso mi toalla y me quito el pantalón, al alzar la mirada abigail me ve con el seño fruncido
-te vas a resfriar-digo con la toalla sobre mis hombros
-pero no me voy a desvestir-dice y niego
-no es para que te quites todo,debajo traes el vestido de fondo no?-pregunto y ella asiente-quédate con ese,y quítate los zapatos para que tus pies entren en calor-digo y me dirijo a la chimenea busco un trozo pequeño de madera y lo enciendo con una de las velas y lo arrojo a la chimenea y me siento frente a esta, volteo a ver a abi mientras mis manos las extiendo a la chimenea,esta asiente y me hace seña de que voltee, solo escucho como se quita los zapatos, luego como baja el cierre y seguido toma una de los toallas, que son tan largas que para ella quedan como vestido, abigail se para frente a mi con la toalla puesta como la mía, sonrió y ella igual, me pongo de pie y con mi mano coloco un cabello que se le ha escapado del moño, pero noto como esta húmedo,por lo que la miro pidiéndole permiso y ella asiente y voy hasta donde tiene la liga que lo sujeta y lo desato, de verdad que la imagen frente a mi es perfecta, su cabello rizado cae por su espalda,lo sacudo con mis manos y ella solo sonríe y me aparta lanza su cabello hacia al frente y lo sacude un poco y termina lanzando la parte de adelante hacia un lado, me acerco de nuevo para poner unos cuantos cabellos detrás de sus oreja,sus ojos se ven aun mas claros con la luz de la vela y su piel tostada luce dorada, sus labios entre abiertos parecen una invitación y ay..ya no lo resisto
-puedo besarte?-pregunto y ella mira mis labios y luego mis ojos y asiente, acorto la distancia y mi mano va a su cintura mientras con la otra acaricio su mejilla, comienzo a besarla de manera suave, sus labios dejan un sabor dulce que encienden el fondo de mi estomago y me hace sentir que floto alrededor de la habitación, mi agarre se afirma mas y un suspiro se le escapa chocando contra mis labios haciendo que me aparte y la mire con tanto anhelo y deseo como nunca había sentido por nadie, abi me mira a los labios y seguido a los ojos y atrae mi rostro al suyo de nuevo para besarme.
ESTÁS LEYENDO
Abi Y Gabe: El Amor En Tiempos De Lucha
RandomEntonces la conocí....con su cabello rizado, sus ojos oscuros y con todo aquello que me recordaba a un hogar, ella era mi hogar y desde aquella primera vez le pertenecí Fuimos fuego, ardimos, sedientos el uno del otro tanto que nos quemamos en el pr...